JEONSA Parte 3

Como tengo muy abandonado al blog ;D actu del miniserial YJ <3

JEONSA

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Parte 3

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Cuando Yunho resbaló en la empinada y no encontró ningún soporte de apoyo, supo que lo único que le quedaba era resguardar su cuerpo con sus brazos para evitar golpes más peligrosos pues en la caída se llevó más de uno contra piedras y ramas antes de que la pendiente terminara y cayera unos metros más cuesta abajo traspasando la cascada y clavándose estrepitosamente en las cristalinas y frías aguas del arroyo. Magullado por los golpes no tenía demasiada fuerza para nadar, pero como todo guerrero hizo acopio de voluntad y salió a flote nadando hasta la orilla, dejándose caer exhausto y adolorido sobre lodo y piedras.

- ¡Maldición!... – el moreno renegó respirando laboriosamente, por el esfuerzo y por los golpes.

- ¡Yunho!... – Jaejoong le llamó apresurándose a su lado.

El pelioscuro había tomado otro camino menos escarpado colina abajo hasta el arroyo, su carrera no pasó desapercibida para ChangMin –que aunque se hubiera retirado antes al despedirse de Yunho, había escuchado claramente el grito de Jaejoong cuando el moreno resbaló y regresó sobre sus pasos–, incluso Junsu y Yoochun le vieron pasar a gran velocidad, pero los tres chicos se limitaron a seguirle solo para vigilar si el espadachín necesitaba ayuda.

- ¿Qué haces aquí?

- Ayudándote, grandísimo idiota, siempre apresurándote a llegar a algún lado…

- No pensaba bajar a nadar, me caí…

- Lo sé…

Luego silencio.

De esos que caen incómodos. Aún así, Jaejoong le ayudó a salir del todo del agua, prestando atención a los gestos de Yunho para saber qué puntos le dolían más. Mientras Jaejoong le revisaba, Yunho le observó detenidamente, sin pensar claramente en nada.

- ¡ngh!... – se quejó con voz ahogada cuando el pelioscuro presionó los costados.

- Creo que tienes un par de costillas fracturadas…

- ¿Y tenía que medio matarme así para que me volvieras a hablar?

- No es momento para discutir, Yunho…

- ¿Quién dijo que íbamos a discutir? Solo te estoy preguntando algo…

- Algo que nos hará discutir. Deja de hablar para que termine de revisarte…

Yunho frunció el ceño guardando silencio, quejándose una u otra vez cuando Jaejoong tocaba aquí o allá. La mayoría de los golpes serían solo puntos amoratados por unos días, pero definitivamente se había fracturado las costillas y torcido seriamente el tobillo con el que inicialmente resbaló.

- Hay que volver pronto a la Villa, hay que vendarte el torso y tu tobillo, y necesitas cambiarte de ropa, no sea pesques un resfriado también.

El moreno no dijo ni media palabra, incluso el pelioscuro juraría que evitó todo contacto con su mirada cuando le ayudó a levantarse y caminaron unos pocos metros hasta donde vieron a sus tres amigos esperándoles con unos caballos para avanzar más rápido a la villa. El silencio entonces fue incluso peor, y se mantuvo hasta que llegaron la choza de Yunho. Jaejoong fue el único que le acompañó para curarle, mientras Yoochun y Junsu volvían a sus casas y ChangMin esperaba fuera sintiéndose un poco culpable pues la charla con él había alterado al moreno.

- ¿Sabías que Junsu y Yoochun tienen una relación?... – Yunho dijo de pronto rompiendo el mutismo, mientras Jaejoong terminaba de vendar alrededor de su torso.

- Algo intuía… - respondió mirando de soslayo el rostro de su amigo esperando encontrar algún indicio de… algo, ahí, lo que fuera.

- Debí suponerlo, tú siempre te enteras de todo antes que yo, creo que eres más observador… observamos el mundo de modo diferente…

- Yunho…

- Los vi antes, besándose… - interrumpió cualquier frase que el pelioscuro fuera a decir… - fue extraño.

¿Y…? Jaejoong esperó que dijera algo más, pero solo continuaba ahí sentado en el pequeño taburete dejándose curar.

- Si ellos se quieren, por mí no hay problema… - el pelioscuro aventuró.

