*O* este era un shot que hice cuando salió el video de INTOXICATION, pero a petición de mi amiga Maki se hizo two shot... espero que les guste *O*
Título: INTOXICATIÓN
Autora: Felina
Clasificación: NC-17
Pareja: SuChunSu
Género: Romance
Resumen: La creatividad de Junsu para mostrarle a Yoochun la coreografía de su nuevo single les lleva a una más de las experiencias perfectas de su amor…
Advertencia: Lemon
**INTOXICATIÓN**
*****
Junsu estaba esperando pacientemente la llegada de Yoochun esa noche... el que su novio estuviera ahora ocupado en reuniones acerca de ese nuevo drama les quitaba más del poco tiempo que últimamente, a pesar de las circunstancias, podían realmente pasar a solas... es que quería darle una sorpresa especial... bailaría para él en primicia, el baile que conformaría la coreografía de su nuevo single en solitario...
El pelinegro llegó cansado pero feliz de por fin poder ver a su novio...
- buenas noches amor... - le saludó atrayéndole por la cintura y besando al instante esos labios que extrañaba cada día más... el castaño oscuro se dejó hacer envolviendo sus manos tras la nuca de su novio y pegando su cuerpo... le subiría el calor antes de tiempo de seguir así...
- Chunnie, ven... te quiero mostrar algo... - tomándole de la mano, el delfín le llevó directo a la estancia, le sentó en una silla y tomándole por sorpresa, colocó en sus muñecas unas esposas imposibilitándole todo movimiento...
- Junsu?... - el pelinegro cuestionó mirándole con una ceja enarcada mientras que su novio simplemente sonreía divertido mientras daba unos pasos atrás y colocaba de fondo una melodía que el ratón no conocía del todo pero le sonaba familiar...
- te conozco, la mínima oportunidad de moverte hará que arruines mi sorpresa... - el delfín sonrió más mientras se preparaba al centro de la estancia listo para comenzar con su baile...
- estás tratando de ser pervertido conmigo, baby?... - cuestionó con un dejo de burla, pero sintiendo ese calor en el bajo vientre que solo su novio podía inspirarle con una sola de sus miradas... una de esas que sexys se curvaban en esos labios gruesos que le regalaron un beso volado antes de que el cuerpo del delfín comenzara a moverse al ritmo de esa música lenta y sensual...
Junsu dejó que la melodía envolviera su cuerpo, y las notas fluyeron de su garganta con esa voz sensual que a Yoochun le ponía con facilidad... y más, si iba acompañada de esos movimientos exquisitos del cuerpo perfecto de su novio...
Su inglés seguía siendo realmente malo... pero ... pasaba a segundo plano por el simple hecho de dejar que sus ojos se devoraran esa line S que le estaba enloqueciendo ya... Yoochun notó un escalofrío correrle por la columna vertebral cuando su novio realizó aquel movimiento moviendo sus caderas al frente... era seductoramente irresistible... y quería lanzársele ya a devorárselo con besos... pero las malditas esposas le impidieron todo movimiento... su novio había tenido razón en atarle...
Junsu notó la intención de su novio y sonrió coquetamente al tiempo en que capia sobre el suelo realizando aquel movimiento por demás sexy en el que deslizaba lentamente su chaqueta mostrando apenas sus desnudos hombros para volver a cubrirse notando cómo la entrepierna de Yoochun crecía entre sus pantalones...
Su objetivo se estaba cumpliendo a la perfección... uno a uno ejecutó los pasos hasta que la música terminó... caminó despacio hasta su novio, sentándose a horcajadas sobre sus caderas... los penetrantes ojos negros de Yoochun le miraban con deseo...
Una gota de sudor resbaló por el contorno del rostro del castaño oscuro, delineó su quijada y se perdió por su cuello dándole un toque erótico que solo consiguió que el pelinegro se sintiera algo más ardiente... las manos de Junsu resbalaron por su pecho con parsimoniosa lentitud hasta colarse bajo su camiseta y acariciar directamente esa piel que ardía bajo su tacto...
- tan pronto, Chunnie... - ronroneó juguetón mientras se inclina para rozar los labios de su novio sin llegar aún a besarle...
- Su... - gruñó inconforme el pelinegro... su novio soltó una risita juguetona al tiempo que se ponía de pie y notaba que el ratón se removía inquieto sin apartarle la mirada pero queriendo deshacerse de las esposas...
