Oneshot YooSu~

Pues nada, que había comenzado a escribir esto y era un drabble, pero me he emocionado escribiendo y salió algo más largo, así que se los dejo ;D espero lo encuentren entretenido~

Título: JODIDO KARMA

Autora: Felina

Pareja: YooSu

Género: Romance, pseudo comedia xD

Clasificación: NC-15

JODIDO KARMA

*****Yoo~Su*****

Junsu está ahí, contándole como cada vez cómo ha sido el rompimiento con uno más de sus novios. Y aunque Yoochun es buen amigo, “su mejor amigo” según palabras del propio rubio, el de cabellos azabache está cansado de escuchar.

- Y entonces él dijo que debíamos terminar, le pregunté si es que yo había hecho algo malo o qué había pasado pero él solamente repitió que terminabamos y se marchó. Yoochun ah, ¿Es que no soy lo suficientemente atractivo, interesante, inteligente o exitoso?

- Tal vez simplemente no es el indicado… - respondió, como por enésima vez en el último año. Demasiadas relaciones rotas de cualquier manera deben señalar algo más, pero el peliazabache prefiere no pensarlo.

- Tan solo teníamos dos meses saliendo. Aunque en realidad había comenzado a complicarse, el sexo era genial, como con todos, pero sentía que faltaba algo. Yoochun ah, ¿Crees que sea cosa realmente del destino? ¡Todos mis noviazgos han roto al segundo mes!... – exclamo casi indignado, resoplando frustrado con las redondas mejillas rosadas.

- Deberías intentar tomarte un descanso. Dedícate tiempo para ti, no tienes que estar con alguien todo el tiempo, Junsu ah… - aconseja sobándose el puente de la nariz.

Su amigo rubio sigue hablando, pero él se desconecta un momento. No es sano, no debe serlo. Escuchar al chico clavado en tu corazón hablando de sus fallidos intentos de relaciones románticas debe ser una cosa del karma, él debió ser una persona muy mala, pecadora quizá. ¡A saber! Tan solo quiere que el rubio calle, que deje de parlotear y memorar los grandes momentos de dicha con su expareja, que pare de lanzar el extenuante recuento de los intensos encuentros íntimos.

- No necesito escuchar los detalles de tus aventuras sexuales… - corta de tajo y poniéndose de pie. Se interna en su propia cocina y abre el refrigerador en busca de una cerveza. Algo que le ayude a aturdir al menos un poco sus sentidos, no tiene corazón para echar de su casa a su amigo, pero tampoco quiere que aquellas palabras le taladren dolorosamente el pecho. Si tan solo él hubiese tenido antes el valor de confesarse.

- Tan solo pienso, Yoochun ah, el error debe estar en mí. Soy el común denominador del fracaso de cada noviazgo que he intentado. No se trata del sexo, cada vez me han dicho que soy excelente en la cama…

- Junsu… - le nombra con cansancio, destapando esa cerveza y cerrando los ojos al dar un trago largo. Sabe que el rubio de todas maneras no detendrá su repentina verborrea. Es así tras cada rompimiento. Y él siempre se convierte en su “paño de lágrimas”. ¡Jodido karma!

- Tampoco es que sea tan malo cocinando, aunque a menudo he terminado pidiendo comida a domicilio o saliendo a restaurantes.

- No todos los amores “nacen” por el estómago.

- Tampoco puede decirse que sea desordenado, no soy un obseso con la limpieza pero definitivamente no soy desordenado. Tengo un buen trabajo y además gano muy bien, inclusive tengo mi propio auto y soy independiente. No puedo entender por qué no he tenido una relación duradera.

- Deja de quebrarte la cabeza y hazme caso. Tan solo tómate un tiempo, la soltería no es tan mala… - el peliazabache estuvo por retractarse de sus palabras pero se mordió la lengua a tiempo. Ciertamente él es un soltero que no quisiera serlo. Pero el único chico con quien le gustaría salir está justamente frente a él y es un idiota.

- Es cierto, pero Yoochun ah, sabes que no me gusta estar solo. Además, tú estás soltero pero no pareces del todo feliz con ello, por qué no sales un poco, últimamente todo lo que haces es trabajar. Ya ni siquiera salimos con los chicos como antes.

- Eso es porque Yunho y Jaejoong están próximos a casarse y ChangMin con Hayami se repasan el kamasutra para asegurarse de no haber dejado una sola postura sin experimentar.

