Eso, un par de minifics, uno lo acabo de escrbir, el otro andaba por ahí en mis archivos xDDD y me dije, hay que compartirlo cn el mundo de los fics xD ok ok tbn es culpa de mi creciente ansiedad por YS besho y pornoso...
**YUNJAE**
No había necesidad de memorar nada, ni de dar explicaciones ni de enumerar los sucesos que les habían llevado a comprender que la amistad había sido alimentada por la atracción de tal modo que habían terminado en una relación sentimental construída sí, básicamente a base de los mejores encuentros sexuales que pudieran imaginar… no que tuvieran demasiada experiencia en el campo o siquiera interés por aquello…
Y sin embargo, era un día demasiado soso, el calor sofocante y la poca disponibilidad de programas de entretenimiento o un trabajo que les ocupara eran los culpables principales del aburrimiento actual… no estaba ahí ese ChangMin que le molestara con peticiones de comida cada 30 minutos (o menos, eso dependía del humor, de la cantidad de tarea que tuviera sumido en libros o el ordenador y del tipo de platillo preparado); tampoco estaba ahí el Junsu juguetón que se la pasaba horas ante el play o pegado al teléfono charlando con su hermano; y por supuesto, no estaba ese Yoochun remilgoso que luego de largas siestas se empezinaba en obtener la atención del delfín sabiendo de antemano que era éste quien solía decidir cuándo le daba su regalada gana de atenderle y terminaban pegados de la boca besándose en algo que estaba lejos de ser lo condescendientemente aceptable… demasiada pasión disparada sin reserva…
Él, por otro lado, solo podía resoplar con frustración… ni siquiera estaba Yunho… y la tensión sexual que ha venido acumulando en las últimas semanas con migajas de tiempo para los dos le estaban sobrepasando… Jaejoong resopló de nuevo dejándose caer en el sofá, el aire acondicionado se había descompuesto y el técnico aún no se dignaba en aparecer y aquello era el maldito infierno que le estaba friendo incluso el cerebro… acababa de tomar una ducha pero incluso aquello no había sido suficiente para refrescarse, llevaba una camiseta de resaque y un short delgado, tela ligera que le permita transpirar cómodamente mientras piensa que el sofá también se siente demasiado caliente y que estaría mucho mejor metido en un congelador o mínimo tirado sobre el frío piso… descartado todo aquello, no podía arriesgarse a contraer algún resfriado por exponerse de aquella manera a cambios abruptos de temperatura…
- ¡maldición!... – bufó y una pierna cayó lánguida por el costado del sofá… las gotas de sudor que resbalaron por el níveo contorno del pelioscuro podrían ser tentadoramente sexys, pero en aquel momento a Jaejoong solo le parecían molestas porque le recordaban el calor infernal que hace…
El sopor era tal que no había espacio para buscar algún tipo de distracción por voluntad propia… eso era peor que estar cansado luego de un concierto… el aburrimiento mezclado con el calor era la peor combinación posible… y su cruda realidad… ni siquiera tenía ánimos o fuerzas para levantarse por un vaso de agua que le refrescara un poco… y cuando el tono de su móvil sonó, miró de soslayo hacia la mesa de centro… el aparato vibraba y sonaba, pero él tenía flojera hasta de estirar la mano para tomarlo…
- si es importante, insistirán… - concluyó luego de ignorar el móvil y esperar unos segundos comprobando que no sonaba de nuevo… - por tanto, no interesaba…
Hizo el esfuerzo por levantarse minutos más tarde cuando sintió que su espalda estaba empapada en sudor y se tornó incómodo… así que simplemente se echó boca abajo sin nada de ganas de cambiarse la prenda…
