ADVERTENCIA: Lemon
CAPÍTULO 13. I LOVE YOU
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La comida en casa del YunJae y el YooSu había sido por demás divertida y provechosa, a final de cuentas la llegada de Joo-Eun y YooHwan no había más que hecho del ambiente algo tanto más hogareño y lleno de amor… y era esa sensación, ese tipo de escenas las que deseaban conservar por siempre y por sobre todas las cosas, no importa qué tengan que enfrentar, la alegría y felicidad de las personas que más amaban y comprenden esa hermosa familia era lo único que valía para todos y cada uno de ellos… aún cuando Makino tuviese que renunciar a esa otra parte primordial de su existencia…
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En algún restaurante de la ciudad…
- es que no veo cómo puedes ver de forma tan natural la situación, Makino… - JaeWook hablando en voz baja, pero claramente todavía incrédulo y molesto…
- y yo no entiendo cómo puedes aferrarte a verlo como algo malo o inverosímil… - la mujer elevando tan solo un poco la voz… - estamos hablando de nuestro hijo y nuestros nietos, de la felicidad de MinHwan…
- es una aberr…
- ¡basta!... – cortó con determinación… - te lo dije JaeWook, no vas a insultarlo nunca delante de mí, y si has querido que hablemos solo para esto, tratando de convencerme de algo que jamás voy siquiera a considerar, entonces creo que he perdido mi tiempo y que lo que una vez nos unió dándonos dos hermosos hijos, hoy no está siendo más que pisoteado, ignorado u olvidado; pero por Dios te juro que si ésta es tu postura, no quiero que vuelvas a buscarme o te acerques a nosotros, porque como MinHwan sufra por la incomprensión de su propio padre, vas a conocer la Makino dispuesta a lo que sea por sus hijos…
Y sin darle tiempo siquiera para replicar ni mucho menos defenderse, Makino se puso de pie y salió con paso apresurado de aquél lugar, lejos de ese hombre que tanto ama pero que no ha hecho más que darle la espalda a lo que juraba era lo más sagrado… la Familia… y sentía un nudo en la garganta, un vacío en el estómago y los ojos arder por la cantidad de lágrimas contenidas en sus pestañas…
Mientras que JaeWook solo había podido quedarse viendo la silueta femenina de su esposa alejándose… ver partir a la mujer que ama y llevarse con sus pasos todo lo bueno que tenía en su vida… era acaso tanto su orgullo? Estaba tan lastimada su dignidad masculina al tener un hijo con preferencias distintas? Era que en verdad no podía amar a MinHwan por el solo hecho de estar embarazado?... no podía compartir la felicidad de ser padre con él?... cómo comprender, cómo aceptar, cómo sobrellevar una situación así? Era que su mente simple y sencillamente no podía aún concebir tal cosa, que un chico, SU hijo estuviera esperando gemelos de otro HOMBRE… era que estas palabras no alcanzaban a ser procesadas por su mente… era… simplemente demasiado…
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4º mes de Embarazo…
Hwang Bo terminó de vestirse mientras escuchaba los ronquidos del viejo Director de la Clínica, rendido sobre la cama de aquél hotel enredado entre las finas sábanas, y seguro que muy satisfecho después de haber probado el cuerpo de la escultural morena… la mujer se sentía casi sucia, pero había valido la pena solo por haber obtenido la clave de identificación y password del hombre para tener acceso a la red de la clínica… lo que significaba que podría ver los expedientes médicos de Park Yoochun y Kim Junsu… y por supuesto de Yang Su-Chun o cualquier otro miembro de la familia…
Esbozó una sonrisa malévola y dio una última mirada a su reflejo en el espejo, desde donde también pudo ver al hombre que daba una vuelta sobre la cama y roncaba un poco más alto… desagradable ciertamente, humillante habría que aceptar… pero había jurado tener a Yoochun en su cama y no descansaría hasta conseguirlo… como tampoco permitiría que hombre alguno, el gemelo Park en específico, despreciara a su hija Yazahara…
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Residencia YunJae-YooSu
Estando en el estudio, Yoochun estampó el móvil contra el único sofá doble en el interior, por suerte lo había ido a aventar ahí, porque si lo hubiera hecho contra el suelo definitivamente se habría despedazado… y tenía fotos, videos y más detalles familiares que apreciaba… pero una vez más Hwang Bo le había colmado la paciencia…
Bufó frustrado dejándose caer en el sofá, recargando su cabeza en el respaldo, cerrando los ojos y pensando en lo que haría… esa vez, en verdad lo había puesto entre la espada y la pared… permaneció ahí varios minutos, hasta que escuchó la peculiar risa de Junsu resonando en la estancia, llegando del centro de la ciudad junto con sus gemelos. Se habían ido de compras sin él… sonrió un poco al imaginarlos viendo escaparates de ropa para bebé y más; el dolor de cabeza que se debe estar cargando Yang al haber aguantado a su umma y hermana emocionados con todo, si no los conociera él… escuchó esas voces que ama como solo murmullos por la distancia; y se preguntaba si MinHwan no terminaría reclamándole a su hijo el porqué no le llevó con ellos… él se preguntó eso, pero inmediatamente recordó que cuando salieron él venía de camino del negocio de música…
Y toda esa alegría que había comenzado a envolverlo pensando en todo eso, se vio interrumpida al recordar a la morena… y esas palabras que hicieron temblar su mundo y que amenazaban con destruir lo único valioso que poseía… y tomó su decisión… salió de la oficina alcanzando a divisar a su pareja doblar por las escaleras rumbo a su habitación…
- ¡appa! Llegaste temprano hoy… - EunBi se le lanzó a los brazos cual niña pequeña… ese tipo de efusiones eran normales en ella, pero había algo en su mirada que le decía claramente que se debía a algo más…
- ¿porqué tan contenta?... – y no evitó preguntar con cierto tono celoso de padre sobreprotector…
- la vida es bella, appa… - soltó con rintintin, lo que solo hizo que el pelinegro enarcara una ceja exigiendo una explicación… - como ya tuve suficiente con el sermón de Yang mejor espero otro poco por el tuyo… - sonriendo, le plantó un beso en la mejilla y se alejó dando saltitos hacia la cocina…
Yoochun quiso preguntarle a su hijo… pero Su-Chun ya se había perdido también en alguna parte de la casa… y recordó que aún tenía cosas que hacer. Suspiró viendo las escaleras, y con paso cansino subió hasta su recámara, en donde entró sin anunciarse… Junsu estaba acostando en la cama colocándose unos auriculares en el vientre con música de un CD que acababa de comprar y era especial para madres embarazadas… pero no pudo evitar saltar en su lugar al ver a su ratón ahí…
- me tomaste por sorpresa, Chunnie… - sonrió suavemente invitándole a recostarse a su lado…
- disculpa… - sin dudarlo, se acostó con su pareja, besando inmediatamente su vientre más abultado…
- ¿qué tienes?... – cuestiona dulcemente el delfín, acariciando con cariño esos cabellos azabaches tan suaves y lacios, consciente de que ha evitado su mirada y el tono de su voz se ha escuchado casi débil y preocupado…
- ganas de quedarme aquí contigo y hacerte el amor… - un beso más sobre la tripa, subiendo con un camino de tiernos besos que culminaron cuando tomó sus labios, tan dulces y suaves como siempre… - pero tengo que salir a atender un asunto muy importante…
- sobre qué… - acarició una de las mejillas del ratón, no entendiendo el motivo de su repentina preocupación, escuchando ese suspiro venir de labios de su pareja que a ojos cerrados parecía grabarse el tacto de su mano… - ¿Chunnie?... – insistió…
- tranquilo, yo me encargo… - una sonrisa que no expresaba más que miedo y preocupación, esas oscuras orbes que le miraban con una intensidad que no supo descifrar y le dejaron una sensación de incomodidad y ansia… - procuraré no tardar, Te Amo, Susu ah… - un beso que casi le pareció como si fuera el último… Yoochun levantándose mientras deja una caricia sobre su vientre…
- Chunnie… - y ese llamado con voz temblorosa viniendo de Junsu cuando ya tiene su mano en la manija de la puerta… - abrázame… - un pedido que sonó casi a súplica… un fuerte abrazo que ambos necesitaron en ese instante y que arrancó esos sollozos involuntarios en el castaño oscuro… - Te Amo…
- lo sé… - se separó tan solo para besar esos ojos y beber esas lágrimas rebeldes que quisieron cruzar esas sonrosadas mejillas que también se convirtieron en blanco de sus dulces besos…
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No había querido ni siquiera entrar en ese departamento… pero no había tenido otra salida… Hwang Bo esta vez se saldría con la suya…
- tan puntual y apuesto como siempre, Yoochun… - la morena le abrió la puerta permitiéndole el paso…
- no necesitas tratar de seducirme, porque jamás lo vas a conseguir… - el pelinegro ni siquiera se molestó en observarla, pero había podido ver el diminuto conjunto que la morena portaba y dejaba al descubierto sus largas piernas y poco a la imaginación de sus voluptuosos atributos…
- pues estás aquí y significa que obtendré lo que quiero… - contoneándose fue hasta el comedor de donde tomó dos copas de burbujeante vino… - brindemos por eso… - quedando muy cerca de Park, Hwang Bo le ofreció una copa…
- no tengo absolutamente nada que brindar contigo… - negó en rotundo… porqué la gracia divina le ponía ahora esta clase de prueba, de obstáculos insistentes en su vida… acaso algo había hecho tan malo, o el simple hecho de estar con Junsu era motivo para que el destino se quisiera ensañar ahora con su familia?