- ¡Ese libro es todo un lio! ¡De verdad, hay posturas complicadísimas! ¡Ni que fuera tan elástico o fuerte! – Junsu exclamó ofuscado, con el rostro repentinamente colorado y una molestia irracional. Yoochun suspiró y volvió a frotarse el puente de la nariz. Él no debería haber sacado el tema.

- No es como si se tratara de una ley que te montes cada maldita postura.

- Pero son interesantes~ - el rubio finalmente formó uno de esos graciosos pucheros que le roban otro suspiro al peliazabache. ¡Jodido karma! – Haz intentado la de…

- ¡Suficiente! – exclama e interrumpe el diálogo del rubio… - No quiero seguir hablando de sexo, ¡y menos si es de lo que haces o con quien lo haces! – el rubio pestañeó lindamente… - ¿Ya viste la hora que es? ¡Las tres de la mañana!

- ¡Oh dios mío! – el rubio mira su reloj de muñeca y se apresura a la estancia… - Tengo una presentación ante la Junta mañana a primera hora, al menos debo dormir un par de horas y estar presentable, unas ojeras serían una pésima imagen… - buscó su chaqueta y su móvil pero antes de salir del departamento de su amigo éste ya había sujetado su brazo… - ¿Qué sucede?

- Quédate a dormir, te vas temprano a tu departamento si quieres, pero ya es muy tarde y no soy tan malo como para dejarte ir así nada más. Duerme aquí, así tendrás al menos unos minutos más de sueño…

- Gracias… -  Junsu sonrió radiante y besó la mejilla de Yoochun.

El peliazabache murmuró un “vete a dormir” y dio media vuelta. Arrastró los pies hasta su propia habitación y sin mirar atrás cerró la puerta. El rubio dormiría a lado, en la sala que estaba destinada a ser su oficina de trabajo pero que desde hace mucho tiempo se ha convertido en “la habitación” de su rubio amigo pues cada tanto terminaba durmiendo ahí. Si era por haber conocido a un nuevo “pretendiente”, o romper con cada uno de sus exnovios.

- Jodido karma… - Yoochun gruñó contra la almohada, abrazándola graciosamente y suspirando con pesar. El chico del que está enamorado duerme en la habitación de a lado y es, por trillado que suene, su mejor amigo… - Gracias, jodido karma… - ironizó cansado y en cuestión de minutos cayó rendido en los brazos de Morfeo. Aunque él preferiría dormir en brazos de Junsu.

J O D I D O  K A R M A

*****

Junsu es un chico simpático, risueño, agradable, atractivo, inteligente, con un buen trabajo y sin duda exitoso. A sus 27 años puede decir que ha alcanzado importantes metas en muchos aspectos de su vida. Tiene buenos amigos, una familia ejemplar, estabilidad económica… pero un asco de vida sentimental. Eso le desanima un poco, nadie puede ir y juzgarle por querer una vida “perfecta”; y no es que no quiera los errores y obstáculos propios del escabroso camino de la vida. ¡Tan solo quiere un novio que le ame y a quien ame igual!

- Estoy cansado de los amores de dos meses… - bufó molesto a su propio reflejo en el espejo de la ducha. Acaba de tomarla y aunque tiene tiempo libre, se la piensa para salir… - Yoochun dijo que lo mejor era tomarme un tiempo para mí, pero realmente no dijo nada acerca de no salir a bailar… - sonríe y en una hora ya está camino a un conocido antro de la ciudad.

El sonido estridente, las luces multicolores, los lásers bailando al ritmo de la música. Gente, gente y más gente. Extraños que están ahí en compañía de amigos quizá, de la pareja, o con el único fin de ligar. Él salió a veces así. Pero hoy quería “comportarse”. Hoy solo quiere bailar y liberar un poco de estrés. ¡No es su culpa que más de alguno le aborde!

- Junsu…

La ronca voz varonil que conoce de memoria le hace girar entre sorprendido y nervioso, cual niño que ha sido pillado en una travesura…

- Yoochun ah… - sonríe y mira dubitativo hacia el peliazabache y el chico de cabellos castaños que baila pegado a él… o bailaba, pegado a él… - Esto… ahm…

El peliazabache mira al acompañante de su amigo y luego al mismo rubio. Niega con la cabeza y da media vuelta con un pinchazo en el pecho que le hace sentir incómodo y sofocado. Junsu no cambiaría. Y él no tiene por qué esperar que lo haga. Después de todo es su vida. Y él el cobarde que nunca tuvo el valor de confesarse.

