Drabble YooSu lemonoso *Q*

Autora: Felina

Pareja: YooSu

Advertencia: Lemon

SIN TÍTULO

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*Yoochun le apretó contra el muro de aquel privado en uno de los antros más populares de la ciudad. Hacía rato que lo único que quería era poder "secuestrarlo" ahí dentro, pero como siempre Junsu había pasado las horas bailando en la pista, provocándole con sus seductores movimientos, con su mirada traviesa, con sus mejillas rosadas de calor, su rostro sudado y tentador. Pero ahora le tenía ahí, solo para él, sin nadie que le moleste, robándole el aliento entre besos apasionados cargados de fogosidad....*

*Junsu jadea y se le pega más a ser posible, frota sus caderas contra las del pelinegro y siente aquella parte de la anatomía de su novio aumentar. Se separan apenas unos instantes para tomar un nuevo respiro antes de unir sus bocas de nuevo, de acariciarse sin pudor alguno sabiendo que pronto las ropas serán más que un estorbo, que las manos inquietas y deseosas de recorrer el cuerpo del otro se encargarán de aquel molesto fastidio en que se ha convertido la tela*

‎*Se escucha vagamente el sonido estridente de la música en el exterior, las paredes de aquel privado no son suficientes para contenerla, pero sí para resguardarles, para darles la intimidad que aquel encuentro amerita. Yoochun se separa y le mira, sonríe perverso cuando sus manos aprietan el voluptuoso trasero de su novio, Junsu jadea pero le devuelve la sonrisa, se relame los labios y contonea las caderas apartándose despacio y regalándole aquel espectáculo en que se convierte la danza que emana de su cuerpo al ritmo de aquella pegajosa tonada que suena suavemente*

*El pelinegro se deleita, le observa detenidamente siguiendo cada onda que realiza con su perfecta figura, se relame los labios, se los muerde, se enciende un poco más, palpita el bulto entre sus piernas y se ve obligado a sentarse en aquel cómodo sofá doble de cuero negro. Junsu le sigue, baila un poco más para él, gira y muestra su S Line, se deshace uno de cada botón de su camisa blanca, le muestra lentamente la desnudez de sus hombros, le coquetea, le provoca... le obliga a rendirse a la tentación de cada centímetro de su cuerpo, quiere que respire el aliento ardiente del calor que se desprenda de ambos en aquella habitación a media luz de neón*

*La primer prenda cae al suelo, torso desnudo de piel sudada que queda al descubierto. Yoochun le imita, con algo más de brusquedad y ansiedad tira al suelo su propia camisa, le llama con la mirada, quiere tocarle ya, recorrerle y terminar por hacerle suyo de una vez; pero Junsu agita la cabeza y se aleja un par de pasos comenzando a deshacerse del cinto de su ajustado pantalón negro. La vista es demasiado provocativa, al pelinegro le duele la entrepierna así que comienza a tocarse, frota el bulto entre sus pantalones antes de hacer a un lado las ropas y exponer su virilidad. Junsu se muerde los labios de nuevo, saborea aquel trozo de carne que es solo suyo y despacio termina de desnudarse. Están en igualdad de condición, la excitación se ha elevado por los cielos*

*Yoochun le llama de nuevo, Junsu niega y se recarga en el muro tras de sí, se toca con descaro, gime a sabiendas de que le encenderá mucho más, que será el pelinegro quien irá a él, quiere que lo haga, que se rinda ante su perfección. El pelinegro gruñe por lo bajo en clamor de excitación, se levanta y le busca, sujeta su cintura y le besa casi con salvajismo, le acaricia la espalda, los muslos, los glúteos, todo cuanto encuentran sus manos a su paso, rozan sus erecciones y sienten que enloquecen, que el mundo da vueltas, que el calor les sofoca*

*Junsu enreda una pierna en la cintura de Yoochun, jadea en su oído que le tome, que le haga suyo ahí y ahora. El pelinegro obedece sin mediaciones, le gira y sujetando sus caderas con firmeza se perfila simulando embestidas, le prepara con sus dígitos con demasiada prisa. Le penetra de una con fuerza, ambos gimen mezcla de placer y dolor, Yoochun no aguarda, embiste una y otra vez con profundidad, Junsu se afirma apenas al muro, duele un poco pero es más el placer, cada oleada le estremece de pies a cabeza y todo lo que sale de sus labios son gemidos, roncos jadeos que inundan junto con los de su novio aquella habitación*

‎*Pero aquello no le es suficiente, Yoochun quiere ver su rostro abnegado en gozo, sale de su interior y le gira de nuevo, le besa apasionadamente y con fulgor le penetra de nuevo, Junsu gime en medio del beso y termina enredando sus piernas en la cadera del pelinegro, afianzándose a sus hombros con sus manos, botando de arriba abajo al ritmo de aquellas estocadas que les envuelve en placer, que les arrastra al éxtasis, que les lleva a explotar en un orgasmo exquisito. Sudan, respiran agitados, se besan de nuevo sabiendo que todavía hay tiempo, que aún les espera una ronda en el sofá y tal vez otra en variedad... porque imaginación para hacer el amor, siempre tendrán*

FIN

Andaba pervert so ;D ¿Coments?