Ajeno estuvo entonces al hecho de que la puerta era abierta y su novio entraba por ella con cautela, como si llegara tarde o en sorpresa… el moreno dejó las llaves con cuidado sobre el cofre de plata que descansa en el mueble de la entrada, la chaqueta de cuero en el perchero que generalmente todos olvidaban usar…
Y al instante Yunho se dio cuenta… del calor tan sofocante que hacía en el departamento… pero antes de abrir la boca para preguntar nada, su mirada vagó por el cuerpo de su novio al verle tirado sobre el sofá… la prenda blanca se le pegaba a la piel y él podía distinguir con increíble facilidad el curso de la columna vertebral, o cómo se demarcaba sobre la tela cada omóplato y todo músculo oculto… el moreno tragó saliva… y es que más abajo el cuerpo perfecto del pelioscuro era simplemente una tentación difícil de ignorar, verle los glúteos resaltar sobre el short le recordaba la cantidad de veces que se ha perdido entre ellos dejando que su miembro excitado se entierre una y otra vez hasta el fondo… el moreno volvió a tragar saliva y sintió una punzada en la entrepierna, muestra clara de que a él, el calor también le estaba subiendo estrepitosamente…
- maldito calor… - el pelioscuro se quejó de pronto, su voz amortiguada contra el cojín bajo su rostro viajó a través del espacio y Yunho tuvo una idea…
- puedo quitártelo si gustas, Jae… - voz ronca con tono seductor que consigue pasar a través del estupor y la flojera en su amante, atrayendo su atención y ese leve movimiento de su cuerpo en el que el pelioscuro se incorpora apenas lo suficiente para girar el rostro y mirarle…
- cuándo llegaste… - suena la pregunta, pero ambos saben que es aquello lo que menos importa, que cuando Yunho se acerca y roza los labios de Jaejoong con suavidad, el calor solo aumenta un grado más y ambos saben que pronto arderá el mismo infierno ahí dentro…
- ya sabes, combatir calor con calor, como cuando tomas un café caliente y luego de unos minutos de verdad te sientes mejor… - el moreno murmura y sus manos ya se han movido por cuenta propia sujetando los bordes de la camiseta del pelioscuro para tirar de ella hacia arriba y sacarla de ése cuerpo sudado que se estremece ligeramente bajo su mirada…
- quiero un café entonces… - Jaejoong murmuró y sonrió con sus labios rojos curvando una línea sensual antes derelamarse los labios y sacarle con prisas la camiseta a su novio… - un café caliente, caliente… - ronroneó lamiendo el cuello del moreno mientras sus dedos largos y suaves delinean el pecho de Yunho…
Luego todo algo más de prisa, con las ansias y el calor agolpándose más y más sobre sus cuerpos, prendas tiradas en el piso, sofoco, jadeos y sudor… Jaejoong apoyado en el respaldo del sofá, de pie tras él, su cuerpo ligeramente inclinado y Yunho arrodillado a sus espaldas lamiendo con dedicación su entrada mientras le prepara para lo que sigue… hace más y más calor, se sofocan y se les funden los sentidos, queda espacio solamente para el placer, para la experimentación de ese calor diferente que pasa a gustarles y les insta a buscar más contacto, mas besos, más caricias, más deseo…
- ¡Jae!... – el moreno gime contra su oído cuando habiéndose puesto de pie le penetra con calma deslizándose en su interior mientras le rodea la cintura con una mano y la otra pasa al frente tocando los labios del pelioscuro y disfrutando de la forma en que su lengua caliente lame sus dedos…
- ¡ahhh Yunho!... – jadea y siente que se derrite, que el calor le ha fundido por completo y que no hay modo de que quiera cambiarle por frescura… que en aquel instante quemarse es lo mejor y que solo quiere que se mueva, que le embista con fuerza como sabe hacer… - ¡ya, dámelo!