- Pero son chicos, ambos lo son…

- Incluso nuestros gobernantes mantienen relaciones con sus iguales, las relaciones entre hombres no son tan extrañas como crees…

- Tampoco soy idiota, hasta yo sé que los que tienen más poder cuentan con cualquier clase de amantes… - el moreno señaló con cierto tono resentido. A veces le molestaba que su amigo hablara de temas en los que le cree ignorante.

- No te ofusques. De todas formas es diferente, ellos suelen tener amantes solo para satisfacer sus deseos sexuales. Junsu y Yoochun se quieren.

- Supongo que sí. Cuando los vi besándose… parecían tranquilos, creo que el mundo no existía para ellos en ésos momentos. Lo que me lleva a pensar ¿por qué me besaste la otra noche, JaeBoo?

Las manos del pelioscuro se detuvieron al instante, justo cuando terminaba de hacer un nudo para fijar el vendaje alrededor del torso de su amigo. Contuvo la respiración y se quedó congelado.

¿Debía contestar?

¿Por qué le preguntaba hasta ahora?

¿Qué debería contestar?

Podía decirle que había sido simple curiosidad. Pero era una excusa que ni Yunho se tragaría después de toda la tensión que sucedió entre los dos luego de aquél día. Pero confesarle sus sentimientos ¿Para qué?

- Jaejoong…

- He terminado, abrígate y procura no andar de inquieto por todos lados como sabes. Tampoco entrenes por unos días, tu cuerpo está muy maltratado por la caída… - se incorporó y fue entonces él quien evitó topar su mirada con la del moreno.

- ¿Vas a marcharte así nada más?... – Yunho preguntó bruscamente, siguiendo cada movimiento de su amigo en tanto ordena un poco ahí lo que utilizó para hacer algunos ungüentos con hierbas medicinales…

- Sí… - respondió sin más, tomando su bolso y dando media vuelta para irse…

- Ése fue mi primer beso, estúpido; por lo menos dime por qué lo tomaste… - espetó sintiéndose más molesto, pero no seguro del origen de ésa molestia.

Jaejoong apretó los puños –del mismo modo en que Yunho los había tensado, pero sin poder verse pues entonces ninguno estaba mirando al otro– ¿Por qué Yunho no quería captar que no desea contestarle?

- ¡Maldición! ¡Dime por qué me besaste Jaejoong!... – el moreno elevó la voz saliéndose de sus casillas…

- Porque me dio la gana. Estabas ahí tan sumiso entre mis brazos que simplemente se me antojó… - respondió con sorna, girándose para que viera esa sonrisa socarrona que se obliga a mostrar. Porque prefiere mentir ahora a tener que confesar un sentimiento que Yunho no le va a regresar intacto, sino hecho trizas, desgarrado como la corteza sobre la que cae una espada de doble filo…

- ¿Se te antojó?... – siseó entre dientes… - ¿simplemente, se te antojó?... – se puso de pie entrecerrando un ojo por causa del dolor en sus costillas, pero ignorándole pues de momento era más importante sacarle la verdad al pelioscuro… - No me vengas con tal estupidez…

- Respondí lo que me preguntaste, sino es lo que querías escuchar no es mi problema… - vio al moreno acercarse cojeando por causa del tobillo pero con la mirada furiosa y casi se ablanda, no quería ser receptor de ése enojo, no cuando su corazón palpita apresurado y vigoroso por él…

- Te conozco, Jaejoong, aunque no te guste la idea y aunque admito que hay cosas que me ocultas con maestría, todavía soy capaz de saber cuándo mientes, y lo estás haciendo ahora… - sujetó las ropas del pelioscuro a la altura del pecho jalándole un poco más dejando sus rostros demasiado cerca… - Dime la verdad, ¿por qué me besaste?

- Si no me sueltas vamos a tener una pelea, Yunho; y en tus deplorables condiciones no te conviene provocarme… - el pelioscuro retó. Porque en aquellos momentos prefería mil veces un enfrentamiento que responder. Yunho no tenía derecho…

No tenía derecho a hacer lo que quisiera como quisiera. Han pasado días desde ese estúpido beso y recién le entra la necesidad de saber porqué se dio.

El agarre de Yunho se hizo más fuerte, estaba aceptando silenciosamente el reto de Jaejoong. Y eso al pelioscuro le gustó menos. ¿Es que su amigo estaba loco?

- ¿Cuándo vas a lanzar el primer golpe?... – el moreno siseó soltando las ropas de su amigo y tomando postura de ataque. Realmente quería pelear…

- ¡Já! Parece que quieres pelea de verdad, Yunho. No vayas a reclamar nada después de que te humille… como siempre lo he hecho… - Jaejoong dijo con saña, quería provocarlo, quería hacerle enojar de verdad, que tuviera un motivo real para enfadarse, incluso para detestarle a punto del odio.

