CAPÍTULO 18. KASA LLENA
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Una vez que Yunho le hubiera pedido matrimonio a Jaejoong, y el YooSu les viera a la distancia consolidar ese momento con besos que oscilaban entre la ternura y la pasión; Junsu se quedó observando hacia donde se encontraban sus hyungs con una sonrisa soñadora que no pasó desapercibida para Yoochun. Ellos dos se encontraban sentados también en una manta a unos metros de donde el YunJae, claro está, todo era porque el pelinegro tenía que estar “con un ojo al gato y el otro al garabato”, pero por lo que podía ver en la mirada de su novio, no le había resultado pero para nada desagradable, por el contrario, era como haber tenido la primicia de un acontecimiento muy grande.
- por la forma en que Jae llora y le besa sin parar, seguro que Yunho estuvo muy romántico… - el castaño oscuro dijo mientras volvía su mirada a su pareja…
- bueno, a Yunho en realidad le preocupaba mucho que no fuera a ser de agrado para Jae, o que no resultara original y romántico…
- yo creo que una proposición cuando es nacida del corazón siempre es romántica y original, no siempre se tienen que planear con tanto detalle las cosas… - opinó el castaño en tanto se acomodaba mejor recargado en esos cojines que el pelinegro había dispuesto en su espalda…
- supongo… - susurró Yoochun mirando de soslayo a su delfín… ahí estaba, el brillo fulgurante de la ilusión resplandeciendo en sus castañas pupilas… y esperaba que en cualquier momento su novio empezara a lanzarle indirectas respecto a su propio momento de unirse en matrimonio…
Después de todo, aquello había resultado no ser imposible legalmente, habían descubierto que había una reforma legal en cuanto a contratos matrimoniales que les permitía contraer matrimonio aún cuando fueran personas del mismo sexo.
Pero Junsu conocía demasiado bien a su novio como para no darse cuenta de que estaba asustado… de que ver cómo Yunho le pedía matrimonio a Jaejoong le tenía ansioso y nervioso, seguro, pensando que él esperaría lo mismo de su parte…
- ven y bésame, Chunnie… - dijo el castaño oscuro casi como un mandato pero sonriendo gentilmente hacia su novio… el pelinegro abrió la boca listo para decir algo, pero calló cuando el castaño le hizo uno de esos pucheros a los que no puede resistirse, así que se acercó hasta él besándole despacio… así como Junsu sabía cuánto le amaba sin duda alguna…
- Te Amo… - y no supo exactamente porqué, pero el pelinegro susurró aquello contra esos labios sonrosados que suspiraban como anhelando volver a ser besados… y lo hizo, le besó una y otra vez durante tal vez minutos, hasta que sintió el deseo de ir más allá, y una de sus manos viajó al vientre abultado del delfín acariciando por debajo de la polera que le quedaba como varias tallas más amplia al castaño…
- uy, al ratoncito le han entrado ganas de jugar… - susurró con picardía mientras llevaba sus manos al torso del pelinegro tanteando con las yemas de sus dedos la piel que iba encontrando a su paso… recostándose un poco más sobre los almohadones y sintiendo cómo su pareja se acomodaba mejor sobre su cuerpo sin llegar a dejar todo su peso sobre él…
- de verdad Te Amo, Susu ah… - y es que de repente le había entrado un miedo irracional de que el castaño fuera a pensar que no era así… - nunca podría explicar cuánto… - y una de sus manos fue a tomar la mano derecha de su pareja, acariciando algo inconscientemente el dedo anular… ahí donde él quizá también debiera colocar un anillo de compromiso…
- también Te Amo, Chunnie… - y separándose apenas de esos labios sensuales que le traían loco desde hace décadas, el castaño apartó sus manos del torso en donde habían estado traviesas para poder enmarcar el rostro del pelinegro… - no importa que no tengas un anillo para mí, yo sé… yo sé que… - pero por más que intentara, el nudo en su garganta no le dejaría hablar como si nada… - no te obligaría nunca a proponerme algo que no deseas Chunnie…
Y los ojos del castaño se cristalizaron sin dar tregua al disimulo, pero también era sincero, no obligaría al pelinegro a nada que los dos no desearan de corazón. Yoochun le miró cariñoso sabiendo perfectamente que esa triste sonrisa ocultaba lo que nunca le diría de viva voz…
Que anhelaba como había hecho Jaejoong, una sortija de matrimonio.
- pero lo quieres, ¿verdad Susu ah?... – sus manos acariciando esas mejillas que teñidas en carmesí se sentían tibias y cálidas…
- sí… - respondió mordiendo su labio inferior, susurrando apenas ese monosílabo, casi como si fuera una palabra prohibida en ese momento… - soy como muchos hombres Chunnie, y creo en el matrimonio, pero… te tengo a ti y a nuestros hijos, tengo la felicidad que necesito para seguir adelante, no quiero… - volvió a enmarcar el rostro del pelinegro obligándole a mirarle directamente a los ojos… - prométeme que no te vas a precipitar a nada con tal de complacerme, Chunnie… - y es que le conocía… era capaz de todo con tal de darle hasta la última pieza de plenitud…
- Su… - tomó las manos del castaño y las apartó de su rostro, besándole luego los nudillos y volviendo a besar sus labios con ternura en tanto dejaba esas manos sobre su cadera y las suyas iban de nueva cuenta a la cintura del castaño… - la verdad, fue idea de Yunho, pero no pienses que no llegué a contemplarlo…
- está bien, Chunnie, de verdad… - el castaño entonces quiso distraerle con sus besos y caricias, que no pensara que le entristecía no tener un anillo de compromiso o que no anhelaba formalizar su relación a tal nivel, así que optó por distraerle… - ¿vamos a hacerlo acá, ratoncito pervertido…?
- mh, no sé… - pero su boca ya estaba besando y mordisqueando gentilmente en su cuello y mentón…
- mhh, Chunnie… es un lugar público… - su temperatura comenzando a aumentar… sus manos inquietas moviéndose por la espalda del pelinegro…
- como si fuera la primera vez que lo hacemos en un lugar público… - sonrió y mordisqueó su lóbulo…
- ahhh, pero… - para qué negarse, con lo cerca que estaban de la abstinencia obligada… - vamos al auto por lo menos… - porque él mismo sentía su piel arder deseosa de rozarse con la del ratón…
Yoochun rió algo pícaro y otro poco enternecido… su Junsu sí que andaba ganoso desde hace semanas… llevó su mano a su espalda y demarcó su columna vertebral de abajo arriba, para luego bajar hasta su trasero presionándole un glúteo, arrancándole un sonoro gemido al castaño. Por suerte ese lugar era lo suficientemente privado, pero no le extrañaría que en verdad alguien por ahí les llegara a escuchar… y eso en realidad, despertaba su libido a tal punto que su entrepierna estaba más que despierta… apenas se iba incorporando para poder tomar a Junsu entre sus brazos, cuando…
Su móvil sonó… era el YunJae que le requería para ayudarles a levantarse y volver a la cabaña que habían rentado y se encontraba a unos 200 metros cuesta abajo en esa colina del Parque.
- just kiding, ¿right?... – Yoochun maldijo por lo bajo mirando el mensaje en su móvil… no era posible que le fueran a dejar con la calentura… - no podían haberse esperado otro rato…
- ve ratón pervertido… - Junsu rió… aunque por dentro también maldecía la suerte de que le dejaran con tremenda erección entre sus pantalones… - al fin que venimos a cuidarlos, ¿no?