- bueno, no brindemos entonces… - tratando de no ofuscarse por la actitud del pelinegro, la morena dejó las copas por ahí cerca en un mueble, luego volvió a acercarse al pelinegro pegando su cuerpo al de él y enroscando sus manos en el cuello masculino… Yoochun no se movió… - he esperado por este momento tanto tiempo… - y su boca reduciendo la distancia hacia la del pelinegro…
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Residencia YunJae-YooSu
Aún en su recámara, Junsu sintió una opresión en el pecho y unas ganas irresistibles de llorar… llanto que no contuvo y se desbordó por sus mejillas mojándolas con su salado sabor… no quería pensar… no quería volver a sentir ese temor de que Yoochun le pueda dejar…
¡No!... no quería volver a vivir un susto como aquél en su primer embarazo… no tenía motivo, Yoochun lo ama, se lo ha demostrado años enteros… tienen dos gemelos de ya 18 años de edad, y otro par en camino…
- Chunnie… - murmuró entre sollozos, deseando que estuviera ahí, que lo confortara en el cobijo de sus brazos y lo llamara “tonto” por pensar que le podría cambiar por alguien más…
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Los labios femeninos no alcanzaron siquiera a rozar los suyos, cuando ya el pelinegro la había apartado bruscamente…
- ¡no!... no voy a involucrarme contigo, no voy a darte el gusto de separarme de Junsu…
- la prensa sabrá la verdad… - advirtió la morena, sintiendo su sangre hervir de coraje ante la posibilidad de que una vez mas Yoochun no caiga en sus redes…
- no me importa, estoy dispuesto antes a enfrentar al mundo y proteger a mi familia de todo lo que venga, que engañar a mi pareja enredándome contigo…
- no creas que no lo haré, Yoochun, que no sabrán que tienes un fenómeno por novio… - se exaltó ella…
- ¡cállate!... – debería ser menos caballeroso y abofetearla como lo quería…
- que tus supuestos hijos adoptivos son en realidad biológicos tuyos y de él, que ahora esperan otros gemelos, tu querido Junsu y tus hijos serán la aberración de…
Y lo había hecho… Yoochun había estampado su mano en la mejilla femenina, no importa que quede como un desgraciado o mucho peor que eso, nadie insultaría así a su familia, no delante de él… su autocontrol se había ido a la mierda en ese segundo… pero aún así trató fuerte de recomponerse, de ser un poco menos todo ese manojo de emociones que clamaban por ser expresadas y no precisamente con límites…
- ni siquiera mereces esto… - la morena le miraba impactada, una de sus manos en la mejilla… - aún mi indiferencia sería mucho para ti, y la lástima que siento por tu persona, Hwang Bo, aún ello es demasiado para alguien como tú; nunca he entendido ni creo que entenderé, esa obsesión que tienes conmigo, pero sabes qué, haz lo que quieras en contra de mi familia o de mí mismo, me haré más fuerte y hasta lo imposible por protegerlos de ti, de todo tu veneno y malas intenciones… pero nunca… nunca ni en otra vida, conseguirás ni un poco de cariño de mi parte…
- eres un hombre, Yoochun, cómo puedes desperdiciar tu vida a lado de otro hombre, Junsu no te ha dado en todos estos años lo que yo puedo ofrecerte en una noche…
- cómo puedes decir tanta estupidez… - murmuró el pelinegro sonriendo cansinamente, moviendo la cabeza de un lado a otro en negación… - porqué no entiendes que no importa lo que digas o hagas, ni lo hermosa que puedas llegar a ser, soy gay, tengo una familia, amo a mis hijos, y Amo a Junsu, no me interesa en absoluto nada que venga de ti…
- pero tú alguna vez quisiste estar conmigo…
- muchas de las cosas que dije en torno a ti u otras mujeres del espectáculo no eran más que guiones que tenía que seguir y lo sabes, nada de eso me nacía a mí… - clavó sus oscuras orbes en los ojos femeninos… - no me irás a salir ahora con que todo este tiempo has estado fastidiándome bajo esa creencia…
- ¡fastidiándote!... – saltó indignada… - lo único que he querido siempre de ti es que abras los ojos y te des cuenta de la oportunidad que has dejado ir cada que te has atrevido a rechazarme… - ahora ya se encontraba molesta, sus ojos inyectados de esa esencia malintencionada que delata su verdadera personalidad, ególatra y altanera…
- me rindo… - el pelinegro exhaló con frustración… - no desperdiciaré una sola palabra ni un solo minuto más en ti… - y dándose la vuelta, Park caminó hasta la puerta…
- ¡yo te amo, Yoochun!... – un último gesto desesperado por retenerle…
- alguien como tú es incapaz de amar, no tienes ni pizca de idea de lo que significa amar… - sin voltear, el pelinegro finalmente se retiró de ese departamento…
Había tomado su decisión… la única que realmente tenía… y sabía que vendrían cosas que tal vez ni imagina, que si Hwang Bo tiene conocimiento de la verdad sobre sus hijos y el embarazo de Junsu, seguro también sabía sobre los demás… y eso le preocupaba un tanto más… pero no iba a cometer la peor estupidez de su vida, los protegería de otra forma, no tenía idea de cómo, pero la encontraría… tenía que encontrarla…
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Junsu dormía tranquilamente acostado boca arriba sobre su cama, no hacía demasiados minutos que el sueño lo había vencido, casi como algo mágico; justo después de ese momento en que se sintió lleno de paz, como cada que Yoochun le susurra un Te Amo mientras lo abraza con ternura…
Tan dormido que no se dio cuenta del momento en que sus gemelos entraron después de haber llamado a la puerta con suavidad y no haber recibido ninguna respuesta, EunBi y Yang se acercaron tan solo para cerciorarse de que estuviera bien, depositando un dulce beso sobre su frente…
- todo está bien, umma… - murmuró la muchacha… como si hubieran sabido que algo había querido destruir una vez más la felicidad de sus padres…
- vamos a estar siempre juntos, umma… - Su-Chun lo observó con admiración, porque ahora más que nunca estaba seguro de que no pudo tener mejores padres que ellos…
Y dejando una última caricia sobre el vientre del delfín, donde sus hermanitos crecen, los gemelos Park salieron de la habitación y bajaron a la estancia, donde el YunJae veía la televisión con semblante claramente aburrido… y frustrado, el avance de sus embarazos ya comenzaba a pasarles factura impidiéndoles amarse como deseaban…
……flashback……