Gimotea excitado y recibe con un gemido ronco aquella embestida poderosa que golpea contra sus glúteos… gemido que se repite una y otra vez durante los minutos siguientes cada que Yunho vuelve a tocar hondo en su interior y su miembro golpea justo aquel punto que le hace perder total control de su cuerpo… tiemblan y se estremecen cada segundo, Jaejoong cierra los ojos y se muerde los labios en un gesto natural por disfrutar a su manera del placer… el cabello se le pega a ambos por causa de todo ese sudor perlado en sus cuerpos, piel bronceada y nívea blancura se mezclan en la mejor de las combinaciones… destila cada gota de placer y están a nada de alcanzar el punto máximo de calor…
Se tensan de pies a cabeza y en una última arremetida, Yunho deja su semilla en el interior de Jaejoong mientras éste moja su mano y algunas gotas caen al piso… no importa, ya luego limpiarán o verán cómo cubrir la prueba del nuevo deslíz… sonríen bobamente y con la respiración alterada se dejan envolver por el orgasmo…
- ¿mejor?... – Yunho cuestiona luego de unos instantes, tiempo suficiente para recuperarse del orgasmo vivido…
- en realidad, creo que aún tengo calor… y vamos un poco sucios… - Jaejoong sonríe con malicia y sus labios rojos se le antojan algo más al moreno…
Unen sus labios de nuevo y metidos en ese nuevo beso apasionado ignoran por completo el timbre… y el chico que está fuera se pregunta si se habrá equivocado de piso… pero cuando escucha algo similar a un gemido, comprende que una vez más ha llegado en el momento inoportuno…
Por supuesto, nadie tiene tiempo para explicaciones ni memorias… pero todos ahí saben, que el departamento de TVXQ es por muchas razones privado y restringido…
**FIN**
**YOOSU**
Había perdido la cuenta de los besos que llevaban compartidos ya en esa peculiar noche de festejo en la que, a saber, ya solo se encontraban sentados en la mesa del bar tomando una tras otra copas de bebidas que resultaban refrescantes… y por supuesto embriagantes. Al principio la adrenalina y la energía la habían desfogado en la pista de baile, luego de largos minutos volvieron a la mesa con la intención de molestar al par de tórtolos que se habían quedado allá, pero Yunho y Jaejoong pronto les habían ignorado y marchado entre sonrisas y miradas enamoradas. Y de hecho ChangMin ni siquiera les había dado oportunidad de nada desde que llegaran al local, se había perdido entre la multitud y luego ni sus luces por ninguna parte. Con suerte Yunho no había hecho el típico drama de appa sobreprotector… o tal vez la influencia de Jaejoong con aquella sugerente compañía había tenido mucho que ver. Lo que fuera, volvamos al punto de inicio… o intermedio o el que sea, Junsu y Yoochun se habían dado un primer beso casi sin darse cuenta, simplemente sus rostros se habían acercado y mientras la sonrisa permanecía dibujada en sus labios por alguna de las tantas tonterías que salían de sus bocas, se habían fundido en un toque que, definitivamente, podía ser llamado beso.
Al separarse habían reído nerviosamente y tratado de ignorar el hecho volviendo a conversar de trivialidades… minutos después y luego de otra bebida, sus bocas se habían buscado de nuevo, esa vez, con algo más de anhelo y curiosidad que antes. Y así, en algún momento mantener sus bocas unidas compartiendo aquellas húmedas caricias había resultado imprescindible, de modo que, estaban ahí… perdidos entre besos y suspiros, entre aroma a licor y un calor que les comenzaba a atontar instándoles a buscar más y más contacto.
No… no han errado el pensamiento… luego de tantos besos y esos tintes de pasión que se deslizaron con absoluta libertad entre ellos, las manos habían tomado parte del repentino juego de besos… aparecieron las caricias sumisas, casi tímidas que depositadas fueron sobre brazos y espalda cuando sus cuerpos se buscaron automáticamente necesitados de contacto y calor. Y más tarde, esos jadeos exquisitos que sonaron en los oídos de Yoochun cuando Junsu se alteró mucho más ante los besos sinuosos que dejó caer sobre la piel de su cuello.