- ¿venimos?... – enarcó una ceja… - YO vine a cuidarlos… - un corto beso en labios de su novio… - a los tres, delfín travieso… - se incorporó largando un suspiro… - bueno, nos tocará esperar hasta que ese par nos de más de media hora para hacer el amor… - susurró sobre sus labios con lascivia…
- uy, me gusta como ha sonado eso… - le apretó el trasero… sorprendiendo en el acto al ratón… y le robó un beso apasionado antes de dejarle ir…
- creo que ahora vas a ser mi delfín pervertido, no solo travieso… - dijo ante la radiante sonrisa de un Junsu que pretendía parecer inocente y luego se fue donde el YunJae… que ya sentía su móvil vibrar en su bolsillo… cuando llegó… - no sean impacientes, no era como si estuviera aquí a 10 metros… - respingó…
- qué te dije, Yunnie… - el pelioscuro miró acusador al moreno… después de no haber podido evitar el bulto entre los pantalones del pelinegro… como tampoco pudo evitarlo el propio Yunho…
- no es mi culpa que estén como conejos queriendo montárselo todo el día, yo pensé que por lo menos en este momento se iban a aguantar, además, es un lugar público, Boo; bien que no hay demasiada gente en los alrededores, pero eso no quita que haya por ahí… - se defendió el moreno… la venita en la sien de Yoochun estaba que explotaba…
- no me vengas con críticas constructivas que me has cortado la inspiración en un momento perfecto, a ver, dejen los ayudo, que mientras más pronto les deje por ahí donde puedan tener lo suyo, yo podré retomar en lo que me he quedado…
- ¡Yoochun!... – respingaron a la vez el YunJae… y es que, tal vez por las hormonas, les avergonzaba escuchar a su amigo hablar así de ESO tan quitado de la pena…
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Un día después…
Residencia KoMin
Kohei estaba más que nervioso, y caminaba de un lado a otro por la estancia esperando a que ChangMin saliera de la habitación… ahora le había dado por la vergüenza desmedida negándose en rotundo a permitirle verle desnudo o mientras se cambiaba después de la ducha… qué decir justo de ésa actividad, que ahora no le dejaba ayudarle y lloraba y casi hacía rabieta de niño chiquito si es que le insistía en acompañarle por su propia seguridad… así que Kohei no tenía más remedio que dejarle, aunque le vigilara desde el otro lado de la puerta atento a cada sonido dentro…
Luego de un par de minutos más, ChangMin por fin salió… todo guapo con un traje que le quedaba muy bien… aunque hiciera resaltar un poco su tripa… pero eso le parecía la escena más tierna al japonés… y es que estaba más que emocionado sabiendo cuán cerca se encontraba el día del nacimiento de su beba…
- ¿listo?... – el japonés le extendió la mano caballerosamente… cosa que hacía sentir bastante femenino al menor y colocaba un rubor en sus mejillas… pero que no le desagradaba del todo, era después de todo su manera de amarlo, a eso estaba más que acostumbrado después de tantos años de convivencia…
- listo… - aceptando la mano que le era ofrecida, ChangMin suspiró antes de sentir ese dulce beso en sus labios…
- ¿no te da vergüenza que Keisuke nos vea?... – el adolescente sonrió al escuchar su nombre…
- a mí no me da vergüenza verlos, umma, ustedes dos se ven muy bien comportándose así… - aseguró el adolescente sonriendo algo más ampliamente al ver el intenso sonrojo que se apoderaba de las mejillas de su umma… quizá era que estar bien en su noviazgo con Hwan ayudaba mucho a esa actitud algo más relajada que estaba comenzando a tener… menos rígida y racional…
- tú lo que quieres es que me caiga mal la cena, verdad… - acusó el menor a su hijo… lo que hizo sonreír a Kohei y rodar los ojos al adolescente…
- umma, no eras tú quien me decía que no fuera exagerado…
- ¡me estás diciendo exagerado!...
- Minnie… - trató de tranquilizarlo el japonés…
- me está diciendo exagerado… - acusó… a su propio hijo…
- pero yo no… - iba a defenderse… pero apenas recordó esos cambios de humor que tan pronunciados parecieron esta vez en su umma, el adolescente prefirió callar y dejar que su appa se encargara…
- ya, Minnie, vámonos que se nos hace tarde… - le rodeó la cintura y lo instó a caminar… fuera de casa… - no olvides cerrar todo…
- todo con llave, no abrirle a extraños, marcar al móvil de ustedes si algo va mal o me parece extraño, los números de emergencias están pegados en la nevera… - recitó cansinamente el adolescente… y es que era eso ¡no un niño!...
- vale, vale, ya entendí que te fastidio recordándotelo… - sonrió su padre, mientras que el menor abordaba el auto con el ceño fruncido… - no te vas a ir molesto con tu propio hijo, ¿o sí?...
- no… - ChangMin suspiró… - no olvides todo lo que recordaste… - ¿no fue eso un pleonasmo?... – lo que quiero decir es que te cuides mientras tu padre y yo no estamos, y nada de andar pegado al teléfono con Hwan, bueno, solo un rato, pero te acuestas temprano…
- no sabía que no pensaban volver a dormir… - se rascó la nuca con interrogación… ChangMin se mordió, figurativamente, la lengua…
- lo que tu umma quiere decir es que, por cualquier cosa, no te vayas a desvelar demasiado… - “aclaró” Kohei más que nervioso y sonrojado…
- bueno, ya entendí, que les vaya bien… - les dio un beso en la mejilla y volvió dentro de la casa… mientras sus padres partían a esa cena en la que Kohei simplemente había invitado a ChangMin sin aparente razón de festejo…
……………………………………………
Cuando llegaron al Restaurante, ChangMin no podía creer lo que sus ojos veían… aparte de que eran los únicos pues la reservación se había hecho exclusiva en una planta que daba una hermosa panorámica de la ciudad bañada con sus luces y destellada por los rayos de plata de la luna y las estrellas, la mesa al centro estaba bellamente decorada y tenía unas velas al medio dejando la estancia a media luz, los utensilios eran de plata y la vajilla de reluciente de porcelana; era la escena romántica perfecta. Además de eso, el ambiente era amenizado por un grupo de músicos que armonizaban el violín, piano y saxofón, dejando fluir melodías clásicas preciosas que hicieron que miles de mariposillas aletearan en su estómago dejándole esa sensación de emoción, contentura y dicha.
- Kohei, no tenías que… - un suave beso del japonés sobre sus labios haciéndole sentir, a ser posible, más amado…
- mereces esto y más, amor… - susurra en su oído sin soltar esa mano que aprieta un poco más la suya…
- eres el culpable de que me sienta como mis hyungs… - replica con un dulce puchero… y es que siempre se había aprovechado para burlarse de Junsu y Jaejoong por ser un tanto femeninos en su respectiva relación con Yoochun y Yunho.
Kohei sonríe y le conduce hasta la silla ayudándole a sentarse para luego tomar lugar a su lado. Pronto un mesero se acercó para ofrecerles el menú… pero la verdad, ChangMin estaba más embelesado observando cada romántico detalle en el Restaurante. Había cuidado hasta lo mínimo y ahora él sentía que estaba en una de esas películas cursis en que el galán está por proponerle matrimonio a la doncella… el menor movió la cabeza de un lado a otro ante tal pensamiento… no era como si él deseara eso… ¿cierto?
La cena transcurrió con absoluta normalidad… bueno, con romántica normalidad, porque los platillos habían sido exquisitamente deliciosos y seleccionados para ChangMin, porque la música seguía siendo un fondo precioso y el japonés no paraba de halagarlo, de recordarle todas y cada una de esas cosas que más le han ido enamorando día con día desde que le conociera.
- sabes que soy inmensamente feliz, ¿verdad, Minnie?... – nerviosamente le miró a los ojos… el momento justo era ése, con el postre servido y una hermosa melodía siendo conducida bajo el saxofón…
- claro que sí… ambos lo somos… - le sonrió con cariño, tomando una de las manos de su novio… dándose cuenta de que no había ni habría nada en el mundo que le hiciera más feliz que haber conocido y amar a Kohei…
- Minnie… - aclaró nerviosamente la garganta y soltando la mano del menor buscó algo en el bolsillo de su saco… - tal vez sea por mi familia… - tradicionalista… - pero… apenas supe que podía… que podíamos hacer esto también legal, yo… bueno yo no pude evitar querer dar éste paso contigo… - mostró la caja aterciopelada de color negro abriéndola ante la atenta (y emocionada) mirada del menor… - ¿te casarías conmigo?
Silencio…
ChangMin no hacía otra cosa que mirar el precioso anillo en la cajita y a Kohei alternadamente, sin moverse ni decir nada… solo ahí como dando sentido a eso que estaba pasando y que esperaba no fuera solo un sueño… todo nervioso, el japonés tomó la mano del menor, trayéndolo en el curso de vuelta a la realidad, palpable como el tacto de sus manos…
- ¿quieres pensarlo?... – eso… eso y no una negativa…
ChangMin negó con la cabeza efusivamente mientras una sonrisa se curvaba en sus labios y sentía una lágrima resbalar por su mejilla… una lágrima de felicidad…
- no… sí que quiero, Kohei… - el japonés suspiró ante sus palabras… sonrió también y luego deslizó el anillo en el dedo anular de la mano derecha del menor… - Te Amo…
- y yo a ti, Minnie… eres mi vida… - y sellar el momento con un dulce beso justo cuando la melodía de fondo alcanzaba el punto máximo del saxofón…
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Esa misma noche…
Ji Yong se extrañó de que sus hijos le dejaran volver solo apenas le vieron bajar del taxi en la esquina de la calle de su casa… que tenían una reunión con sus primos y ya iban tarde…
- ¿a esta hora?... – había cuestionado el chico raro consultando su reloj, eran pasadas las nueve de la noche, y si habían llegado tarde era porque a Shen Nan se le había ocurrido ponerse a ver montones de ropa de moda en el mall, mientras que Hwan había estado más que contento mensajeándose y llamándose con Keisuke…
- sí, bueno, quedamos de dormir en casa de tío Kohei… - apuró una excusa su gemela…
- ah sí…
- sí, sí, umma, ve con cuidado, appa ya debe estar en casa… - su hijo le instó a caminar subiendo casi de inmediato de vuelta al taxi, despidiéndose junto a su gemela con un movimiento de mano….