Últimamente parecía estar haciéndoseles costumbre salir a un lujoso hotel a encerarse por horas en una habitación donde hacer el amor con calma no les inspirara esa preocupación de ser pillados en plena faena, o escuchado por alguno de sus trillizos o “sobrinos” estando en casa… y con las hormonas descontroladas y cambiantes en ambos, la calentura les subía más rápido y en horas cada vez más tempranas, claro que les gusta hacerlo de día, claro que lo han hecho en numerosas ocasiones desde que son novios… pero el deseo quemante que los envolvía desde que se embarazaron, los volvía también tanto más apasionados y vergonzosos, por eso buscaban la privacidad de un hotel…
- mhh, Boo… - gimió el moreno cuando una de esas suaves manos acarició con sigilo su entrepierna, ambos de pie a lado de la enorme cama, uno frente al otro compartiendo de esos exquisitos besos que parecen enamorarles un poco más…
- que rápido te pones a tono… - soltó con sensualidad, sonriendo de medio lado mientras ese trozo de carne se endurece y su calor impregna su piel…
- con la forma en que me provocas… - y ágilmente escabulló su mano en la ropa interior del pelioscuro tomando su miembro semidespierto que tan rápido como él, creció u le arrancó sonoros gemidos a Jae…
- mhh, ahh, ahh, Yunnie, ahh, más, mhh… - el pelioscuro cerró los ojos y mordió su labio inferior… solo Yunho sabía cómo hacerlo delirar…
Y los movimientos de sus manos en el miembro del otro se volvieron cada segundo más frenéticos, y sus gemidos más altos y roncos… la excitación a límite, el calor inundando la habitación; las piernas de Jae comenzando a flaquear por todo ese placer circulando por su cuerpo, apoyó su frente en el hombro de Yunho buscando un poco más de soporte o se desvanecía ahí mismo, entonces notó que su vientre chocaba contra el del moreno, lo que le impedía sentirse más cerca… igual alcanzaron el éxtasis viniéndose en la mano del otro, lanzando un último gemido ronco mientras los espasmos los sacudían como bien han disfrutado cada que hacen el amor…
Se fundieron en un beso tierno cuando todavía tenían la respiración alterada y el corazón les latía con rapidez en el pecho… y una vez más se dieron cuenta de que el vientre les impedía acercarse tanto como para sentir que se fusionaban en uno… terminaron de desnudarse entre sonrisas, besos, caricias y palabras candentes; pero una vez que se acostaron sobre la cama buscando una posición cómoda para continuar con su entrega… la frustración comenzó a invadirles y la excitación a abandonarles… el vientre de ambos no era que les estorbara (aún) tanto realmente, pero había sido suficiente para pensar en si no resultaría contraproducente para el proceso de gestación… bueno, hizo pensar a Jae, porque Yunho…
- Boo, te prometo que iré despacio… - argumentó el moreno, tratando de convencer con caricias a su pareja de que le permitiera acceso a su intimidad…
- pero y si algo va mal… - el pelioscuro simplemente se negaba a abrir sus piernas… - recuerda que ésta vez no es solo que yo esté embarazado, sino tú también… mejor aguardemos a la cita con la Dra…
- ¡pero faltan semanas!
- pues tendremos que limitarnos, Yunnie; no querrás que algo salga mal con nuestros hijos, verdad… - su mirada le hizo saber varias cosas al moreno, que como se atreviera a dar a entender que intimar era más importante que la salud de sus pequeños, le decepcionaría; que aunado a más insistencia de su parte lo sometería a abstinencia de por vida… y que de no parar en definitiva contentarlo no iba a ser NADA fácil…
Y por supuesto, Yunho amaba a Jae por sobre cualquier deseo… aunque éste estuviera bañado de amor puro… y fue esa la primera vez en todos esos años juntos que el YunJae no pudo culminar su hora de entregarse haciendo el amor…
……flashback……
Los gemelos Park habían cuestionado a Sun Ho sobre el humor de sus padres y el trillizo solo pudo atinar a decir “las hormonas” mientras se encogía de hombros y ciertamente compadecía la suerte de sus progenitores… no necesitaba preguntar ni nada, quedaba más que claro que el YunJae se había quedado con las ganas…
De Bae Jong y Ji Song ni se molestaron en preguntar, esos dos se la pasaban caminando por el Parque o viendo un montón de cosas para su bebé, aprovechaban las tardes al máximo (y ni qué decir de las noches en su habitación) ya que por las mañanas ya solo el trillizo acudía a la Universidad, y es que su novio finalmente había tenido que posponer sus estudios…
Y Neul Jade había salido a su primer cita formal como novios con Geun Suk, si bien aún sus padres no lo sabían y se pensaban andaba por ahí de compras… aunque sin EunBi, era eso lo que les había inquietado, pero con la frustración de su reciente situación sexual, se les pasó de largo…
Por lo que cuando Yoochun volvió a casa, no fue tan raro encontrarse con que ninguno de los muchachos estaba ahí y el YunJae continuaba tratando de matar el tiempo frente al televisor con un montón de chucherías sobre la mesa de centro. Sun Ho había salido a visitar a su novia, esa noche irían al Parque de Diversiones a insistencia de Shen Nan. Yang había salido rumbo a casa de MinHwan, como todavía no era posible vivir juntos, se tenían que limitar casi a una relación de simples novios que echan pegue, y no como los futuros padres primerizos que son. Y EunBi también tenía cita con Hye Sung, aunque en su caso el muchacho aún no se ha declarado, y eso le preocupa un poco… tal vez no le quería tanto como para formalizarse, ella tan segura que había estado de la química Park-Kim… era que estaba destinado a que estuvieran juntos…
El ratón saludó al YunJae recibiendo un poco emotivo “buenas noches” que Yoochun prefirió no indagar, ahora solo le importaba hablar con Junsu, subió de a dos los escalones hasta la segunda planta, llamó a la puerta pero no recibió respuesta, así que sigilosamente abrió la puerta…
No había escena más tierna que su delfín durmiendo tranquilamente, ese respirar parsimonioso que deseaba conservar el resto de sus días, poder perderse en la calidez que esa imagen dejaba en su corazón… cómo había realmente considerado la posibilidad de ceder a la petición de la morena con tal de protegerlo, a él y sus hijos… eso ya no importaba ahora, no quería volver a pensar en eso… pero sabía que aun con todo ello, tendría que hablar con su pareja de la situación.