- paciencia, mi ratoncito pervertido... - volvió al centro de la estancia y colocó de nuevo la melodía, repitiendo nuevamente su baile... solo que esa vez... cuando cayó al suelo y realizó aquellos sexys movimientos, la chaqueta sí que abandonó su cuerpo, y así cuando la melodía culminó, el delfín se encontraba solo con esos ajustados bóxers negros sobre los que resaltaba su propia erección...
Yoochun gimió involuntariamente al sentirle sentarse nuevamente sobre sus caderas, el calor de los dos era abrumador de hecho... y sus bocas no tardaron en unirse en un apasionado beso casi salvaje en el que sus lenguas se enredaron lujuriosas compartiendo el fuego de su deseo...
- Su, las esposas, por favor... - murmuró apenas consciente el ratón, tirando una vez mas de ellas queriendo sacárselas para tocarle como tanto quería ya...
No tan rápido, mi ratoncito pervertido... - sonrió de nueva cuenta el delfín, mordió el labio inferior de su novio y dejó que sus manos vagaran por el cuerpo del pelinegro...
Una a una las prendas de Yoochun fueron encontrando destino en el suelo conforme Junsu las fue retirando con absoluta sensualidad, murmurándole con sensualidad más de esas frases sexys de su canción... y ahí lo comprobó... Junsu era su droga, su propia intoxicación...
El pelinegro sintió un ligero ardor en sus muñecas de tanto que tiraba en su inútil anhelo de poder tocar el cuerpo ardiente de su novio... ahora la piel desnuda de ambos se rozaba y sus bocas se fundían en casi desesperados besos fogosos que les estaba envolviendo en ese calor apasionado que les llevaba a entragarse cada tanto haciendo el amor...
Ambos gimieron entre besos conforme Junsu se movía sinuosamente sentado sobre el palpitante bulto de Yoochun, su trasero quedaba justo en su erección y sabía que moría por poseerlo... pero esa noche, a él le tocaba jugar... llevó sus manos hasta la ropa interior de su novio y la retiró lentamente dejándole totalmente desnudo y a su disposición…
- Junsu… - jadeó el pelinegro aún queriendo que sus manos fueran liberadas para poder tocarle…
- ¿mh?... – sonrió al tiempo que volvía a balancear sus caderas dejando que la erección del pelinegro sintiera el calor de su trasero… de su intimidad…
- mhh… Su ahh… - gimió el ratón moviendo sus caderas con insinuación como pretendiendo embestir aquel pasaje que solo se alejaba dejándole con ganas… - baby, qué pretendes, ¿ah?... – el ratón jadeó consciente de lo excitado que se encontraba ya…
- solo te demuestro lo mucho que me intoxicas tú mismo, Chunnie… - jadeó mientras se arrodillaba en medio de las piernas de su novio y daba una lamida a su erección…
- mmhhh… - gimió ronco el pelinegro ante esa acción, arqueó la espalda y sintió un escalofrío recorrerle de pies a cabeza… casi se atrevía a decir que nunca Junsu le había excitado tanto…
El delfín sonrío complacido y masajeó de arriba abajo por unos instantes sintiéndole totalmente rendido a sus movimientos, la melodía de su nueva canción seguía escuchándose de fondo, esa vez, ya montada con todos los arreglos... y era un incentivo más para ese momento... la verdad era que los movimientos los había pensado para Yoochun... desde la primera vez que le había tocado con deseo, Junsu ya solo había podido sentir ese calor abrasador cuando más en la intimidad podían disfrutarse... era su droga... la sustancia que intoxicaba con deseo y amor cada fibra de su ser...
Yoochun seguía gimiendo sin poder ni querer evitarlo... le encantaba cuando su novio tomaba esa faceta traviesa y sexy... así como cuando realizó aquel baile sexy de my page, tanto más con xiahtic, y ahora... INTOXICATION iba a ser una bomba de sensualidad, Junsu explotaría del todo ese lado sexy que tan locas volvía a las fans y que terminaba por atraer miradas de propios y extraños... y aunque estaba seguro de que le atacarían los celos posesivos por su novio, también lo estaba de que al final lo más preciado de su novio, seguiría siendo solo suyo... su AMOR...
- aahhh... - gimió algo más agudo y cerrando los ojos cuando la boca del delfín se tragó su erección...
Los labios del castaño oscuro se deslizaron por su extensión... el pelinegro estaba tan excitado, que temía quedar en vergüenza y correrse apenas un par de succiones después... Junsu subía y bajaba con calma, disfrutando de ese sabor que ya sudaba la erección de su ratón, dejando que su lengua le recorra también lentamente... aumentando luego de a poco el ritmo de sus succiones...