- será posible los chicos de ahora… - susurró, pero sonriendo siguió su camino a casa, no estaba a más de 50 metros, así que no había problema alguno de nada…
Cuando llegó se dio cuenta de que solo la luz de la entrada en el pórtico estaba encendida… y apenas entró vio que estaban encendidas las lámparas de la estancia, así que todo estaba a media luz. Movió su mano hacia el interruptor, pero topó con un papel que estaba pegado ahí, con interrogación, y curioso como es, terminó por abrirlo…
- curioso como un niño, por eso me empezaste a gustar… - leyó y vio que más abajo estaba una flechita que indicaba hacia la sala, así que caminó hasta allá… sabiendo que aquello era un juego de su impulsivo novio… sonriendo tomó un papelito rosa en forma de flecha que estaba colocado a lado del teléfono… - la primera vez que te besé creí que había alcanzado la gloria, aunque admito que estaba confundido… - debajo de esas palabras estaba una foto impresa de la nevera de su cocina, sonriendo un poco más caminó hacia allá, encendió la luz y vio en la puerta de la nevera un papel azul claro en forma de ave… - has sido las alas que me han llevado a construir sueños que a tu lado siempre han sido bellas realidades… - una imagen de las escaleras de la casa le condujeron hasta ellas, un papelito rojo en forma de corazón… - me has dado las felicidades más hermosas de la vida, nuestros gemelos, nuestras gemelas por venir… y tu amor… - comenzó a subir sintiendo su corazón latir emocionado, en los escalones había flechas que parpadeaban con lucecillas rojas indicándole el camino hasta su habitación, abrió la puerta y se encontró con muchas velas de colores aquí y allá en toda la alcoba alumbrando románticamente el lugar, sobre la cama un corazón de peluche que tenía bordado su nombre y el de JunHo…
- años de amarnos y no creo que llegue el día en que encuentre el modo más hermoso de decirte cuánto Te Amo, Ji Yong… - el chico raro escuchó la voz de su amado y giró su rostro… resultaba que ahí estaba su novio y él no le había visto porque se había ocultado tras de la puerta… mostró un ramo de rosas rojas que entregó al chico raro y sonriendo nerviosamente dijo… - y hoy no es la excepción, no es muy original pero… - habiendo dejado las rosas en manos de su pareja, JunHo sacó una cajita de terciopelo rojo oscuro que abrió dejando ver un hermoso y sencillo anillo de compromiso… - sé que llevamos mucho viviendo juntos, que nos amamos y somos felices, pero… también quiero esto Ji Yong, saberte mi esposo, si tú quieres claro está… - aclaró la garganta… - ¿te casas conmigo?
- sí… - atinó a decir demasiado emocionado como para pronunciar palabras más elaboradas… el gemelo le tomó la mano derecha y deslizó el anillo en su dedo anular, sonriendo todavía nervioso, pero seguro de que era el paso que faltaba por dar… - Te Amo, JunHo… - y un beso dulce antes de que ambos terminaran recostados en la cama, con un gemelo que deshojaba las rosas desperdigando sus pétalos por toda la cama y acariciando con ellos a su futuro esposo…
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Un par de días después.
Mall…
Bae Song todavía no comprendía su suerte… cómo era que Ji Song se había ido a enterar de que su appa y su umma iban a casarse… y menos, que le haya mirado con esos ojos ilusionados que le hicieron tragar hondo y evadir el tema porque presentía que su novio querría lo mismo…
Lo peor del asunto, resultaba que también sus tíos ChangMin y Kohei estaban en planes de boda, como lo estaban sus tíos JunHo y Ji Yong… es que hasta donde sabía, solo sus tíos Yoochun y Junsu estaban fuera de esos planes, que hasta parecía que en cualquier momento su primo Yang le propondría matrimonio a MinHwan…
- por cierto que les he visto algo raros últimamente…- pensó en voz alta, y es que todavía desconocían del estado delicado de Choi por su complicación de placenta previa…
- ¿a quiénes?... – le sacó de su ensimismamiento justamente su novio, que saliendo del probador le sonreía satisfecho dándole a entender que le había gustado cómo le quedaba la ropa que se estaba comprando… es que en el último mes había aumentado otro poco y ya le quedaba algo ajustada la suya…
- a Yang y a MinHwan, ¿no te parece que han estado raros?...
- bueno… ahora que lo mencionas… un poco sí… - caminaron a la caja y pagaron las prendas… - pero con eso de que el papá de MinHwan volvió con ellos, algo debe tener que ver…
- tal vez… - notó entonces que la mirada de Ji Song perdía algo de su brillo… sabía que solo mencionar la situación del padre de MinHwan le recordaba a sus propios padres… y es que seguían negándose en rotundo a saber nada de él… - ¿quieres comer algo?... – intentó desviar el tema…
- sí, me apetece uno de esos pasteles que venden por allá… - señaló a la derecha y sonrió tratando de no pensar en sus padres… en el hecho de que ni siquiera se interesan en su persona… pero sabía que las cosas estaban bien… que valía todo el solo hecho de estar a unas semanas de dar a luz y tener a su lado a Bae Jong… esa sería ahora su familia…
Mientras caminaban a la pastelería que Ji Song había indicado, pasaron por uno de esos locales de joyería en que, para suerte de Bae, los ojos de su novio se fueron casi involuntariamente suspirando al ver a una pareja ingresar al local hablando de compromiso y lo enamorados que se veían…
- me da gusto por Jae hyung y Yunho hyung que hayan decidido casarse… es una experiencia única en la vida y debe ser hermosa… - soltó con voz soñadora… Bae se estremeció…
- cierto… - atinó a decir demasiado nervioso… sinceramente… le aterraba la idea de casarse… es que… era demasiado, apenas se daba a vasto con saber que estaba a nada de ser papá…
………………………………………
Yang Su-Chun pasaba demasiado tiempo en casa de su novio, y es que con el estado delicado de MinHwan lo mejor que podía hacer era evitar traerlo para arriba y para abajo y hacerle compañía… además aquello servía para conocer a su suegro e ir limando asperezas… no era fácil llevarse como si nada cuando ambos saben que en parte el gemelo Park fue causa y motivo de su lejanía… él y su amor por MinHwan…
- siento mucho haberles causado tantos problemas… - el hombre le dijo a su esposa, ellos se encontraban en la estancia viendo a Mason explorar todo a su alrededor con esos pasitos más firmes pero todavía algo inseguros…
- me da gusto que hayas recapacitado y vuelto, JaeWook… - sonrió ella… aunque aún se preguntaba si Ellos también estaban bien… si también había vuelto por ella… y es que con los días que han pasado, no han conversado demasiado al respecto… y no duermen en la misma alcoba…
- pero… aun no termino de volver, Makino… - ella le miró confundida… - aún no me he disculpado apropiadamente contigo… y es que, te fallé tanto, que no he encontrado ningún argumento válido a mi favor…
- ¿me amas?... – cuestionó ella con firmeza…
- claro que sí… - pero cómo evitar la vergüenza de su error…
- ¿estás aquí también por mí?...
- sabes que sí…
- entonces es suficiente para mí… confiaré en ti JaeWook, en que no volverás a abandonar a tu familia nunca más, en que estarás aquí para apoyarnos en las buenas, las malas, las peores y aún en lo que no podamos entender, siempre que la felicidad de nuestros hijos esté por encima de lo demás…
- siempre creí, desde el primer momento en que te vi, que serías la mujer que me haría caer en cuenta de todas mis debilidades y las convertiría en mis fortalezas, en oportunidades de crecer y ser mejor… creo que fue una de las razones por las que me enamoré de ti…
Makino sonrió y se acercaron para fundirse en un dulce beso… apenas unos segundos porque luego los balbuceos de Mason les hicieron volver su atención al pequeño que ya andaba tirando el teléfono de la mesita…
………………………………………
MinHwan pasaba más del tiempo del que quería en reposo… y eso le aburría mucho… pero se aguantaba todo por la salud de sus bebas, y de él mismo… así que el tiempo se les iba, además de en besos y arrumacos, en conversaciones… entre ellas, la noticia de la boda próxima del YunJae, del KoMin y del JunYong…
- ¿ya tienen fecha?... – preguntó Choi mientras comía de sus fresas con crema…
- hasta donde sé, no… pero pues, yo creo que será para después de que se alivien todos, ¿no crees?...
- mh… sería lindo que se hubieran podido casar antes… - sus ojos brillando…
- supongo… - dijo dubitativo el gemelo Park… y es que había notado desde que (por lengua larga) mencionara lo de que Yunho y Jae estaban comprometidos, un brillo especial aparecer en los ojos de su novio… - ¿a ti te hubiera gustado casarte?...
- ¿eh?...
- ya sabes, antes de que te embarazaras, o no sé… ¿deseas casarte?...
- algún día creo que me hubiera gustado, sí… yo creo que la mayoría de las personas, bueno, las parejas heterosexuales, piensan en eso, ¿tú nunca te lo habías planteado?...
- apenas tengo 18 años MinHwan, la verdad es que lo más que pensaba era en… bueno… tener pareja y eso… - evitó decir claramente “conocer chicas y tener muchas novias como papá” eso no hubiera sonado nada bien…
- ¿te arrepientes de que vayamos a ser padres pronto?