Se acercó con paso lento hasta arrodillarse a lado de la cama, desde donde comenzó a acariciar las mejillas del castaño oscuro… sabía que había llorado una vez más, y que había sido por su causa, y eso no le gustaba… no le gustaba ver ese camino seco que el curso de las lágrimas dejaron sobre sus calidas mejillas… y llevó sus labios a los del delfín dejando un casto beso que solo hizo que Junsu se moviera entre sueños sonriendo como sabiendo de dónde había provenido ese calorcito que rápidamente se expandía por todo su ser…
- Te Amo tanto, Susu ah… - murmuró al tiempo que una de sus manos viajaba a esos mechones castaños desordenándolos un poco al jugar con ellos… el delfín despertando lentamente al sentir esas caricias…
- Chunnie… - esbozando una sonrisa que simplemente expresaba tranquilidad al verle ahí… - a dónde fuiste, Chunnie… - no pudiendo contener esa pregunta al darse cuenta de ese aroma a perfume femenino que se había quedado en las ropas de su pareja; deseaba escucharle decir que todo estaba bien, que no había absolutamente nada de lo qué preocuparse… que nunca más volvería a sentir ese temor de minutos atrás, que solo tendría esa paz, esa dicha al saberse único destinatario de sus miradas amorosas, de sus tiernas caricias y dulces besos…
- ya no importa, Su; estoy aquí, siempre he estado y siempre estaré… - y tomó esos dulces labios que lentamente se dejaron envolver por los suyos en una de las caricias más románticas que han compartido…
- hueles a… - le miró directo a los ojos, notando en esas pupilas profundas un dejo de culpa repentina, pero sobre todo… preocupación… - Chunnie, dime, ¿qué pasa?
- Hwang Bo sabe de tu embarazo… - confesó sin rodeos… el delfín abrió los ojos con sorpresa y tembló involuntariamente… - pero tranquilo, no importa contra lo que tenga que ir, te protegeré, a ti y a nuestros hijos… a todos… - un roce de labios…
- ¿tú y ella?... – no quería siquiera pensarlo… no quería… Yoochun no podría hacerlo algo así…
- no… - se apresuró a aclarar el pelinegro, consciente de la clase de temores que ahora deben estar invadiendo a su pareja… - era lo que ella quería, era su condición para dejarnos en paz… pero… - tomó las manos del castaño oscuro entre las suyas, besándoselas con infinita ternura, clavando sus orbes oscuras en las castañas pupilas del delfín… - no pude, Junsu ah, no podría nunca hacerte algo así, aún cuando rechazarla una vez más solo consiguió que ella amenazara con lo más sagrado que tengo… no la toqué ni nada, no pasó absolutamente nada entre nosotros, te lo juro, Susu ah…
- porqué no nos deja en paz, Chunnie… - se medio incorporó para poder abrazarse a su ratón y enterrar su rostro en su cuello… - porqué…
- no lo sé, y ya no quiero intentar entenderla, solo… - un beso en la coronilla de su delfín… - solo sé que ahora más que nunca voy a estar contigo, que no dejaré que nada te pase o perturbe nuestras vidas, así tenga que llevarte a ti y a los demás al fin del mundo, al lugar más recóndito donde nadie nos conozca… - el delfín levantando la mirada perdiéndose en el calor de sus ojos negros… - Te Amo, Su; y es eso lo único en lo que quiero pensar…
- hazme el amor, Chunnie… - sus manos rodeando el cuello del pelinegro, besándole de pronto con premura, no dejando que sus labios se separen por demasiados segundos antes de fundirse en otro beso, tan necesitado por los dos… - apestas a ella… - arrugó la nariz al darse cuenta de que su perfume aún le recordaba que se atrevió a… - vamos a ducharnos, Chunnie, y tira esa ropa, no quiero que nada de ella quede en nuestra casa…
El pelinegro sonrió un poco, le encantaba más ese Junsu celoso y decidido, que el temeroso y triste; y sin dudar lo tomó entre sus brazos para internarse en la ducha de su cuarto, lo dejó sentado sobre el retrete mientras se apuraba en abrir el grifo del agua caliente y un poco de la fría, para dejarla en esa tibieza que sabe le gusta a su delfín, y delante de él se sacó la ropa que sin dudar tiró en el cesto de la basura…
- ¡dios! Chunnie, eres terriblemente atractivo, sabes… - se mordió el labio al verle completamente desnudo, habiéndose deleitado la pupila durante esos instantes en que retiró cada prenda de su cuerpo, descubriendo una a una porciones de piel, notando lo bien que se conservaba a pesar de ya andar en los 40… hasta podría jurar que tal vez la edad le estaba favoreciendo haciéndole lucir más maduro y atractivo…
- ven… - sonrió el pelinegro, ayudándolo a incorporarse para comenzar a desnudarlo también… - no creo ser terriblemente atractivo, pero sé que tengo lo que necesito para que me sigas amando, delfín travieso… - sus manos deslizándose con paciencia por su cuerpo mientras va retirando cada prenda, tomándose su tiempo para recorrer su piel… - me gusta que todavía te estremezcas cuando te toco…
- me gusta que me toques, que me trates así… - la camisa y los jeans en el suelo, su bóxer siendo bajado con lentitud… - me gusta que me hagas sentir como un muchachito de 20 en su primera vez con la forma en que vas descubriendo mi cuerpo, Chunnie… - su piel erizándose conforme las manos de su pareja iban rozando sus piernas hasta que la última prenda quedó en el suelo…
Entraron en la tina de la ducha, el agua moviéndose suavemente alrededor de sus cuerpos, bañándolos con su calidez, dejándoles sentirse de esa tierna manera en que la humedad del agua les envolvía… y comenzaron con esa danza de tiernos besos sin prisas, de ese acople perfecto de labios y caricias suaves que se entregaban de a poco mientras la temperatura de sus cuerpos iba ascendiendo a esos niveles en que era lo único que se quedaba entre las cuatro paredes de la ducha, el vapor haciéndose más denso por el ritmo con que sus cuerpos se volvían uno y se sumían en ese vaivén de caderas lento que les iba arrancando de esos gemidos quedos que les embriagaban de ternura…
- ahh, ahh, Chunnie, mhh… - a horcajadas sobre el regazo del pelinegro, el delfín sentía como su pareja se iba adentrando en su interior, como su erección iba ocupando su pasaje y sus paredes le comprimían reconociendo su tamaño…
- ¡dioses! Eres tan rico, Su… - abrazándole por la cintura, el ratón cerró los ojos entregado a ese mar de sensaciones que adentrarse en el estrecho pasaje de su delfín le dejaba, ese delirante placer de ser uno… - mhhh…. – gimió ronco cuando al llegar al tope, su delfín se levantó un poco para dejarse caer son fuerza en sus caderas, consiguiendo que su erección llégase todavía más profundo, hasta ese punto en que los dos pueden sentir cómo se les nublan los sentidos… - recuerda que, ahhh… - el delfín continuando con esa clase de movimientos… - no tan salvaje, ahh, ahh, Su… - iba a enloquecer si continuaba así…
- mhh, Chunnie, mhh, ahh, voy lento… - aclaró sonriendo extasiado en el placer que sentía; el agua moviéndose alrededor de ellos tanto más agitada, sus cuerpos abrazándose con recelo…
- ahh, mentiroso… mmhhh, aahhh… - pero sumidos en el deseo de su amor sincero, sabían bien cómo hacer el amor con cuidado y sin reservas…