- ¡Yoochun!

- Vuelve con tu “amigo”… - casi escupe con enojo, el aire fresco de la noche espabila un poco las ganas que tiene de discutir y simplemente cruza la calle, el parking está a una calle más.

- Pero Yoochun, déjame explicarte…

- Soy tu amigo, no tienes que explicarme nada…

- Pero quiero.

- Siempre quieres explicarme las cosas que haces y hasta las que dejas de hacer.

- Por que eres mi mejor amigo y te quiero. Y eres el único que realmente me escucha. Intenté seguir tu consejo, en verdad lo intenté.

- Se nota… - espetó por lo bajo, preguntándose de pronto si es que camina muy despacio o la maldita calle se extendió mágicamente.

- Solo salí para bailar. Iba a llamarte, pero luego recordé que no te gusta salir, las últimas veces siempre decías que tenías trabajo pendiente. Es verdad, saliste y ni siquiera de broma me llamaste para invitarme, ¡que malo eres Chunnie! – le chilla así de pronto pucheroso; sin darse cuenta que el cuerpo del peliazabache se tensa tras escuchar aquel mote.

- Hacía tiempo no me decías “Chunnie”…

- ¿Eh?

- Exactamente desde que comenzaste  a tener citas y novios.

- ¡Pero siempre has sido, eres y serás mi Chunnie! – exclama infantil y así se cuelga del brazo de su amigo… - ¿Estás enojado porque salí?

- Es tu vida, puedes hacer lo que quieras y yo no tengo por qué meterme… - responde con firmeza pero siendo suave, y del mismo modo deshace el agarre de su amigo… - Así que deberías regresar, sigue divirtiéndote como planeaste al salir.

- En realidad llegaste a tiempo. Podría haberme largado con ese chico y solo habríamos tenido sexo. Supongo que está bien si me mantengo en abstinencia algún tiempo. El mundo no se acaba por no tener sexo, ¿no? – bromea pero sus mejillas de igual manera se tiñen de rubor. El peliazabache se limita a asentir y seguir caminando.

- ¡Mierda! – se golpea la frente y frunce el ceño. Se ha pasado por una calle del parking donde dejó su auto.

- ¿Qué?

- Mi auto…

- ¿Qué tiene?

- Nos pasamos una calle… - indica hacia atrás y camina sobre sus pasos por donde venían.

- Vamos a tu depa…

- Voy a embriagarme con cerveza…

- Está bien. Yo te cuidaré… - sonríe cual si su amigo hubiese dicho cualquier cosa y el peliazabache no evita esa sonrisa despistada. Junsu siempre será el dueño de su corazón. Lo sabe, lo acepta y lo sufre.

Y oh sí, si el jodido karma no estuviera en contra.

*****

- ¡No!

- Pero Yoochun ah…

- Ahora soy “Yoochun ah” otra vez, ¿no? ¡Claro! ¡Todo porque el señorito ha decidido tener otro estúpido novio que le terminará en un par de meses! ¡No me jodas, Junsu!

El rubio le miró perplejo. Esta es la primera vez que su mejor amigo le habla así. Y por alguna razón se siente incluso peor que cada rompimiento del pasado. Yoochun dio media vuelta y se largó. De su propio departamento. Si está bien sabido, el rubio pasa tiempo ahí solo cuando ha comenzado a salir con alguien, y tras terminar con cada uno de esos “alguien”. Junsu se quedó pensativo, no entiende por qué el repentino enojo de su amigo. Bueno, tal vez porque haya algo de razón. Después de todo no hace ni dos semanas que terminó una relación y está por liarse con alguien más. Alguien casi extraño.

- Por qué me duele el corazón… - se pregunta a sí mismo y termina por dejarse caer  en el sofá de la estancia de su amigo. Extraña horrores que esté ahí, junto a él aunque sea en absoluto silencio, por lo menos escuchándole.

*****

- Yoochun ah…

- ¿Mh?

- Ni siquiera fueron dos meses… - el rubio murmuró con semblante triste. Y su amigo no pudo negarle el paso a su departamento. Otra vez… - No puedo entenderlo.

- Tienes que dejar de tratar de entender. No hay nada malo en ti, lo malo es que no quieras darte cuenta de que mientras más busques al novio perfecto, menos lograrás encontrarlo. Has salido con demasiadas personas en poco tiempo. La mitad de ellos fueron ligues de una noche de antro, no les conocías y no les conociste. El amor no es algo que caduca en dos meses, Junsu ah. El amor es tiempo, paciencia, soledad, momentos buenos y malos, es mucho más que sexo, una salida a pasear o a bailar.