- Chun… Chunnie… - el castaño cerró los ojos y el nombre de su compañero, amigo y confidente fue todo cuanto salió de su boca… se sentía mareado y el calor que sentía comenzaba a abrasarle la piel…
- ¿mh?... – cuestionó-gruñó-jadeó el pelinegro… demasiado entretenido en su reciente descubrimiento como para suspender su actividad por siquiera levantar la mirada para verle… la blanca piel del cuello del castaño sabía demasiado bien como para querer dejar de saborearla…
Así, Junsu no tuvo más remedio que dejar a su amigo dejarle seguir… pero para cuando las manos de Yoochun cayeron sobre sus muslos acariciándole demasiado cerca de la entrepierna, el castaño no pudo callar los gemidos que nacieron en su garganta, ni evitar que se le desbocara el corazón o que la respiración se le alterara de sobremanera. En una palabra, estaba excitado. Y el pelinegro nada lejos estaba de la misma circunstancia, estar de aquel modo con su amigo le había aumentado la temperatura tantos grados por encima de lo imaginable que casi sentía que se ahogaba y los sentidos se le aturdían, y sentía también esa necesidad de tocarle más y más, de obtener más de esos sonidos placenteros que escapan de labios del castaño, de sentirle algo más perdido cuando acaricia sus brazos o se remueve inquieto en su lugar arrinconado contra la pared en aquel sofá de una de las mesas VIP del local en donde la oscuridad casi reina en su totalidad y el sonido aturdidor de la música no deja espacio para más nada que los sonidos cercanos que comparten sus cuerpos.
- Junsu, quiero tocarte… - el pelinegro murmuró con voz ronca, y una de sus manos para entonces ya había encontrado camino bajo la camiseta blanca palpando la suave piel de su torso…
- nhh… to…tócame… - accedió a sabiendas de que no habría modo de resistirse más a aquel calor, a aquella necesidad… a esa placentera sensación de ser tocado por su mejor amigo… entonces, aquel que se convertía en su amante…
Y fue tal vez cosa del licor, o de los sentimientos reprimidos por años… o quizá algo tuvo que ver el Destino o el karma… no nos preocupemos por nimiedades, ambos chicos terminaron en una habitación de hotel desnudándose con prisas y sofocándose en calor. Incluso fue cómico ver cómo Yoochun peleaba con sus propios pantalones cuando los tenía en los tobillos y lo extraño que resultó para Junsu que los suyos no quisieran pasar de sus caderas. ¿Cuándo le había crecido el trasero? No, no era eso, estaba tan apurado que se había olvidado del pequeño gran detalle de desabrochar el botón. En fin, para cuando consiguieron su objetivo de mostrarse al desnudo y sus miradas toparon con el cuerpo del otro, el aire casi se les fue y sus mejillas se encendieron en carmesí… de algún modo, la vergüenza finalmente había hecho acto de presencia.
Aún así y sobreponiéndose, ambos jóvenes volvieron a acercarse, manos tímidas se enroscaron en la cintura y espalda del otro mientras sus bocas se buscan de nuevo y comparten un beso calmado que dulce se entrega con sumisión. Después, la pasión hizo nuevamente aparición y sus labios se fusionaron con ímpetu demandando besos profundos y guerras sin cuartel de lenguas fieras que luchan por el control. Cayeron sobre la cama y el roce de aquellas partes de sus anatomías les hizo jadear inquietos, sus manos no paraban de moverse por el cuerpo ajeno con ansiedad, reconociendo y marcando cada palmo de territorio como si fuera virgen y por primera vez fuesen tocados de aquella manera. Pronto el momento simplemente siguió su curso natural y el placer demandado encontró desahogo en la forma en que sus manos proporcionaron atenciones a la entrepierna del otro.