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Hwang Bo estaba en la oscuridad de su departamento, la botella de vino a medio nivel; se sentía enojada, frustrada… casi humillada por Yoochun, pero… también… también sentía que por vez primera entendía algo que no quiso durante tantos años…
Y sin embargo costaba tanto dejarle ir… había sido su meta durante todos esos años en los que no perdía oportunidad de estar en algún lugar donde él, de ver divertida cómo Junsu se molestaba con su sola presencia… había tenido a Yazahara de aquél que apellidándose Park le había dado por lo menos un nombre a su hija que le hacía pensar que era del pelinegro, que con una sola palabra de alguna manera retorcida estaba unida a Yoochun…
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Residencia Choi…
Aunque ya Makino piensa seriamente en volver a su apellido de soltera…
Era ya cerca de las 10 de la noche cuando Yang Su-Chun se disponía a salir de casa de su novio despidiéndose con un tímido beso en la puerta de su hogar todavía al interior…
- cómo me cuesta despedirme cada noche… - el gemelo Park se asomó por el pasillo para cerciorarse de que su suegra no los escuchaba o veía… robando un beso más confiado a su novio…
- a mí también me cuesta dejarte ir, deberías quedarte a vivir acá con nosotros… - medio bromeó medio habló en serio… que sinceramente si por él fuera, que se quedara con ellos…
- ya pronto viviremos juntos en algún lugar, ya verás… - sonrió Yang, bajando al vientre de su novio para besarle… - buenas noches, dejen dormir a umma, de acuerdo… - le habló a sus bebés… era tan indescriptible la sensación de ser padre…
- aún no se mueven, Yang… - sonrió Choi…
- pero igual ya pesan y te obligan a determinadas posiciones… - murmuró un tanto avergonzado…
- que hagan lo que quieran, los amo por ser nuestros… - otro beso, las manos de su novio en su cintura buscando un contacto que ya la tripa les limitaba…
- Te Amo, buenas noches amor… - un beso dulce, una última sonrisa y una mirada cariñosa antes de que Yang abra la puerta y parta hasta el siguiente día en que vuelva a verle y salgan a pasear al Parque como había prometido…
Yazahara esperando por el gemelo Park en donde sabe toma el taxi para volver a su casa…
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Residencia YunJae-YooSu
Yunho y Jae estaban acostados uno junto al otro con la respiración alterada y nuevamente frustrados… la calentura de las hormonas no ayudaba en absoluto en esa repentina limitación sexual que sus embarazos les habían impuesto…
- aún faltan cinco meses, Boo; y ya siento que enloquezco por no poder hacerte el amor… - el moreno pasó su mano por su frente, retirando un poco de sudor, luchando por controlar los latidos de su corazón y el calor de su cuerpo…
- creo… creo que pienso igual que tú, Yunnie… - el pelioscuro llevó su mano al miembro de su pareja, erecto, caliente, necesitado… como el suyo… - de nuevo amor, pero si acabamos de… - un beso hambriento que lo hizo callar, acababan de tener un orgasmo solo masturbándose como parecía solo podrían por un tiempo, pero increíblemente ya su pareja se había excitado de nuevo…
Sintió cómo su vientre era un poco presionado por el del moreno y se apartó bruscamente del beso, el moreno estaba sobre él…
- lo necesito Boo, de verdad… - cómo, no estaba seguro, pero Yunho se estaba perfilando entre sus piernas rozando con la punta de su erección su intimidad…
Continuará……
ADVERTENCIA: Lemon
CAPÍTULO 14. KISS A LO SPIDERMAN
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Residencia YunJae-YooSu
Jaejoong intentó apartarlo colocando sus manos en el pecho de Yunho y negando con la cabeza lo que su pareja intentaba hacer… es que no podía creer que se estuviera atreviendo a intentar penetrarlo cuando siente que sus vientres hacen presión!
- detente, Yunnie, por favor… - y una lágrima resbaló por su mejilla al pensar que tal vez para el moreno importaba demasiado la actividad sexual…
- Boo… - sintió un nudo en la garganta al ver esa lágrima y los ojos aguados del pelioscuro… apartándose inmediatamente y volviendo a colocarse a lado de su pareja… - lo siento, de verdad Boo, perdóname… - y no pudo evitar pensar que tal vez, como umma, era un total fracaso, porque por un momento pensó que aquello era posible, que vamos, claro que podía implicar riesgos, pero iba a ir despacio, no iba a hacer nada brusco ni salvaje… solo… solo quería hacer el amor con su JaeBoo… - soy tan idiota… - y escondió su propio rostro entre sus manos sintiendo el escozor de las lágrimas al borde de sus ojos…
- no Yunho… - ahora fue Jae quien colocándose de medio lado alcanzó las manos del moreno para apartarlas y limpiar tiernamente con sus dedos las lágrimas que resbalaban por aquéllas mejillas… - yo entiendo, yo sé que lo deseas… Dios! Yunho, muero por hacer el amor también, pero… nuestros hijos deben venir primero en ciertas cosas, sería distinto si solo yo estuviera embarazado, o solo tú…
- ya lo sé, Boo… pero… es que… - un sollozo más… de verdad, se sentía tan femenino… las hormonas eran las culpables, ¡por supuesto que sí!... – no sé cómo lo haces, yo… no me puedo controlar tanto como tú, me cuesta un mundo sentir todo este fuego quemándome por dentro gritándome que me una a ti, y parar… - el pelioscuro le sonrió dulcemente…
- no creas que me es tan fácil resistirme, Yunnie… es… cosa de práctica supongo, cuando los trillizos, ya sabes, el noveno mes de gestación, la cuarentena, los primeros meses con más trasnochadas que nada… aprendí, amor; aprendí a dejar un poco de lado mis necesidades, mis deseos, porque siempre tenía que pensar antes en nuestros hijos…
- soy mal appa y pésimo umma… - una mirada triste…
- no Yunnie… - un beso tranquilo… - eres appa maravilloso, ahora te toca aprender a ser umma… - sonrió tratando de transmitirle un poco de confianza y calma… - créeme, no es sencillo, pero tampoco imposible…
- ¿seguro? ¿Confías en mí aún cuando hace un segundo casi te forzaba a hacer el amor?... – cuestionó con un hilo de voz… ¡un momento! ¿Desde cuándo que él parecía tanto más el uke de la relación?
- no ibas a forzarme, Yunnie… - sonrió el pelioscuro… - es decir, yo también quería, ¡cielos! Yunho, todavía quiero, pero así como te controlaste a tiempo, lo has hecho y lo harás siempre que sea necesario, porque no eres ningún bruto… - el moreno se movió inquieto frunciendo el ceño ante la última palabra… y esa sonrisa divertida del pelioscuro… - confío en ti tanto que seguimos durmiendo juntos, porque sé que aún cuando sientas que hierves de deseo, vas a controlarte y no terminar violándome a media noche… - un beso dulce sobre aquéllos labios haciendo un puchero… en serio, ahora él se sentía el seme de la relación y era… era tremendamente feliz por eso… años de ser el uke, puede que no les venga mal cambiar un poquito de roles… - Te Amo…
- yo más… - suspiró el moreno… y se dio un golpe mental por haber sonado tan femenino enrojeciendo furiosamente al darse cuenta de cuánto estaba cambiando…
¡¡¡Pero todo es culpa de las hormonas!!!