- no, no, para nada, no quise decir eso… - se apresuró a aclarar, y es que no pensaba dar la mínima oportunidad de que confundiera sus palabras… - solo digo que no había pensado en ese paso… ni siquiera sabía que ya es legal contraer matrimonio con alguien de tu mismo sexo…
- soy feliz solo con tenerte… - susurró MinHwan para luego besarle despacio… no quería de ninguna manera presionarle…
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Yoochun todavía no se sentía tranquilo… sabía que Junsu deseaba matrimonio también, como el YunJae, y como había terminado por pasar con JunHo y Ji Yong, y ChangMin y Kohei… y sabía también que lo merecía…
Que él también lo quería…
Así que se drenó el cerebro por unos días pensando en la mejor manera de pedirle matrimonio a su delfín sin que pareciera nada copiado ni nada por el estilo… al final no había tenido demasiado éxito…
Una y otra vez sus ideas le habían parecido de una u otra manera similares a las de Yunho, o cosas que en alguna película ha visto…
- tengo el anillo, pero… - suspiró mientras guardaba la sortija en su cajita aguardando por Junsu que estaba terminando de cambiarse…
- ¿hasta dónde fue ese suspiro, eh?... – el castaño rodeó sus brazos en la cintura del pelinegro por su espalda…
- creo que no muy lejos, porque era para ti… - girándose, Yoochun sonrió a su pareja dándole un corto beso en los labios…
- uy sí, que manera de suspirar por mí, ni que no me tuvieras para ti solito… - deslizó sus manos por debajo de la playera comenzando a tantear la piel de su torso…
- Susu ah… - todavía no se creía como es que tenía energía para responderle cada que su delfín se ponía en plan candente…
- hazme el amor para siempre, Chunnie…
Y mientras iban cayendo otra vez en la cama y sus ropas desaparecían entre caricias y besos, Yoochun comprendió que nunca encontraría el momento adecuado ni la forma perfecta de pedírselo… así que, teniéndole desnudo bajo su cuerpo en las mismas condiciones y con el deseo a flor de piel, el pelinegro terminó poniéndose en pie ante la confundida mirada de Junsu… fue hasta la cómoda y sacó de entre sus ropas la caja aterciopelada en tono morado…
- Junsu ah, siempre he querido ser lo suficientemente romántico para ti pero creo que me quedo a medias en la mayoría de las ocasiones, suele ganarme el deseo de besarte y recorrerte con caricias… - dijo sonriendo nerviosamente y notando que la respiración de su novio era algo más elaborada… porque ya le mostraba el anillo que contenía la cajita… - sí que quiero hacer el amor contigo por siempre… de la misma manera en que quiero tener todo de ti y contigo… de la misma manera en que quiero que sepas que si te pido esto ahora, no es solo porque Yunho y Jae estén en planes también, o por tu hermano y Ji Yong ni mucho menos porque es un hecho que Kohei se lo ha pedido a ChangMin… te pido esto porque lo quiero de verdad, porque Te Amo y quiero tener a tu lado todos los detalles que puedan llenar nuestra felicidad plena… ¿te casas conmigo, Susu?
- ratón tonto… - derramó una lágrima y estiró sus brazos pidiendo un abrazo, el pelinegro accedió de inmediato sintiendo sus pieles todavía calientes hacer contacto… aunque la emoción ahora no estaba justamente en sus entrepiernas… - claro que quiero, Chunnie… quiero todo lo que quieras que vivamos juntos…
- entonces es un hecho que lo querré todo a tu lado, mi delfín travieso… - le besó tiernamente y antes de colocarle el anillo terminaron sumiéndose en la danza de besos y caricias que los arrastró al orgasmo algún tiempo después… - ves lo que te digo… - el pelinegro rió travieso cuando notó la cajita entre las desordenadas sábanas, la tomó y sacó la sortija de oro blanco sencilla… - gracias, por amarme así, baby…
- Te Amo… - y el anillo deslizado en el lugar indicado…
Como una promesa de un amor eterno que esperaría lo que fuera para tener de la vida lo que esta tuviera por ofrecerles…
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Playa de Eurwangni en Incheon…
El día estaba precioso, no hacía demasiado calor y el viento soplaba condescendiente. El altar constaba de un hermoso pabellón con largos telares blancos de seda que colgaban de las cornisas y hacían que la panorámica luciera romántica y alegre, cálida y ligera…
En el centro estaba dispuesta la mesa del juez que haría la ceremonia legal del matrimonio… al frente, sillas blancas adornadas con velos suaves que tenían pequeños ramos de florecitas en diversos colores… al centro de las dos columnas de filas de invitados estaba una alfombra hecha de solo pétalos rojos; y entre el altar y los invitados, dispuestas las sillas donde Yunho y Jaejoong se encontraban al centro, listos para le gran momento…
El matrimonio…
Las cuatro parejas estaban mas que nerviosas… pero se veían muy bien, sobre todo el YunJae, inspiraba ternura verles a los dos con su vientre abultado… como también lo tenían Junsu, ChangMin y Ji Yong… todos vestidos de blanco con telas ligeras y Yunho, Yoochun, Kohei y JunHo llevaban también un botón rojo en sus trajes…
El gran momento dio inicio y el silencio fue total mientras el Juez mencionaba sus palabras correspondientes (n/a como las ideas no fluyeran, ahí perdonaran la falta de información y creatividad en este apartado xD) y las manos de cada pareja se entrelazaban mientras las miradas no paraban entre ellos, como no paraban las sonrisas nerviosas ni los deseos de robarse un beso…
- finalmente, si nadie aquí presente se opone a las uniones que hoy se llevan a cabo, procederemos al intercambio de anillos…
Nadie dijo nada, así que uno a uno fueron diciendo sus votos para su respectiva pareja mientras se colocaban esas alianzas que les unía a partir de entonces en esa esfera social que hasta antes hubieran creído imposible…
Las sonrisas emocionadas y las lágrimas de conmoción aparecieron entre todos los invitados… siendo algo más notoria en esa amiga de Mizuki de nombre Sora que se limpiaba una y otra vez las lágrimas esperando no correrse el maquillaje… y casi parecía algo más emocionada que los propios familiares… Mizuki sabía que era porque su amiga admiraba a los adultos desde que fueran DBSK…
Luego del intercambio de anillos y de un beso dulce que se dieran sellando ese momento…
- pueden pasar y firmar su contrato matrimonial… - el juez les invitó…
Pasaron en orden, siendo el YunJae los primeros, sucediéndoles el YooSu, el KoMin y el JunYong…
Cuando la última firma fue dejada, todo fueron aplausos y felicitaciones, abrazos y más lágrimas, y consejos… y toda una algarabía que se alargó por horas, aún después de que el sol se ocultó en el horizonte y la luna danzó en el firmamento…
La felicidad era casi total…
**************
Residencia YunJae-YooSu
Noveno mes…
Había sido un caos… y es que nada más Jaejoong y Yunho sintieran esa primera contracción intensa a primera hora del día, supieron que no tardarían demasiado en dar a luz… el instinto “materno” les indicaba que ya estaban a nada de tener a sus bebés… y un grito llamando a Yoochun había sido suficiente para que el pelinegro entrara en su habitación como bólido cuestionando lo que pasaba…
- Clínica… Dra. Flora… ¡ahora!... – dijeron al unísono…
- qu…qué… - el pelinegro palideció…
- ¡Yoochun!... – les vio fruncir el ceño y a la vez quejarse por una contracción… apoyándose mutuamente para respirar adecuadamente…
- ya… ya voy… - corrió de regreso a su alcoba… donde para rematar Junsu acababa de sujetarse el vientre y también respiraba laboriosamente… - ay no…
- Chunnie… - inhaló y exhaló tal como había entrenado para modular el dolor de las contracciones… - ya es hora…
Y supo que estaba perdido… que no tenía idea de cómo hacer para llevar a los tres a la Clínica…
- ¡EunBi! ¡Sun Ho! ¡Jade!... – y no tuvo más remedio que gritarles para que salieran de sus respectivas habitaciones y le ayudaran…
…………………………………
Bae salió de su habitación ayudando a Ji Song… pues sí… resultaba que él también tenía las contracciones finales antes del parto… y dolía horrores… vamos, que Ji Song es “umma” primeriza… y está además de adolorido, asustado…
- y si salen por…
- tranquilo, tranquilo, no pienses en eso ahora… - Bae sabía que estaba pensando, y prefirió no escucharle no fuera que la imagen se forme en su mente… y mientras él salía a la estancia, vio que sus padres y el YooSu venían acompañados por sus hermanos y EunBi…
…………………………………
La misma historia había sido en casa del KoMin y del JunYong… así que no fue de extrañar que se diera toda una revolución de noticias cuando los chicos comenzaron a comunicarse entre sí para dar a conocer la situación… coincidiendo en que de todas maneras se encontrarían en la Clínica…
**************
Clínica Central…
Todavía no podían creerse lo rápido que se había ido ese último mes… y menos que ahora todos estuvieran ahí en la sala de espera aguardando el momento en que las doctoras y JaeWook (que sí, el Dr. Choi había decidido asistir personalmente el parto de sus nietas) volvieran con buenas noticias. Sobre todo Yang, que ya no tenía uñas que morderse pero estaba sumamente nervioso pues la situación de MinHwan aunque había sido estable, seguía siendo delicada hasta que la cesárea terminara.