Los gemidos del pelinegro escapaban casi indecentes desde su garganta, le estaba volviendo loco esa boca tan caliente que seguía torturándole con su tibieza y ritmo intermitente entre lo lento y la velocidad... sentía el calor concentrándose en su bajo vientre y todos los escalofríos que corrían por su columna vertebral culminar en la punta de su erección... sintió los labios de su novio presionar en esas últimas succiones cuando finalmente explotó gritando el nombre de Junsu y sintiendo los temblores del orgasmo correr por su cuerpo...
El delfín contento se tragó su semilla, rastros del semen de su novio quedaron en la comísura de sus labios y las lamió con sensualidad chupando luego tres de sus dedos... el ratón aún estaba disfrutando de su orgasmo cuando sintió que su novio le abría las piernas y lo corría un poco hacia el frente... atontado por su éxtasis no tuvo consciencia de lo que estaba pasando hasta que un dedo rozó su intimidad...
- Junsu?... - preguntó con la voz todavía excitada, mirándole apenas con sus orbes oscuras confundidas...
- Chunnie... quiero hacerte mío esta vez... que... te intoxiques de mi esencia... - susurró ligeramente avergonzado, sintiendo sus mejillas encenderse en carmesí luego de toda esa sensualidad que acabara de desbordar minutos atrás... su dedo seguía rozando la intimidad de su novio, pero sabía que desistiría apenas se lo pidiera...
-Suéltame... - pidió con voz ronca... el delfín suspiró y sonrió con un dejo de desilusión, liberó la esposas dejándole en libertad y se dejó besar por ese Yoochun que poniéndose en pie le atraía pegándole a su cuerpo mientras sus hábiles manos se deshacían de sus apretados bóxer...
Una vez desnudos los dos, el pelinegro le recostó sobre el suelo de la estancia colocándose sobre su cuerpo... tomó la mano del castaño oscuro y él mismo la dirigió a su intimidad...
- Chunnie...?...
- con cuidado, baby...
Y así, uno a uno los dedos del delfín fueron ganando espacio en aquel estrecho pasaje que lentamente se fue dilatando... estaba tan excitado y contento de que su novio accediera a su deseo de tomarlo, que algo ansiosamente terminó de prepararle...
Yoochun estaba seguro de que de ninguna manera habría podido negarle tal deseo después de lo mucho que le entregaba, de la forma en que siempre le tenía presente... aún en los mínimos detalles, Junsu siempre dedicaba su esfuerzo a él... le amaba con tal entrega, que había ocasiones en que el pelinegro sentía que no le merecía, que demasiado el Destino le había entregado permitiendo que Junsu se hubiera enamorado de él... cuando se dio cuenta de que estaba listo y los dedos de su novio abandonaron su intimidad, él mismo invirtió las posiciones quedando bajo el cuerpo del delfín...
Con un dejo de preocupación, Junsu se perfiló deslizándose lentamente en su interior, primero la punta y ya estaban esas primeras lágrimas resbalando por las mejillas de ese Yoochun que apretaba los puños y hacía lo imposible por aguantar el dolor inminente de la penetración... Junsu se apuró en besarle y susurrar nuevamente con sensualidad y cariño en su oído mientras su otra mano estimula la erección dormida de Yoochun...
Luego de un rato, ya se encontraba completamente dentro y quieto aguardó por que el pelinegro se acostumbrara a su intromisión... era tan delirantemente placentero encontrarse dentro de su novio, que el calor de su cuerpo no tenía comparación con nada... era en todos los sentidos posibles, la intoxicación de placer más rica posible de experimentar...
- ya muévete, Su... - jadeó aún ligeramente adolorido el ratón...
Junsu le miró con ese brillo en sus ojos imposible de ocultar... y comenzó a embestir, primero con calma, queriendo no solo no hacerle más daño, sino también disfrutar el mínimo roce de su erección caliente deslizándose dentro y fuera de aquel estrecho pasaje...
- aahmm... - los gemidos más roncos iban escapando de su garganta conforme su erección embestía...
Pronto el ritmo aumentó, y los gemidos del pelinegro le siguieron sin pudor alguno gozando entonces también de aquellas estocadas certeras... unos momentos después, chupó tres de dus dedos y los llevó al trasero de su novio, el delfín respingó apenas consciente de que un dedo se había colado en su entrada...