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Yang Su-Chun frunció el ceño al ver a Yazahara en aquélla esquina sonriéndole con picardía y caminando a su encuentro de inmediato… claro, había olvidado el pequeño detalle de que la chica tal vez desconozca el lazo tan fuerte que ahora le une a MinHwan… y no se refiere solo al hecho de que vayan a ser padres dentro de unos meses, sino a su amor por él… el que tal vez sin querer llegó hacer sentir a la chica que le profesaba…
- buenas noches, Yang… - le saludó la morena con un rintintin que otrora hubiera arrancado un suspiro al gemelo Park, pero justo ahora solo le resultaba fastidioso… porque últimamente había podido ver en la morena su verdadera personalidad… tan molesta como la de su madre Hwang Bo, quien una y otra vez solo había intentado separar a sus padres…
- buenas noches… - correspondió el saludo solo por cortesía… no por deseos de quedarse a conversar con ella…
- pasas mucho tiempo con MinHwan, cualquiera podría pensar que ustedes son novios o algo así… - soltó con cierto desdén…
- me importa poco lo que la gente diga o deje de decir respecto a mi relación con él… - dijo y siguió su camino… porque presentía que el curso de la conversación no le iba a gustar…
- de acuerdo, no intento meterme en tu vida, ni mucho menos en la de él, solo… - el gemelo Park parando un poco preocupado por esa repentina tranquilidad en la voz femenina… tal vez no conozca demasiado a la chica, pero sabe que cuando una mujer luce demasiado tranquila es porque ya algo trama… - resulta curioso el que de repente me hayas hecho a un lado para estar con MinHwan, sabes llegué a pensar que estabas enamorado de mí, y la verdad es que me gustas mucho más de lo que llegó a gustarme tu primo Sun Ho, así que, no me culpes si ahora me siento confundida y quiero simplemente acercarme a ti otra vez, Yang… - y acercándose a un paralizado Su-Chun, la chica le besó la mejilla para luego simplemente dar la vuelta y retirarse…
- ¿qué rayos acaba de pasar?... – murmuró tanto contrariado por Yazahara… mirando luego a todos lados preocupado de que alguien haya visto aquél gesto por parte de la morena y lo fueran a malinterpretar, y que después llegue a oídos de su novio y entonces todo se vaya por la borda… - ok, me estoy ahogando en un vaso de agua, tan sencillo como hablar con él y asegurarle que no fue más que una conversación sin importancia… - trató de animarse… pero si era sincero, le ponía de nervios que Yazahara tratara de meterse entre él y MinHwan…
Y no… no era que no confiara en su amor por Choi, era que si algo le asustaba, era la determinación de una chica desilusionada o enojada con su persona… porque ha visto muchas veces lo que una mujer es capaz de hacer con tal de hacer que un hombre pague por haberla lastimado…
Y él, de alguna manera y sin realmente haber tenido la intención… tal vez la había lastimado…
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Residencia JunYong
JunHo terminó de revisar los papeles de ese nuevo caso que llevaba en la fiscalía… agotado y con los ojos cansados de tanto leer, se puso de pie para salir de su despacho… sonriendo dulcemente al ver a su querido chico raro tejiendo una chambrita sentado en uno de los sofás de la estancia…
- te ves hermoso haciendo eso… - murmuró antes de dejarle un beso en el cuello, sacándole un suspiro a su pareja… y aquélla sonrisa imborrable de sus labios con esa característica inocencia que parece grabado con amor en su boca…
- Joo-Eun trajo esto el otro día, dice que en Estados Unidos es muy común que las mujeres embarazadas tejan con hilos en tonos pastel… - relató sin dejar de sonreír y con esas agujas en sus manos moviéndose de manera tal que el gemelo tuvo que cerrar los ojos y agitar la cabeza porque se había comenzado a marear…
- ¿y le creíste?... – se sentó a su lado, pensando en cómo demonios podría hacer ahora para que su pareja le pusiera atención a él y dejara por un momento esas condenadas agujas que le robaban mucho del poco tiempo que el trabajo le estaba dejando para disfrutar de su familia…
- bueno, ya me conoces… - por supuesto que se podría creer todo lo que le dijeran, pero en realidad, no le importaba demasiado lo que le contaran, porque todo era divertido o tierno, y el simple hecho de tejer para sus gemelos era motivo suficiente para pasar largas horas en esa actividad tan femenina…
- ¿y cómo cuánto falta para que termines?... – su mano deslizándose provocativamente por el muslo de su pareja, rozando en el camino aquél suave tejido de hilo azul pastel que descansaba sobre su regazo… y aquello solo le inspiró tanta más ternura por su chico raro…
- mhh, te estás poniendo provocador, JunHo… - sonrió y dejó las agujas a un lado… - vamos a aprovechar que los muchachos no están, tengo ganas de hacer el amor… - y su boca tomando la del gemelo en un beso tranquilo pero apasionado…
Beso que JunHo correspondió de inmediato, tumbando sobre el sofá a Ji Yong, comenzando a desprender su camisa con cuidado, deleitándose con esa blanca piel tan suave por la que los años en definitiva parecen no pasar…
Y agradeció que Hwan Ho-Yong hubiera querido ir a dormir a casa del KoMin… y más vale que Keisuke se comporte y mantenga lejos sus manos de su hijo… ok, eso había sonado bastante sobreprotector de su parte… y eso que debería estar más preocupado por Shen Nan que había salido con Sun Ho e iba a quedarse a dormir con sus primas en casa del YooSu y el YunJae…
- no va a hacer nada que no quieran, amor, dales un voto de confianza… - escuchó a su chico raro decirle al oído para luego morder su lóbulo con sensualidad…
- mmhhh… - haciéndole gemir ronco… era increíble cómo hacía cosas de días que Ji Yong estaba más sensual que de costumbre… sí, podía culpar a las hormonas… - Te Amo… - y sus labios paseándose lentamente por su pecho descubierto, besando con ternura su vientre ligeramente abultado ya por esos cuatro meses de gestación de sus gemelos en camino…
- también Te Amo… - y un beso tierno lento y pausado, una danza de sus lenguas jugando a amarse con paciencia… porque no hay nada como hacer el amor con la tranquilidad de saber que no hay nada ni nadie que pueda amenazar esa felicidad que hace años han disfrutado…
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Residencia KoMin
Kohei y ChangMin no estaban seguros de que Keisuke y Hwan durmieran juntos… porque están en la edad de las locas hormonas pidiendo más de un contacto para el que no están preparados… pero vamos, le debían tener absoluta confianza a su hijo… además, no es como si fueran a tener el valor de montarse nada en casa con ellos durmiendo en la habitación de junto, cierto?
- deja ya de caminar para un lado y para otro, Kohei, me pones más nervioso… - el menor acomodaba una y otra vez su almohada recargado en el respaldo de la cama, porque les era imposible siquiera tratar de dormir…
- lo siento, lo hago sin darme cuenta… - y volvió a sentarse en la cama, pero ahora golpeteando su pie en el suelo… y aquello sacaba más de nervios a su pareja…
- ¡Kohei!... – y lo jaló haciendo que se recostara en la cama medio atravesado pero con su cabeza en su regazo… - quédate quieto por amor de dios, no van a hacer nada…
- ya… Minnie, pero… están durmiendo en la misma cama… - y la preocupación matizándose en los rostros de ambos…
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Habitación de Keisuke…
Hace rato que escuchan murmullos en la habitación de los padres de Uchimura, pero claro, no era como que se pusieran a parar oreja para enterarse de lo que estaba pasando… no fuera a ser que escucharan algo que los fuera a traumar… o sea, que estuvieran teniendo relaciones sexuales…
- hace calor… - dijo de pronto el gemelo Kim, sacándose las cobijas de encima, quedando solo en boxer y la playera de resaque con que duerme…
- ya sé, y eso que está encendido el ventilador… - Keisuke evitó a toda costa siquiera mirar a lado, donde su novio se encuentra tan solo en ropa interior… ¡claro! La ropa que llevaba puesta no podía ser llamado pijama… ¡y a él se le estaba alterando el corazón con la cercanía y el hecho de saberse juntos en la misma cama!...
- ¿crees que fue mala idea que quisiera venir a quedarme a dormir contigo?...