Y como él, Yoochun, JunHo, Kohei y Bae, y TODA la enorme familia estaba con los nervios de punta esperando en la sala de estar… los minutos seguían transcurriendo y ellos no veían la hora en que las doctoras se aparecieran…
- porqué siempre parece que se ponen de acuerdo, a ver, cómo es que todos comenzaron con las contracciones el mismo día y resultó ser que debían ser intervenidos de YA para traer a nuestros hijos a este mundo… - sí, ése había sido JunHo, tan impulsivo e impaciente como siempre, no calculando del todo sus palabras…
- no es como si tuviéramos que dar respuesta a eso, ¿verdad?... – Yoochun le miró con una ceja enarcada… como dijera algo más, estaba seguro de que se iría sobre su cuñado para taparle la boca…
- bueno no… - todos suspiraron aliviados… JunHo era experto en sacar a cualquiera de sus casillas, y con lo nerviosos que se encuentran… era mala idea que se quisiera poner a decir cuanta cosa se le ocurriera…
Se sumieron otra vez en el silencio… y minutos después finalmente las doctoras aparecieron por el pasillo… excepto JaeWook…
- pueden estar tranquilos, las cesáreas de los Sres. Yunho, Jaejoong, Junsu, ChangMin y Ji Yong, así como el joven Ji Song, han sido todo un éxito… - las palabras de la Dra. Flora fueron todo un alivio para sus respectivos esposos y Bae Jong, así como para los hijos del YunJae; y por supuesto, todos los ahí presentes…
- ¿MinHwan aún está en quirófano?
- así es joven Yang, pero tengamos paciencia, hasta donde sabemos la operación está marchando muy bien… - informó la Dra. Alexa…
- en cuanto estén en condiciones les permitiremos ver a sus respectivos hijos, por ahora les están arreglando y a sus parejas llevándolos a una sala de recuperación… - la Dra. Dasha les dijo, luego las tres dieron la vuelta y les dejaron entre contentos y ansiosos por saber pronto de MinHwan…
- tranquilo… - Yoochun abrazó a su hijo al verle temblar, tal vez asustado y angustiado… y sintió los brazos de Yang aferrarse a su camisa… Makino se acercó y le palmeó cariñosamente el hombro…
Ella más que nadie entendía esa desazón e incertidumbre que le debía estar carcomiendo… es después de todo su hijo quien aún está en cirugía… pero tenía Fe… Fe en JaeWook y su promesa de traer a sus nietas a este mundo y cuidar de MinHwan…
Algunos minutos más tarde Choi finalmente apareció por el pasillo… se le veía cansado… pero sonreía y eso era muy bueno…
- ¡Felicidades!... – exclamó abriendo los brazos hacia su yerno… - un par de hermosas y muy fuertes niñas acaban de nacer, y MinHwan está en perfecta salud…
- Gracias, Señor… - aliviado, Su-Chun solo pudo abrazarse a su suegro…
Y luego todo fueron sonrisas, felicitaciones y abrazos… y la ida de cada uno con su respectiva pareja esperando al momento a que les llevaran a sus respectivos bebés…
En el caso del YunJae, Jade y Sun Ho eran quienes estaban con ellos…
- realmente se siente diferente, Boo… - el moreno estaba la mar de contento con sus cuates en sus brazos, la niña de un lado y el niño del otro, aunque estaba por cedérselos a sus hijos para que los cargaran un momento… - soy muy feliz… - aunque estaba también todavía algo adolorido y sedado por la cesárea…
- creo que no hay más que nos haga falta ahora para ser felices, verdad Yunnie… - el pelioscuro estaba jugando con la manita de su niña que se cerraba en uno de sus dedos…
- nada Boo… - y su mirada recorrió desde su esposo hasta sus hijos mayores y luego a sus bebés…
- entonces, se quedaron con los nombres que dijeron, appa… - Jade cuestionó…
- sí, tu hermanito se llamará SukHyun, y tus hermanitas… - comenzó el moreno…
- JiJae… - señaló a la que estaba en brazos de Sun Ho… - y SeonYun… - miró a la que estaba aún en sus brazos…
- que bonitos nombres… - sonrió contenta Jade, besando la frente de cada uno de sus hermanitos…
…………………………………
YooSu…
- son un delfincito precioso y un ratoncito encantador… - dijo todo orgulloso el pelinegro, mirando enternecido a Junsu con sus gemelos en sus brazos, ambos con los ojos cerrados y moviendo sus manos un poco…
- tuvieron de dónde heredar… - bromeó el castaño…
- al menos esta vez no batallamos tanto para elegir sus nombres… - claro, con eso de que eran varones, Yoochun no tuvo que preocuparse por pensar en nombres femeninos que seguro para Junsu serían mala idea…
- InSung y SungYoo son los nombres perfectos para nuestros pequeñines… - señaló contento, cansado, pero feliz, el castaño…
………………………………
KoMin…
- es increíble lo hermosa que puede ser si aún es tan pequeñita… - Keisuke estaba con sus padres viendo por vez primera a su hermanita, que apretaba un dedo de ChangMin y succionaba ya de su mamila…
- MinSoo va a ser una chica muy popular… - el menor vio como su esposo e hijo fruncían el ceño algo preocupados en torno a ese comentario… y él solo pudo sonreír… - creo que vas a estar muy sobreprotegida…
- no empieces a advertirla que sino, no me va a escuchar, Minnie… - pero el menor sonrió más ampliamente… ya veía a Kohei con los nervios de punta, si la forma en que ha batallado con Keisuke…
……………………………
JunYong…
- yo creo que nuestras nenas son las más hermosas del planeta… - JunHo dijo orgulloso, alimentando a una de ellas, mientras el chico raro se encargaba de la otra…
- entonces, ¿SoeJi y HeeJin? ¿O viceversa?... – Hwan preguntó apuntando primero a la que tiene su appa y luego a la que está con su umma…
- si son gemelas, qué más da… - Shen Nan opinó divertida…
- eso lo decidiremos en cuanto abran sus ojitos… - Ji Yong intervino…
………………………………
BaeSong…
- nunca imaginé lo maravilloso que sería este momento… - Bae estaba sentado a lado de su novio observándole darle de comer a su niño…
- ¿entonces esta bien si le ponemos HyeSong?… - y es que de entre todos los nombres que tenían, al final no habían elegido uno…
- el que tú quieras está bien para mí, amor… - le besó la frente…
- HyeSong suena bien para nuestro hijo… - Ji Song sonrió…
………………………………
YangMin…
- después de tremendo susto que me metieron, soy dichoso de tenerles, a los tres… - Yang estaba más que emocionado con sus hijas… se veían preciosas y ya parecían sonreír… presentía que iban a ser un poco traviesas…
- verdad que hemos elegido los nombres indicados, Yang… -
- claro que sí, Nara y SooJin son nombres preciosos… como ellas…
………………………………
Una nueva aventura comienza…
Continuará……
CAPÍTULO 19. LA AVENTURA NUNCA TERMINA
*****
Hacía apenas un par de días que ya todos habían salido del Hospital con sus respectivos bebés partiendo a sus casas… pero la realidad era que aquello era casi un caos… no, no, no se preocupen, nada tiene que ver con que Hwang Bo o su hija Yazahara se hallasen aparecido ni mucho menos, por el contrario, hasta el momento no han sabido ni quieren saber nada de ellas… oh no, el caos era… por la cantidad de personas que iban y venían en sus hogares, los padres de cada pareja (exceptuando al BaeJong) casi parecían estarse instalando ya con el pretexto de cuidar a sus hijos y los nuevos nietos… los adolescentes eran una ternura de jovencitos admirando a sus hermanitos y cargándoles pretendiendo enseñarles cada detalle de sus casas, y porqué no, algunos hasta empezando a poner ya algunas reglas de comportamiento si es que llegan a pasarse por sus alcobas, aunque saben que para cuando ellos crezcan, quizá estén tomando otro camino por la vida…
Ese caos… era lejos de ser destructivo… la cosa más hermosa que tan peculiar familia pudiera describir…
Porque ese caos… estaba bañado de amor y revestido de alegres colores…
Ese caos… era felicidad pura…
*****
Residencia KoMin…
Los padres de Kohei estaban de visita… una visita que ésta vez ChangMin presentía se alargaría, y es que los Sres. Uchimura ya hablaban acerca de comprar una casa en la ciudad y no muy lejos de donde ellos viven… por un lado la idea gustaba… por otro… asustaba un poco… y no porque sus suegros fueran insoportables ni mucho menos… era…
Era más como esa sensación de plenitud que se acerca a las fantasías que pueden disolverse con el pasar de los días o el despertar del ensueño… era como demasiado hermoso todo lo que estaba pasando ahora como para dejar de experimentar una y mil sensaciones que no puede explicar pero que están ahí… tan clavadas en su corazón que casi duelen… tan nítidas y palpables que casi siente que podría desfallecer, esa vez, literalmente de amor… porque lo tenía todo…
A su esposo… ¡Dios! Es que además se siente tan especial poder llamarle así, poder sentirse tan unido a él en todos los planos existentes de la humanidad, que es simple y sencillamente ideal… Kohei había llegado para colmar sus días de ventura, seguridad y cariño… había llegado para romper con sus propias telarañas mentales permitiéndole ver más allá de razones y lógicas, había llegado para hacerle el amor y en el acto, enseñarle lo más valioso en la vida: el alma. Porque era aquella esencia la que había desnudado desde la primera vez que descubriera su cuerpo y unieran sus labios. Aunque sí, hallase tardado quizá demasiado en entenderlo…
Y tenía… tenía a Keisuke… él quien fuera sí un milagro divino otorgado por una voluntad misteriosa que le dio aquel trozo de felicidad que en algún momento solo hubiera podido envidiar a sus hyungs… esa sensación cosquilleante y casi asustadiza que había culminado con una de las aventuras más angustiantes de toda su vida… cuando aquellas escenas de un combate entre dioses le había robado el aliento y casi… casi al amor de su vida… pero luego… luego solo había visto días soleados y cálidos momentos en invierno, sonrisas juguetonas en verano y una interminable película de memorias que conservar en su mente y su corazón para la eternidad… porque sí, Keisuke le había llenado los días de sorpresas y aventuras sinigual, en muchas circunstancias le había recordado a sí mismo en la infancia, en otras parecía un poco más la viva imagen de su padre… al final, Keisuke también estaba formando su propia identidad de a poco… y eso era también fuente de alegrías y uno que otro dolor de cabeza…
Nadie ha dicho que la plenitud sea sencilla, ¿cierto?