Yoochun y Junsu gimieron entonces sin pudor, con las mejillas arreboladas de carmín y la respiración alterada, el corazón les iba a mil por hora y el calor que les quemaba la piel subía más y más como si aquello no tuviese límite. Sintieron bajo el tacto de sus manos la erección del otro crecer, y sus sentidos perderse con aquella velocidad en un mundo de sensaciones placenteras que no sabían que podía compartirse con alguien del mismo sexo a tal grado de satisfacción.
De un momento a otro el pelinegro se acomodó entre las piernas del castaño, y mientras le besaba con súbita pasión, una de sus manos se coló entre sus piernas y pasó por debajo hasta aquel espacio íntimo que le generaba entonces morbo y necesidad. Junsu se removió inquieto rompiendo el beso bruscamente cuando sintió un dedo pasar por encima de su pasaje; Yoochun sonrió de aquel modo tan sexy que le caracteriza y susurró en su oído palabras que volvieron a marearle y ceder a los deseos de su amante. Pronto los dedos del pelinegro encontraron guarida en la boca del castaño hasta que completamente llenos de la saliva de éste volvieron a escapar y huir cuesta abajo hasta la intimidad de Junsu; ahí donde lentamente fueron ingresando uno a uno mientras el pelinegro le besa y hace lo posible por compensar con caricias y cariños el dolor que le provoca su intromisión.
- ¡Chun!... – no pudiendo hacer demasiado ante ese grito desesperado y adolorido del castaño cuando finalmente fue su erección la que ocupó el espacio estrecho que hubieran dilatado sus dígitos.
- tranquilo… relájate Su… - el pelinegro le besaba las mejillas y los labios con dulzura y ese dejo de culpa que sintió al saber que le había lastimado aunque aquella no fuese su intención, muriendo de placer con la sola sensación de la prisión de sus estrechas paredes.
Más tarde Junsu le sonrió y asintió dándole a entender que el dolor había pasado… o que por lo menos se había acostumbrado a su invasión… Yoochun se movió entonces despacio, saliendo y volviendo a embestir con cuidado queriendo que pronto se desdibujen los gestos incómodos del rostro de su amante. Aunque aquello tardó en aparecer, pero para cuando así sucedió, Yoochun sintió que tenía luz verde para acometer contra las caderas de Junsu con más fuerza y pasión… de modo que, minutos más tarde, los gemidos de ambos chicos inundaron la habitación y el placer ocupó todo el espacio como sofocó algo más sus sentidos arrastrándoles lentamente al éxtasis.
Más rápido, más fuerte, más profundo, más salvaje… frenesí de caderas que se acompasan en el ritmo perfecto… cuerpos que danzan y corazones que se sumergen… ¿Hacían el amor? No, tal vez no porque para ello necesitaban ser conscientes del sentimiento que palpitaba más allá de sus corazones radiante en el alma… pero aquello definitivamente fue una experiencia única y espectacular que desde entonces se repetiría a menudo hasta que los amantes fueran capaces de comprender que lo que les une es el Amor.
FIN
mioooooooooooooooooooooo *0*
ResponderEliminarAmé el YooSu! LO AME! Gracias Feli por compartir esto con nosotras :D
ResponderEliminarAME EL YUNJAE!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarSON TAN SEXYS Y ROMANTICOS A SU MANERA!!!!!!!!
MUCHO CALOR PUEDE LLEVAR A MUCHAS COSAS!!!!!!! JAJAJA
Y EL YOOSU PORNOSO A SU MANERA JAJAAJ
GRACIAS FELI POR REGALARNOS ALGUNOS SHOTSITOS JEJEJE
SEE U!
gracias por compartirlos, como siempre te han quedado hermosos.
ResponderEliminarel junjae contrarestando el calor de la mejor manera posible.
el yoosu conociendoce y poco a poco ir aceptando que se quieren.
aaa ame el yunjae pero me gusto mas el yoosu xDD estuvieron super geniales feli gracias por haberlos compartidos
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