Silencio…
Y es que aunque cuando eran más chicos aquello era bastante más común… ahora, siendo novios, aquello simplemente no había sido la mejor de sus ideas… en qué diantres estaban pensando cuando se les ocurrió hacer una pijamaza?... mh, tal vez sea mejor no responder a eso…
- me iré al piso… - soltaron al unísono… luego otra vez silencio, ellos evitando mirarse pero conscientes de que ambos creen imposible seguir en la misma cama… y no terminar cediendo a esas ganas que tienen de comerse a besos… y algo más…
¡Pero no es correcto! ¡¡¡Solo tienen 15 años!!!
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Residencia YunJae-YooSu
Yoochun y Junsu estaban más que agotados después de haber hecho el amor en la ducha y en la cama… y aunque todavía el ratón estaba preocupado por la amenaza de Hwang Bo, ahora solo quería disfrutar de su delfín… y le acariciaba la espalda mientras sentía que cada segundo la respiración del castaño oscuro se volvía más acompasada entrando en el mundo de los sueños… y no evitó esa sonrisa pervertida al dejar que sus ojos pasearan por el cuerpo desnudo de su pareja, deleitándose la pupila con esa curva en donde su pronunciado trasero le recuerda lo mucho que lo hizo gemir apenas minutos antes, lo que le costó a los dos mantener sus gritos de placer en esas cuatro paredes…
Con todo y que Yoochun no había querido hacer el amor con efusividad, su condenado delfín siempre sabía cómo prenderlo y obligarle a amarlo como siempre… por lo menos hasta que el propio Junsu sabe que su embarazo les permite aquel tipo de entregas cargadas de pasión…
- Yang está tardando, no crees Chunnie… - y supo que aún con la respiración tranquila, su amado delfín no iba a conciliar el sueño hasta que su hijo llegara de casa de MinHwan…
- tranquilo, seguro se tardó despidiéndose, imagina lo difícil que debe ser para ellos estarse viendo por momentos y no poder vivir juntos…
- ya sé, pero igual me preocupa que ni siquiera ha llamado… - se acomodó mejor sobre el cuerpo del ratón, cuidando de no apretarse la tripa, pero sintiendo claramente la piel desnuda del pelinegro rozar con la suya… no era posible, que le fuera a entrar otra vez calor si ya lo han hecho dos veces… ¡y de qué manera!
- supongo que no ha llamado porque teme interrumpir a sus padres en medio de algo importante… - y el pelinegro llevó sus manos por el contorno de la cintura de su pareja, pasando lentamente hasta su trasero y apretárselo…
- ¡¡¡Chunnie!!!... – ¿hasta cuándo iba a dejar de avergonzarse con la manera en que su ratón lo toca?
……………………………………………
Yunho y Jaejoong finalmente se habían controlado lo suficiente para poder abrazarse y tratar de descansar un poco… a menos hasta que sus trillizos se dignara en avisar que ya estaban de regreso en casa… y es que eran cerca de las once y ninguno ha llegado todavía… y aunque no les preocupa demasiado que anden por ahí en lo suyo, igual no pueden evitar sentirse intranquilos por su ausencia…
- bueno, Sun Ho debió llevar a Shen Nan hasta casa de JunHo y Ji Yong, es normal que tarde en volver… - trató de tranquilizar el moreno…
- lo sé… y Bae y Ji Song siempre se olvidan del tiempo estando juntos, con eso de que ya no se pueden ver como antes por la Universidad… pero Neul Jade, ella debería estar de regreso ya… - vamos, es común que los padres tiendan a preocuparse más por las hijas que por los hijos… y la trilliza era princesa de los dos! Imposible no preocuparse tanto más por ella…
- oye, ¿pero que EunBi no dijo que iba a otra parte?... – y hasta entonces fueron capaces de reparar en el hecho de que las chicas no habían salido juntas como les era costumbre… - con quién dijo que iba Jade?
- mh… no lo recuerdo, Yunnie… - y como resorte, el moreno ya se había levantado tomando el teléfono y marcando a su hija… el timbre de su móvil se escuchó de hecho… resonando en la estancia, y es que la trilliza recién iba entrando acompañada justamente de EunBi…
- ya estamos en casa, appa, ¿tranquilos sí?... – la trilliza contestó con todo y que ya iba subiendo las escaleras…
- ¿con quién estabas?... – aún así, el moreno seguía hablando por el teléfono, claramente celoso de imaginar que su pequeña princesa hubiera estado con algún chico… aunque ya tiene 18 años!
- appa, deja llego, ¿sí? Es absurdo estar hablando cuando estoy por llamar a la puerta… - y golpeó un par de veces en la habitación de sus padres, mientras EunBi se dirigía a la del YooSu…
- ¿con quién estabas, jovencita?... – volvió a preguntar el moreno apenas le abrió la puerta a su hija…
- buenas noches, appa, también te amo… - le plantó un beso en la mejilla, no pudiendo evitar sonreír un poco divertida por la actitud de su padre, mientras que Jaejoong simplemente se había sentado en la cama esperando también por la respuesta de su trilliza…
- Jade… - llamó con voz fuerte el moreno…
- ay appa, estaba con unos amigos, ¿sí? Antes de eso, cené con Geun Suk, y antes de que me saltes con sermones appa, déjame decirte que somos novios y que en verdad me gusta, así que por favor, no me vayas a decir que no puedo salir con un chico, porque ya tengo 18 años…
- mira, sacaste en eso a tu umma, se aprovechan de que les amo más que a nada en el mundo para manipular mis reacciones… - suspiró con tono entre resignado y molesto…
- que exagerado, Yunnie, cuándo he manipulado tus reacciones, ¿eh?... – sonrió el pelioscuro… ok que no sentaba del todo bien saber que su pequeña ya no era una niña y que finalmente había llegado el momento de comenzar a conocerle novios… pero vamos, era algo que tarde o temprano iba a pasar, y tal vez el hecho de ser umma, o lo que sea, pero sabe que le dolerá más a Yunho pasar por esa etapa que a él…
- cuándo no, para muestra, lo que pasó hace unos minutos, ¿te acuerdas, JaeBoo?... – resopló con frustración y volvió a sentarse en la cama… - ¿y cómo dices que se llama tu novio, cuándo va a venir a presentarse y pedirnos permiso para salir contigo? ¿Cuántos años tiene, desde cuándo le conoces, es buen chico?...
- para tu carro, appa, demasiadas preguntas… - la trilliza rodó los ojos… y eso que todavía le iba a tocar lidiar con los sermones de sus hermanos… - se llama Geun Suk, es de mi edad, cualquier otra cosa, la hablamos luego, ¿sí? Tengo sueño… - y sin dar tiempo a que el moreno dijera siquiera “ésta boca es mía” su hija ya les había dado un beso en la mejilla, deseado buenas noches, y salido de la habitación…
- será posible, ¿ahora es cuando se nos van a venir a revelar o qué?... – pero el pelioscuro solo rodó los ojos ante las palabras de su pareja…
- tiene 18, Yunnie, es más que normal que tenga novio…
- pero ni le conocemos…
- ya no es como antes, además, hasta donde recuerdo, nosotros hablamos sobre nuestro noviazgo con nuestros padres hasta que ya estaba en el octavo mes de embarazo si mal no recuerdo…
- pero es distinto… MUY distinto, Boo… - porqué sentía que ahora menos era comprendido por su pareja… ¡estaban hablando de su princesa!