Y ahí, entre sus brazos, mientras se pasea en aquella cómoda mecedora, una nueva lucecita en su camino… esa tierna criatura que dormitando en su regazo, le recuerda con su tranquila respiración, que su amor ha dado un nuevo fruto, y que su pequeña aún tiene miles de sorpresas y aventuras que mostrarle… y que él, como su esposo, su hijo, sus padres, sus suegros y toda su familia; estarán ahí para aprender y enseñar… para llevar la aventura en un ir y venir de experiencias compartidas…
Porque su pequeña MinSoo había nacido con estrella, como suele decirse cuando se les augura un futuro espléndido…
- crecerás rodeada de amor, y cuando tu camino llegue a tener tonos grises, ahí estaremos para apoyarte… - ChangMin susurró con voz dulce, uno de sus dedos atrapado en la manita de su niña… se inclinó un poco hasta besar su frente… su piel suave, delicada, cálida y dulce… así, como la de todo bebé cubierto de su inocencia y su pureza…
- y no dejarla caer cuando las cosas no salgan como lo espere… - la voz de Kohei curvó una sonrisa en labios del menor, luego sintió la mano del japonés en su mejilla y enseguida ese beso tierno que siempre conseguía hacerle sentir algo femenino y vulnerable… ese beso que le regalaba la luna y las estrellas a diario, el mismo que le dejaba entre sus labios la calidez del mismo sol… - todo, todo lo que ella necesite, verdad Minnie… - y regalarle también esa sonrisa que no dejaba de ser la más segura de todas las que pudiera haber visto en los hombres que conoció en su vida profesional, esos hombres con esposas o novias, o amantes abnegados, que en nada parecían tener punto de comparación con quien a él le esperaba todas las noches con una rica cena que compartir, ese que también se cercioraba de regalarle cada mañana la mejor de las caricias y la más amorosa de las miradas…
- todo lo que necesite, Kohei, todo ello cubierto de amor… - y unir sus labios en un dulce beso mientras su hija duerme y sueña… sueña con un mundo de fantasía y colores que todavía no conoce, y aromas que no ha olido o sabores que no ha probado… porque en su inocencia y pureza, MinSoo solo puede soñar…
Mientras sus padres se encargan de cuidarle y protegerle… de amarle…
Y amarse cada día con un poco más de amor si es posible…
*****
Residencia JunYong…
SoeJi y SeeJin descansaban en sus cunitas después de día tan ajetreado… y eso que solo habían estado ahí sus abuelos por parte de appa y amma… las pequeñitas habían andado de brazos en brazos, escuchando cuchicheos, recibiendo caricias y besitos en sus caritas radiantes de esa característica inocencia de Ji Yong en combinación con la mirada inquieta de JunHo… ambos sabían, que ellas serían peor que dinamita… que si Shen Nan había tenido ese aire impulsivo de su appa y la inteligencia de su umma… sus bebés, serían eso y un poco más… casi habían creído verlo en esas sonrisas juguetonas y esos ojitos vivarachos que miraban expectantes y curiosos a todo su alrededor…
Ji Yong les dio un beso de buenas noches y luego las arropó con cuidado, JunHo le miraba en silencio solo admirando toda esa belleza que apenas descubrió no ha querido dejar de ver… y casi al instante no puede evitar esa sensación de culpa que aún hoy día le persigue… es que había un error en el pasado que le perseguía cual fantasma gélido y frío queriendo opacar la calidez de su hogar…
Tal vez era momento de sacarlo de una vez… de solo… solo dejar salir el sentimiento y perdonarse a sí mismo… porque podía ver en la mirada enamorada de su chico raro, que él hace años le había perdonado dejando aquello ahí donde ya no podía hacer ninguna clase de daño…
Pero JunHo aún llegaba a cuestionarse si era verdad, si había sido lo suficientemente bueno para merecer tal felicidad, tal dicha de construir su propia familia y tenerle a él… tenerle a pesar de todo… a pesar de aquél recuerdo oscuro que no puede sacarse de la mente… a pesar… de en algún momento haber deseado de verdad que ChangMin le mirara…
Y no… con el corazón en la mano asegura que no… no es que aún sienta algún tipo de atracción por el menor, ni que aún quiera algo de él más que su amistad… era… era que aún se sentía algo culpable por nunca haber dicho toda la verdad… por no haber podido contenerse de algún modo aquella vez que mantuvo relaciones con ChangMin aunque en realidad no era él sino Anteros, era recordar que a pesar de todo antes había caído, aun antes de salir con Ji Yong de verdad…
Aquel día… cuando tocarse con ChangMin había despertado en él cosas que nunca imaginó llegar a sentir…
Y eso era lo que aún le perseguía en ocasiones como esa… cuando se sentía inmerecedor de toda esa felicidad que rodeaba su hogar…
- en qué piensas… - Ji Yong se acerca y le abraza con cariño pasando sus manos por la cintura del gemelo y mirándole directo a los ojos. La luz del pasillo apenas vislumbra un poco la entrada de la habitación de sus pequeñas…
- en lo mucho que Te Amo y lo hermoso que eres… - sinceró el gemelo, abrazando a su esposo y topando su frente con la del chico raro…
- que bobo estás hoy, JunHo… - sonríe y no puede evitar besar cortamente esos labios que desde hace tiempo le enseñaran lo que es besar de verdad…
- creo que nací con ese defecto… - bromeó y luego se movió para salir de la habitación de sus niñas y dejarlas descansar, no sea que sus voces las fueran a despertar…
- ya, dime de verdad, qué pensabas, te vi demasiado concentrado JunHo… - insistió el chico raro… y es que le conocía demasiado bien como para no haber notado cierta culpa y tristeza en sus ojos…
- me amas ¿verdad?...