*****

- ¡Chunnie!

- ¡No! ¡Ni se te ocurra venir a decirme que “conociste” a alguien anoche! ¡Estoy harto de que vengas todo jubiloso a restregarme otro de tus estúpidos novios! ¡Y aún más estaré harto de que en dos meses vengas triste por otro rompimiento! ¡Si no fueras tan terco y ciego te darías cuenta de que hay personas que te quieren de verdad frente a tus ojos!

- Pero Chunnie…

- ¡Y no me digas Chunnie! ¡Pero claro, si es mi culpa! ¡Y del jodido karma también! ¡Estoy cansado de ser tu mejor amigo cuando estoy enamorado de ti hasta la médula! – gritó fuera de sus casillas, sin percatarse de esos ojos que se abren desmesuradamente y de esas mejillas que se sonrojan lindamente ante su “declaración”… - ¡Así que si vas a tener un novio nuevo! ¡Bien por ti! ¡Pero a mí no me interesa!

- No venía a hablarte de ningún nuevo novio. No he salido con nadie desde hace seis meses. Cuando seguí finalmente tu consejo, Chunnie. Y me ha servido para darme cuenta de muchas cosas. Al fin sé por qué no podía tener una relación estable que durara más de dos meses… - el peliazabache gruñó todavía medio enojado, e inconsciente de la declaración que acababa de hacer…  - Una de las razones que todos mis ex dieron fue que no podían estar con alguien que a pesar de ser excelente en la cama, tenía su mente y su corazón en cualquier otra parte. Decían que yo estaba enamorado de alguien más y que no podían competir contra eso. Terminaba hartándoles porque hablaba siempre de él… - Yoochun pensó que estaba más que jodido. Ahora resultaba que en todo ese tiempo Junsu estaba colado por otro.

J O D I D O   K A R M A

- Entonces aprovecha y decláratele. Tal vez ahora sea el indicado…

- Es lo que pensé. Pero mientras analizaba las cosas me di cuenta de que no tenía idea de quién era ese “alguien”. Con mis ex solo hablaba de la familia, de Jaejoong, de Yunho, de ChangMin y Hayami, de ti. Familia y amigos. Yo no sabía cómo podía estar enamorado de alguien y no saberlo. ¿No se supone que cuando te enamoras lo lógico es saber de quién lo estás?

- Sí… - al menos él siempre ha sabido que es ese tonto rubio frente a él el dueño de su jodido corazón.

- Soy una excepción a la lógica… - ríe bobamente y su escandalosa risa le contagia una sonrisa.

Yoochun sabe que éste podrá ser el –otro– peor momento de su vida, pero espera que esta vez sea diferente. Y Junsu haya encontrado al indicado. Al dueño de su propio corazón. Aunque siga siendo el estúpido mejor amigo.

- ¿Sabes? No fue fácil para mí descubrirlo. Por eso cuando lo hice vine corriendo hasta aquí. ¡Tenías que ser el primero en saberlo! – exclama visiblemente emocionado, con las pupilas brillantes y las mejillas rosadas.

- Ok, suéltalo que se nota que mueres por decírmelo… - el peliazabache sonrió comprensivo. No tenía otra opción. Él tenía que ser quien ha sido por años para Junsu. Su mejor amigo.

- La persona de la que más hablaba con mis ex es la misma de quien hablo más cuando estoy con mi familia y amigos. Incluso creo que Jaejoong y Yunho, como ChangMin y Hayami intentaron hacer que me diera cuenta de eso, pero yo estaba tan ocupado buscando al novio perfecto que no capté. ¡Si soy despistado! ¡Pero ya lo sé! Eres tú…

- ¿Qué?

- Yoochun ah. Eres tú. La razón por la que mis noviazgos se iban al caño tras dos meses de relación. El “alguien” que molestaba tanto a mis ex que por eso me terminaban. Yoochun ah. Eres tú de quien he estado enamorado incluso sin saberlo. ¡Y lo siento mucho! ¡Entiendo si estás enojado porque tardé en darme cuenta y te hice la vida imposible con mis tonterías! ¡Pero no te permitiré darme calabazas!

- ¿Qué? – el cerebro del peliazabache naturalmente estaba trabado. Esto era demasiada información, repentinamente, y en el momento más… raro.