Más no dejó de embestir contra Yoochun, quien recibía con auténticos gritos de placer cada una de sus estocadas, al tiempo que dos de sus dedos eran los que entraban y salían con el mismo ritmo de la intimidad de Junsu... la erección del pelinegro estaba erguida ya y deseosa de ocupar aquel espacio que tan bien conocía… y mientras Junsu tomaba ese vaivén casi salvaje golpeando sus caderas contra las del castaño oscuro, Yoochun ya tenía sus tres dedos entrando y saliendo de la entrada del delfín… el calor y los gemidos, la unión exacta de sus cuerpos bailando esa danza romántica lo valían todo… todo el amor que se tenían y que nadie ni nada podría nunca destruir…
Algunas estocadas más y Junsu sintió todo aquel calor centrarse en su bajo vientre, un escalofrío delicioso y todos sus músculos tensarse antes de ser sacudido por los temblores del orgasmo y la sensación de absoluta plenitud cuando su semilla inundó el interior de Yoochun... aquello era... la gloria misma, flotar en el paraíso... la más extasiante de las intoxicaciones con la más hermosa de las drogas: el amor...
Yoochun apenas le dejó recuperarse un poco de su orgasmo cuando se pusieron en pie y le recostó sobre el sofá dejándole bajo su cuerpo, penetrándole lentamente... Junsu cerró los ojos extasiado de placer... la verdad era, que no había nada tan delicioso como sentir a su novio uniéndose con aquella delirante tranquilidad a él...
No hubo necesidad de esperar demasiado, su intimidad le recibía cada vez con más que agrado, las embestidas del pelinegro tomaron pronto un ritmo exquisito, las piernas del delfín se enroscaron en sus caderas al tiempo que movía las propias siguiendo su vaivén... sus cuerpos pegados perlados en sudor, sus pieles ardientes inundando la estancia de su sofocante calor, sus bocas encontrándose en apasionados besos que cortos se interrumpían por los gemidos y la alteración excitada de sus respiraciones, el corazón desbocado en sus pechos... el amor entregado... todo, la absoluta perfección arrastrándoles lentamente a un segundo orgasmo...
La erección de Junsu despierta de nuevo se friccionaba entre sus cuerpos... no había más que pedir, más que entregar... lo tenían todo... porque se tenían el uno al otro, siempre dispuestos a apoyarse sin importar los celos que pudieran aflorar entre ellos... porque al final, lo único que podían entregarse era... el profundo sentimiento de amor que se tenían desde años atrás...
- Chunnie...
- Junsu...
Gimieron a la par al tiempo que se corrían y disfrutaban de su segundo orgasmo... Yoochun cayendo sobre el cuerpo de Junsu, temblando como lo hacía el ser bajo su cuerpo... felices, plenos... hacer el amor siempre era así... delicioso y dulce... no importaba lo avasallador de la pasión o lo pervertido de sus entregas... el sexo entre ellos siempre terminaba por convertirse en amor... y eso, lo valía todo...
- Te Amo, Yoochunnie... - murmuró el delfín mientras sentía a su novio salir despacio de su interior...
- y yo a ti, baby... Te Amo con el alma... - correspondió el ratón sonriéndole despacio y notando que una incomodidad aparecía ahora en su trasero...
- duele?... - cuestionó con conocimiento de causa... sintiéndose ligeramente culpable, llevó una de sus manos al trasero de su novio y con la otra acarició una de sus mejillas...
- lo normal, baby... pero estuviste fantástico... - sonrió tranqulizador, dejándose mimar por su delfín... - creo que si me bailas como lo has hecho hoy, podría dejarte repetir más veces ir arriba, eh... - medio bromeó, medio lo dijo en serio... Junsu sonrió ampliamente con ese brillo en sus ojos que minutos atrás el pelinegro notara bailar en sus pupilas marrón...
Y mientras se entregaban mas mimos, Junsu comprendió esa noche, que tenía en su poder la más hermosa de las verdades que le intoxicaban el alma misma... el amor de su Yoochun...
Para siempre...
Continuacion *O*
ya lo habia leido pero lo volvi a leer me gusto mucho y su continuacion mas micky de umma que lindo lo ame hoy entra aqui por primera vez y me gusto mucho hasta pronto.
ResponderEliminarwa~~ el yoosu es mi intoxicaion xD grax x el fik!! lo mejor n.n escribes muy reketebien =)
ResponderEliminarMorii *-* y mezclar este fanfic con la cancion fue una intoicacion
ResponderEliminar°w° no me canso de leerlo!! es como mi 5ta vez hihihi
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