- claro que te amo, porqué me lo preguntas… - sonrió y volvió a darle un beso suave en los labios al verle todavía algo perdido en sus pensamientos y en esa repentina necesidad de cuestionar algo que se supone se han demostrado los últimos años…
- yo… - suspiró y se sentó en la cama de su habitación (a lado de las pequeñas) con la puerta abierta y la luz del pasillo alumbrando a medias… Ji Yong sentándose a su lado entrelazando su mano con la de su esposo… - siento que no hayas sido el primer chico al que toqué… - y casi sintió su mundo derrumbarse cuando su esposo retiró su mano obviamente sorprendido por esa declaración… - yo no tenía idea de que me gustabas, o sea, que estaba enamorado de ti, de verdad que entonces no lo sabía… - intentó justificarse conteniendo apenas su voz en un volumen bajo pero notando cómo el chico raro bajaba la mirada antes de ponerse de pie… - Ji Yong…
- qué más te tiene así, JunHo… qué mas necesito saber a estas alturas de nuestra vida… - casi exigió saber… y es que… es que casi le parecía absurdo llegar a retomar ese tema ahora… cuando… cuando han pasado tantos años juntos… amándose…
- na… nad… - pero el nudo en su garganta y la culpa no le dejaban terminar esa palabra… porque estaba cansado de cargar con esa sensación aún en los días más felices de su vida… - solo hubo dos chicos que me gustaron antes de elegirte a ti…
- ¿y aún te gusta ese otro chico?... – cuestionó y quiso que su voz no sonara algo herida ya… temerosa…
- ¡NO! No lo digo por eso, Ji Yong te juro que nada tiene que ver con eso…
- entonces… ¿qué caso tenía decirlo ahora?... – una lágrima producto del temor resbalando por su mejilla mientras da un paso más lejos de su esposo…
- yo… no lo sé, yo… yo solo quería dejar de cargar con esta sensación, solo quería que supieras, que aún y cuando pude haber tocado a alguien antes que a ti, has sido tú el único que ha hecho que mi vida valga la pena, has sido mi motor y el que pone mi mundo de cabeza, quien me ha dado toda la felicidad del mundo y aguantado mi pésimo carácter y sentido del humor… - se apuró en decir, acercándose y abrazándole notando cómo a pesar de lo extraño de la situación, el chico raro no se negaba a su abrazo y se aferraba a su espalda medio sollozando en su hombro y suspirando luego contra su cuello… - lo siento, de verdad, yo solo… quería que lo supieras…
- tonto, no necesitaba saber nada más que lo que me has hecho sentir en éstos años, que me amas… - sollozó con más fuerza abrazándole también más fuerte… - me basta, siempre me ha bastado con saber que soy yo… que soy yo quien duerme a tu lado, quien recibe tus mimos o quien te ha dado la felicidad suficiente para no irte, para no cambiarme por alguien mejor…
- no hay nadie mejor para mí que tú, amor… - le apartó enmarcando su rostro con sus manos y viendo con culpa esos ojos rojos que ya habían derramado un par de lágrimas… - nadie me hubiera podido dar familia tan hermosa… nadie…
- ¿ni siquiera ChangMin?... – porque sabía que ese otro chico de quien habían estado hablando era justamente el menor… ese con quien JunHo se tocara antes de haberle tocado a él… ése de quien Anteros tomara forma y con quien mantuviera relaciones aún cuando ya ellos esperaban a sus gemelos…
- ni siquiera él… - aseguró sin dar espacio a las dudas ni a los recuerdos que en el pasado ha querido enterrar, pero que apenas hoy parece de verdad poder olvidar… - Te Amo, solo a ti, y siento… siento haber cometido errores contigo… - besó su frente y luego volvió a abrazarle oliendo su cabello… - siempre me ha gustado el aroma de tu cabello… - suspiró recordando aquella ocasión en la que se había quedado, quizá por vez primera, embelesado mirando a su chico raro…
- a mí siempre me ha gustado tu impulsividad… - sonrió algo más aliviado… dejándose mecer por su esposo y sintiendo que, por raro que suene… esa pequeña charla le había sentado bien, era como haberse deshecho por fin de un peso que en sus hombros había cargado…
*****
Residencia YunJae-YooSu
Con la casa llena de bebés, el hogar incluso parecía algo más cálido y alegre… vestida de llantos y esas primeras sonrisas que no tardarían demasiado en mutar en sonoras risas infantiles que inundarían el lugar. Casi nadie conseguía dormir una noche completa, los bebés tanto del YunJae, como del YooSu y el BaeSong, volvían imposible el descanso nocturno pues despertaban cada tanto por hambre o el pañal sucio. Por supuesto, a ninguno le importaba realmente despertarse por sus llantos, e inclusive los jóvenes llegaban a levantarse para cooperar con los cuidados de sus hermanitos; sobre todo Sun Ho y Jade, pues dado que sus padres estaban operados, ellos les insistían en descansar y estaban realizando un magnífico trabajo encargándose en alguna medida del cuidado de sus tres hermanitos.
Bae y Ji Song eran los que todavía estaban un tanto inseguros cuidando de su bebé… y es que temían lastimarlo o hacer algo incorrecto al verle tan pequeñito y frágil entre sus brazos. Por eso, Yunho y Jaejoong no dudaban en ir a su habitación a ofrecerles algún consejo, pero dejándoles también la responsabilidad, solo mostrándoles su apoyo.
EunBi y Neul Jade seguían muy emocionadas, y a pesar de los últimos días en trasnochada, se les veía muy frescas y llenas de energía… lo que a Yoochun y Yunho preocupaba un poco… es que tenían una mirada brillante muy especial… y no, no era como aquella que hubiesen llegado a notar en la mirada de Junsu o Jaejoong cuando estuvieran embarazados, lo cual era un alivio… pero… tenían algo en sus pupilas que les inquietaba de sobremanera…
*****
Residencia Choi
Como era de esperarse, MinHwan seguía viviendo en casa de sus padres, ahora reconciliados y contentos como debieron estar siempre… y ahora que también debe ser vigilado durante la cuarentena al tiempo que aprende a cuidar de sus bebés, Yang no había querido separarse de su novio, así que (en acuerdo con sus padres) había terminado por mudarse temporalmente a casa de sus “suegros”… pero tampoco iba a negar que le gustaba…
Que no había nada más maravilloso como dormir y despertar a lado de MinHwan, de percibir su aroma y su calor toda la noche… de poder estar al pendiente de él y sus pequeñas… y cuidarles a los tres…
Cuidar del fruto de su amor… y su amor mismo, su otra mitad…
El gemelo Park estaba de pie a lado de la cuna donde sus pequeñas dormían. El reloj de la mesita de noche marcaba las 2:54 de la madrugada pero él no tenía sueño, solo quería contemplar la tranquilidad de sus angelitas durmiendo. Les miraba embelesado, apenas con la luz de la luna que se colaba por entre las cortinas del ventanal, pero sonriendo contento al ver la preciosura de nenas que su novio le había dado… y dejó entonces que su mirada viajara a la cama, ahí donde su novio también reposa descansando tan solo un poco… sonríe con ternura y se acerca despacio, después de haber acomodado la frazada de sus gemelas y besado sus frentes, se acerca y quisiera abrazarle pero se limita a quedar muy cerca; la operación de MinHwan exige sumos cuidados y determinadas posturas, así que solo puede mirarle y espera a que las semanas pasen para poder abrazarle y acunarle entre sus brazos al dormir…
Así como llegó a ver en innumerables ocasiones que su appa hacía con su umma…
*****
Residencia YunJae-YooSu
Ji Song alimentaba a su pequeño con una sonrisa algo cansada sentado en la cama… Bae le observaba sentado a su lado, uno de sus dedos en la manita de su bebé… ser padre era maravilloso a pesar de las circunstancias…
- ¿no te lastimas la operación?... – cuestionó a su novio al verle moverse como buscando una mejor postura…
- estoy bien… - le miró sonriéndole suavemente… y fue entonces cuando el trillizo notó aquella opacidad en los ojos de su novio… ése que aparecía en sus pupilas cada tanto desde que tuviera que dejar la casa de sus padres…
- siento que ellos no hayan querido conocerlo… - susurró sintiéndose de pronto culpable ante el hecho de que los padres de su novio no se hayan siquiera interesado en su nieto…
- también yo… - murmuró Ji Song notando cómo su pequeña sonrisa desaparecía y sus ojos se llenaban de lágrimas… tragó hondo e intentó volver a sonreír pero no consiguió que sus labios se curvaran…
Había dolido tanto saber que habían cortado la llamada sin dar tiempo a nada cuando Bae Jong les habló contento y emocionado porque su hijo había nacido…
Dolía tanto saber que le odiaban lo suficiente como para que no se les ablandara el corazón ante su nieto…
- ven… - murmuró acongojado el trillizo abrazándole con cuidado y meciéndole con cariño mientras besa su frente y escucha ese sollozo reprimido que sabe Ji Song quiere aguantarse para no llorar teniendo a su hijo apenas dormido de nueva cuenta en su regazo… - está bien, amor… estaremos bien… - intentó consolarle, pero sabía que no había ya palabras suficientes para aligerar la tristeza de su novio…
Ji Song sollozó de nuevo y sintió que no podría contenerse más y que el cuerpo entero le temblaba producto de esa sensación angustiante de tristeza y rechazo.