- ya sé, de entrada porque nuestra relación es gay, o como le quieras poner; pero a fin de cuentas, Jade está en edad de tener novios, de conocer chicos, y no necesariamente de traer a cada uno ante nosotros para conocerle, dejemos que sea ella quien decida cuándo quiere presentarnos al chico que le guste, o del que llegue a enamorarse, como sus padres, debemos apoyarle, Yunnie…
El moreno refunfuñó no del todo de acuerdo con las palabras del pelioscuro… pero como solía pasar, sopesó aquello con lo que puede ser mejor para su hija… y se dio cuenta de que una vez más, Jaejoong tenía razón…
- vale, pero igual, de una u otra forma terminaré por conocer al susodicho y ponerle los puntos sobre las ies…
- padre celoso y sobreprotector… - murmuró Jae sonriendo por la actitud del moreno…
……………………………………………
Esa noche al final resultó más larga para unos que para otros… Yang finalmente había llegado unos cinco minutos después de las chicas, por lo que el YooSu respiró tranquilo y pudo dormir… eh, bueno, fue la idea, pero Junsu estuvo por demás activo y terminaron montándoselo otras veces durante toda la noche… y era curioso ver ahora a Yoochun con ojeras y cansancio…
El YunJae también había conciliado el sueño cuando los trillizos y Ji Song llegaron a casa… bueno, el moreno tuvo incluso pesadillas acerca de un monstruo robándose a su hija de su hogar, alejándola de su lado para siempre… es que, las hormonas y el amor de padre le había tejido escenas medio cómicas pero angustiantes a Yunho… iba a costarle, definitivo que iba a costarle hacerse a la idea de que su princesa ya era toda una mujer…
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Por otro lado, en casa del KoMin, Keisuke y Hwan Ho-Yong no había podido dormir en la misma cama… y después del tercer beso que les dejara sin aliento y que se dieran sobre ella desordenando las sábanas y explorando tímidamente el cuerpo del otro; habían optado por parar antes de hacer algo para lo que saben no están preparados y que ciertamente les asusta un poco… una cosa son los besos apasionados, otra muy distinta las caricias más confiadas… y más si son sobre una cama que les despertaba las hormonas y las fantasías…
Así que al final, Hwan terminó en el suelo sobre un edredón durmiendo… como tampoco debiera haber dormido, pues había tenido sueños húmedos con Keisuke que inevitablemente hicieron que su cuerpo reaccionara… y su ropa interior terminara mojada por ese líquido que no pudo evitar liberar de su entrepierna… claro está, no fue el único que tuvo ese “problema”, pues Keisuke había pasado por los mismo… solo que no se atrevieron a mencionarlo cuando al despertar cada uno corrió a un baño distinto en la casa para limpiar los rastros de sus abochornantes experiencias nocturnas…
El amor es muy lindo… pero a esa edad, también una fuente de vergüenzas y sensaciones difíciles de controlar…
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Residencia YunJae-YooSu
Era fin de semana y las familias volvieron a reunirse para compartir la comida… y unas relajantes horas juntos llenas de charlas, sonrisas y esa sensación de felicidad en familia que solo puede vivirse no explicarse…
Cuando Makino llegó con MinHwan, todos se quedaron enternecidos al ver que el pequeño Mason ya comenzaba a dar sus primeros pasitos, obviamente, Makino le tomaba por los bracitos, pero era claro que el pequeño ansiaba poder caminar solito y moverse por todos lados, a saber la cantidad de travesuras que desea hacer ya…
- Yunnie, ¿te acuerdas cuando los trillizos empezaron a caminar?... – todo emocionado, el pelioscuro le abrazó mientras su mente vagaba en recuerdos de aquellos maravillosos años…
- claro que lo recuerdo, Boo, me sacaron cada susto… - y es que el moreno siempre temía que sus pequeños trillizos se fueran a lastimar al caer…
- tú siempre tan… tú, Yunho… - se medio burló el ratón…
- cállate, que hasta donde recuerdo estábamos igual nada más atrás de nuestros retoños queriendo abrazarlos porque nos daba miedo que se fueran a lastimar, y claro, Jae y Junsu atrás de nosotros diciéndonos que teníamos que dejarles aprender a hacer pequeñas cosas por sí solos…
- vale… ya entendí… - se rindió el pelinegro, no tenía nada de ganas de discutir… o quizá no tenía ni imaginación para contraatacar… en verdad, ahora el pervertido parecía ser Junsu, porque todo el tiempo que puede se lo come a besos y lo arrastra en sus caricias hasta que consigue hacer el amor otra vez… - “bastante diferente de la primera vez, cuando casi no me dejó tocarlo durante el embarazo”
Y por supuesto, era cien veces preferible esta felicidad agotadora, que la angustia de aquella vez…
- Chunnie, bésame… - pidió con un puchero el castaño oscuro, sentado en el sofá con la piel abrazándole de deseo… claro, no era que se lo fuera a montar con su ratón delante de todos… se conformaba con un beso…
- no era que te da vergüenza que te ande besando delante de todos… - el pelinegro paseó su vista por toda la estancia, ahí estaban Makino, MinHwan, el YunJae y sus hijos, el JunYong con los suyos, igual que el KoMin, y por supuesto, Ji Song, y sus gemelos…
- ¿no quieres besarme?... – y de repente todo fue un agradable deja vu, con obvias diferencias como los meses de embarazo de su pareja y varias personas que por aquéllos entonces ni siquiera nacían ni formaban parte tan importante de sus vidas…
- claro que quiero, Susu ah… - y acercándose por detrás del sofá, el pelinegro se inclinó atrapando los labios de su pareja en un beso dulce y lento…
Todos los presentes les miraron con sonrisas tiernas… aunque los chicos se hubieran sentido avergonzados al ver al YooSu en aquel beso… el famoso beso al estilo Spiderman que años atrás el castaño oscuro hiciera especial por el simple hecho de haberlo pedido cual niño pequeño pidiendo dulce…
- había olvidado el beso al estilo Spiderman, Yunnie, me besas así también… - le pidió el pelioscuro a su pareja… petición que el moreno ni tardo ni perezoso cumplió…
Mientras los más chicos quedaban con cara de “what” sin comprender del todo de qué iba eso del beso al estilo Spiderman…
- oh sí, yo recuerdo esa película, fue muy popular cuando éramos más jóvenes… - soltó de pronto Makino, Mason estirando sus brazos hacia Yang Su-Chun, en verdad que amaba al gemelo Park, que nada más lo veía y quería que lo abrazara…
- que rico beso… - le susurró el ratón a su delfín, de modo que solo él le escuchó… - adoro que te sonrojes así, Susu ah… - sus dedos acariciando las mejillas teñidas en carmesí del castaño oscuro…
- eh, Bae… - Ji Song tiró de la camisa de su novio para que le prestara atención… - me besarás así algún día…. – cuestionó con voz baja y con las mejillas a tope de rojo…
- cuando me lo pidas, amor, ahora mismo si quieres… - pero ya su novio negaba con la cabeza notoriamente avergonzado… - ésta noche te besaré mucho, Ji Song… - le murmuró al oído… colocando un sonrojo tanto más intenso a ser posible en las mejillas de su novio…
Y Yang igual solo quería poder raptarse a su novio para besarle de aquélla manera… y es que no era en sí el beso… era… era la calidez y el amor que se veía matizado en la manera en que el YooSu y el YunJae se miraba… y JunHo también quería experimentar ese beso con Ji Yong, como Kohei definitivamente pensaba hacer con ChangMin apenas tuvieran un momento a solas…
Porque el beso a lo Spiderman, era recuerdos gratos de felicidad… los que aún estaban por construirse en tan grande familia…
Continuará……
ooo el beso estilo spiderman es suuper lindo ^_^ lo practicare XD claro cuando haya alguien XD
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