- ¡Chunnie! ¡No soy bueno en esto de las declaraciones, coopera un poco!

- ¿Estás declarándoteme? – el rubio asintió, coloreando sus mejillas un poco más… - ¿A mí? ¿A tu mejor amigo? No tiene sentido.

- ¡Ya sé que no tiene sentido! Bueno, aparentemente no tiene sentido. ¡Pero es la verdad!

- No estoy para bromitas de estas, Junsu.

- ¡No estoy bromeando! ¡Te estoy diciendo que estoy enamorado de ti! ¡Me gustas, te quiero!

- No puede ser.

- ¡Oye! ¡Te prohibo dudar de mis palabras! ¡Ya te dije que no soy bueno declarándome, no es mi culpa que siempre me hubiesen abordado! – tras decir lo último el rubio se cubrió la boca. Mala, muy mala idea sacar a colación eso. ¡Si se está declarando!

- Y no quiero ser uno más de tus ex, no quiero ser otro de tus amoríos, no quiero una madita fecha de caducidad que venga a dos meses de iniciar un nov… ¡lo que sea!

- ¡Pero eso no va a ser así!

- ¿Estás seguro?

- ¡Claro que sí!

- ¡Decías eso tras cada nuevo novio! ¡Joder, Junsu!

- ¡Pero tienes que creerme, Chunnie! ¡Estoy hablando en serio! ¡Muy en serio!

- No…

- Te Amo… - susurra con los puños apretados, sintiéndose así de pronto impotente e incapaz de culpar a su amigo. Él tiene razón en dudar de lo que le está diciendo, él no hizo mucho para no quedar como un simple player… - Te Amo, Yoochun ah. Y esas palabras nunca se las dije a nadie, porque en el fondo sabía que ninguno era la persona indicada… - solloza y se muerde el labio inferior. Esto estaba tomando un rumbo incierto y eso le asustaba de sobremanera. La esperanza de que sus sentimientos fueran correspondidos se había sembrado minutos atrás cuando en medio de su enojo Yoochun mismo dijo estar enamorado de él.

- ¿Y en dos meses vas a seguir amándome?

- Y después de ellos, de años y toda mi vida. Yo me he equivocado muchas veces, no lo niego; pero estoy siendo sincero, como nunca en todo este tiempo. Eres la única persona a la que no le mentiría, y menos con algo así. Te Amo… - clavó sus pupilas chocolate en los profundos ojos negros y tembló. Tembló bajo aquél penetrante abismo que le maravillaba como nada ni nadie. ¡si es que había sido bastante ciego y lento!

- También me gustas, también te quiero… - el peliazabache se rascó la nariz con gesto nervioso… - Puede que incluso esté enamorado de ti y te ame. Tal vez en dos meses lo sepa… - carraspeó tratando de hacerse el importante, desviando la mirada cuando vio la sonrisa ampliarse en el rostro de su… de su… ¿novio? Bueno, Junsu se ha declarado. Pero, ¿debería ser él quien le pida formalizar la relación?

- Yoochun ah…

- ¿Mh?

- Hace cinco minutos gritaste a pulmón abierto que estás enamorado de mí hasta la médula.

- Jodido Karma… - gruñó al tiempo que los brazos tímidos del rubio se enredaron en su cintura y su rostro se acercó al suyo, sonriéndole cual niño pequeño que espera su recompensa tras una difícil tarea… - ¿De verdad lo dije?

- Alto y claro… - el rubio sonrió rozando su nariz con la del peliazabache…

- Bueno… - sus manos fueron a dar a la espalda del rubio estrechando el abrazo, devolviendo el gesto tierno del roce de sus narices, compartiendo el aliento, sonriéndose mutuamente… - Te Amo, Junsu ah…

- También Te Amo, Chunnie~ - un roce de labios y un suspiro. Casi parece el primer beso de los dos.

- No voy a terminarte a los dos meses aunque la pases hablando de ese “alguien” en tu corazón… - sonríe contento, estúpidamente embobado con la risa escandalosa de su rubio.

- Es una promesa… - Junsu murmura contra los sensuales labios de Yoochun… - tú, mi último novio y mi primer amor. Lo nuestro será eterno.

- Para toda la vida… - corrobora y es su manera de formalizarse.

Fusionan sus labios y sellan la promesa con aquel beso dulce, apasionado, inquieto e incluso torpe. Pero perfecto. Porque al fin sus corazones se han encontrado y el amor ha llegado.

Con todo y a pesar del jodido karma.

*FIN*