- cárgalo… - musitó apenas convulsionando un poco ante un nuevo sollozo… el trillizo hizo caso y tomó a su hijo en brazos para luego ver a su novio levantarse y correr a encerrarse en la ducha del cuarto…
Bae llevó a su pequeño a la cuna y dándole un beso en la frente le dejó con cuidado para luego apresurarse en entrar al baño. Ji Song no había cerrado, pero se le partía el alma al verle sentado en el taburete con sus manos tapando su rostro bañado en lágrimas. Sabiendo que no había más nada que pudiera decirle, se limitó a arrodillarse frente a él y abrazarle… Ji Song se dejó envolver por la calidez de su novio y se aferró a él pasando sus manos por el cuello del trillizo, llorando esa noche todo el dolor que tenía para sus padres…
Dispuesto a seguir adelante al siguiente amanecer y no dejarles interferir más de ninguna manera en su felicidad…
*****
Residencia YunJae-YooSu
Hacía ya un par de semanas desde el nacimiento de todos los pequeños, y los preparativos del bautizo se estaba planeando en grande, todas las familias iban a reunirse a celebrar, así que estaban buscando un local lo suficientemente amplio para todos los invitados que les acompañarían ese día…
Además… Yoochun y Yunho tenían otro pequeño inconveniente en mente…
Sus hijas habían invitado a comer ese fin de semana a sus novios para presentarlos formalmente con la familia…
Junsu y Yoochun estaban cambiando a sus pequeños después de una rica ducha de agua tibia en la que los pequeñines no habían parado de sonreír ante las palabras cariñosas y mimos de sus padres…
- ojala EunBi nunca hubiera crecido… - murmuró de pronto el pelinegro…
- ay Chunnie, amor… - suspiró con una media sonrisa el castaño…
- ¡qué!... – respingó como si en verdad su esposo no fuera capaz de comprender la magnitud del asunto-problema-conoceralnoviodesuprincesa…
- que no es posible que todavía quieras mantener a nuestra hija en una burbuja donde nadie la pueda ver o tocar… - seguía divertido el delfín, terminando de vestir a su bebé, en tanto que su esposo se había quedado a medias con el gemelo…
- yo no intento eso, solo digo que una vez que nos presente al novio… - mueca de desagrado… - un día llegará a decirnos que nos quiere presentar a su prometido, ¡no espera! Que su novio viene a pedirnos su mano en matrimonio…
- y qué hay de malo en eso, EunBi es una muchachita muy inteligente, sabrá elegir el momento y la persona adecuada para dar ese paso…
- ¡eso no es cierto!... – casi gritó el pelinegro todavía desconfiado de aquellas palabras… vale, le estaba costando todo un mundo dejar a su hija crecer… en específico, tener novio…
- Chun, asustas a los niños… - reprendió el delfín frunciéndole el ceño y empujándolo lejos de los pequeños que les miraban como sin entender lo que pasaba con sus amorosos padres…
- lo siento… - se avergonzó el ratón… - lo siento babys… - sonrió y se acercó con voz suave para hacerles cariñitos… - perdón baby… - miró a su esposo pero éste no cambió su expresión… - es que entiéndeme delfín travieso, no es fácil para mí…
- tampoco para mí, Chunnie, es mi hija también por si lo has olvidado, pero está creciendo, es una muchacha muy bella y es natural que a ella le atraigan muchachos, que salga con ellos, y más, que quiera presentarnos a su novio, y creo que no te estás esforzando en tú entenderla a ella… - suspiró abrazando a uno de sus gemelos para ponerle en el portabebé doble… y visto que el pelinegro parecía estar meditando sus palabras, terminó de vestir al otro pequeñín para colocarlo luego a lado de su gemelito… - quienes son los bebés más preciosos de esta casa, eh, quienes, quienes… - Junsu sonreía a sus gemelos haciéndoles caritas y besando sus caritas, ellos le respondían con sonrisas y miradas alegres…
………………………………
Por las mismas andaba Jaejoong con Yunho…
- es increíble que te estés comportando como un crío, Yunnie… - el pelioscuro suspiró cansinamente mientras tomaban aire fresco en el jardín y sus trillizos con Ji Song paseaban a los cuatro pequeños en las carreolas por ahí…
- no me estoy portando como un crío… - se defendió el moreno cruzándose de brazos y mirando enfadado hacia otro lado… vale, que en el fondo sabía que se estaba portando como un crío…
- ¿diciendo que no estarás el fin de semana para no tener que verle la cara al degenerado psicópata adolescente que te quiere robar a tu princesa no es portarte como un crío?
- vale… tal vez exageré al llamarle psicópata… - refunfuñó el moreno…
- si te atreves a ausentarte ese día, o a hacer algún comentario tonto como los que te estado escuchando todo el día desde que Jade nos dijo que su novio vendrá a comer el fin de semana, te juro que me enojo contigo Jung Yunho… - y que le haya dicho su nombre completo, era que estaba hablando más que en serio…
- ¿a ti no te preocupa que Jade tenga novio? ¿ni saber si es un buen chico?... – finalmente el moreno sacó tan solo un poco (la punta del iceberg) de sus preocupaciones…
- claro que me preocupa Yunnie, pero tiene casi 19 años, está en edad de saber elegir, y aún si su actual novio no llega a ser el correcto o un tonto que solo quiera acostarse con ella… - el moreno frunció el ceño y apretó las manos de solo pensarlo, y Jaejoong sabía bien que esa era otra de las preocupaciones de su esposo… - Jade sabrá dejarle… ella es inteligente Yunnie, y es nuestro deber confiar en ella y las decisiones que toma, no significa que dejemos de estar al pendiente, pero tampoco tenemos que sobreprotegerla toda la vida… y se que entiendes eso…
*****
En un abrir y cerrar de ojos el famoso fin de semana llegó… y como era común, la familia se reunió en casa del YunJae y el YooSu… ChangMin y JunHo tenían que admitir cierto morbo por ver la reacción de Yunho y Yoochun ante lo que parecía el Apocalipsis para ellos… conocer a los novios de sus hijas…
EunBi y Neul Jade se habían arreglado especialmente para la ocasión, ambas chicas lucían realmente hermosas… y sus appas no podían evitar sentirse todavía más celosos por eso… es que seguían creyendo que nadie merecía tal belleza…
Pero… no habían tenido más remedio que hacer caso de sus esposos y comportarse…
Cuando Jade llegó con su novio tomado de la mano y se acercó a presentarlo ante sus padres… Geun Suk casi quiso que la tierra se abriera y lo tragara al sentir la penetrante mirada de Yunho sobre su persona…
- un gusto… - había soltado el moreno más por compromiso que por aún poder aceptar al novio de su hijo… un codazo de Jaejoong le recordó que debía ser amable… - bienvenido a la familia… - y cuando esas palabras salieron de sus labios supo que había perdido la batalla… porque oficialmente le había permitido entrar en su familia…
- el gusto es mío, Señor Jung… - el muchacho casi sintió que le quitaban toneladas de peso de encima… y sonrió… sonrió feliz de que Jung Yunho le háyase estrechado la mano y palmeado el hombro… como se hace de hombre a hombre…
Más o menos al mismo tiempo EunBi había presentado a Hye Sung con sus padres, y la historia no había variado del todo con Yoochun frunciendo el ceño de entrada, para luego recibir un “Chunnie” super meloso de parte de Junsu que sabía bien lo que significaba… y tuvo que tragarse su orgullo de padre sobreprotector para estrechar la mano de un Hye Sung que sonrió con su perfecta dentadura blanca murmurando un…
- mucho gusto, Sr. Park… - que le supo al pelinegro demasiado formal y educado…
Notando después de un par de horas, que hasta el momento, el novio de su princesa no tenía nada de malo, que si bien no era perfecto, parecía compaginar a la perfección con su hija.
E igual que Yoochun, Yunho tuvo que aceptar, que a pesar del miedo y la responsabilidad de padre… ver a sus hijas sonriendo radiantes y felices con sus novios conviviendo con toda la familia… era solo el inicio de sus propios caminos hacia la felicidad…
Esa que ellos hace ya muchos años atrás iniciaran con Junsu y Jaejoong…
Y los momentos vividos pasaban por sus memorias como películas viejas proyectadas en una pared gastada mientras las sonrisas y las conversaciones siguen escuchándose en todo el jardín, y los bebés siguen de aquí para allá de brazo en brazo con padres, hermanos, tíos o abuelos…
Y sí, entienden entonces que solo queda una cosa para su familia…
Seguir siendo Kasa Llena por muchos años más…
*FIN**
ahhhhhhhhhh que lindo >///< me encanto!!!
ResponderEliminarAAAA que hermoso pero triste es el sentimiento que queda el terminar un fic tan genial como este me deja como nostalgica despues de todo fue largo y ya me habia acostumbrado a tener un poco de este fic cada dia awaa gracias felina-sama eres super!!! (llora de la felicidad) XD
ResponderEliminarLO MAXIMO!!! *w* ame tu ficu!!!! >.< es tan waaaa!!! no se como explicarlo fue tan hermoso hasta llore miraba todos lados con tal de no leer el sufrimiento pero igual me lo pasaron!!! fue tan triste cada que una pareja se sentia insegura cada que sentia que no se amaban y alguien (malditros!) se metian en su relacion! pero a fin de cuentas lo ame ^^
ResponderEliminar---Sheyliix---
la verdad q me da mucha tristeza terminarlo que lindo viaje leer tus fics!! muchas emociones juntas y es casi q formas parte de sus familias... bello muy bello
ResponderEliminarooooooooooo q bello final!!! me gusto muchisisimo TODO el fic usualmente no leo fics largos pero este me atrapo y ahora me encanta!!1
ResponderEliminarmuy bueno rei y llore con las historias , bello y hermoso lo ame
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