- Veremos… - el moreno gruñó entre dientes y se lanzó al ataque.

El resultado era de esperarse, saltaba a la vista quién iba a resultar vencedor. Pero aún así, Yunho no descansó hasta que le fue patéticamente imposible sostener el peso de su cuerpo tirado en el piso de tierra, con sangre corriendo de su labio inferior y un ojo rojizo que mañana sería un hematoma más en su cuerpo. Entre otros dolores que le fastidiarían la existencia en días. Sí, era un completo idiota, pelear contra Jaejoong en aquellas condiciones era básicamente mortal.

- Adiós, Yunho…

- No te despidas Jaejoong, deja que sea capaz de moverme con libertad y te sacaré esa maldita respuesta a base de golpes, ¡Ya lo verás!... – espetó con demasiada seguridad, sonriendo divertido a pesar de las nefastas condiciones en que el pelioscuro le había dejado.

Jaejoong dio media vuelta y salió de ahí. un pie fuera y se echó a correr. Lejos, tan lejos como sus piernas pudieran llevarle. Le dolía el pecho, le dolían las manos manchadas de sangre de Yunho, le dolía amar tanto a ese idiota que no podía simplemente dejarle en paz.

ChangMin vio salir a Jaejoong y luego entró en la choza de Yunho. Por supuesto, había escuchado la pelea, pero no intervino porque… todo mundo sabe que es mejor no intervenir en un enfrentamiento entre Jung y Kim.

- Eres cabezota, Yunho hyung… - el morocho susurró entre dientes mientras le ayuda a ponerse de pie y recostarse en su cama… - ¿No podías simplemente pensar un poco? Salta a la vista la verdad y tú te empeñas en ponerte vendas en los ojos…

- Cállate ChangMin, no estoy de humor y me duele todo el jodido cuerpo… - el moreno respiraba laboriosamente y se tocaba las costillas en un vano intento por aliviar el dolor que le aquejaba luego de esa pelea que no duró ni cinco minutos…

- Por ahora voy a ayudarte, pero luego de esto, ojalá empieces a usar más el cerebro, hyung… - el morocho dijo con tono agrio, yendo a la cocina a preparar un té para el dolor y tal vez para anestesiar al moreno un poco…

……………………………………

Dos meses transcurridos. Las lesiones de Yunho estaban sanadas, pero su orgullo seguía herido. En todo ese tiempo no había visto a Jaejoong para nada, parecía que se escondía o que estaba por ahí metido donde no pudiera encontrarlo. No que el moreno hubiera hecho el esfuerzo por topárselo tampoco. Por el contrario, se había dedicado a entrenar, incluso desde que las lesiones aún no sanaban del todo, él había comenzado a hacerlo, día y noche, descansando apenas un poco, comiendo lo necesario, bebiendo lo justo.

Tenía que vencer a Jaejoong a como diera lugar.

……………………………………

Caminaba tranquilamente por el bosque, era bueno para él tomarse esos paseos en su preciada soledad de tanto en tanto. Oh bien, últimamente Yunho hyung era una completa molestia, la pasaba pidiéndole que lo observara mientras se enfrentaba a Yoochun para que observara sus avances y le ayudara a descubrir los puntos a mejorar. ¡A él no le importaba!

- Tan sencillo que sería si simplemente entiende que Jaejoong hyung está enamorado de él, ¡pero no! Tenía que ser un cabezota… - el morocho refunfuñó cansado de aquel tonto juego que sus hyungs se habían inventado a base de silencio y tonterías… - y encima tengo que soportar los chillidos del escandaloso de Junsu hyung cada que su querido Yoochun pelea con Yunho hyung porque teme que le de algún golpe que magulle su linda cara o que corte alguna parte fundamental de su vigoroso cuerpo…

- Ayuda… por favor… - una voz le hizo ponerse instintivamente en guardia… – por favor, alguien… ayuda…

Cuando ChangMin examinó todo a su alrededor vio más allá una figura recargada trabajosamente en un tronco. Luego vio al hombre caer de lleno al suelo escarpado entre hojas y tierra. Corrió sin pensarlo hacia él. No le conocía, no llevaba ninguna insignia que le permitiera reconocer si pertenece a alguna Villa vecina o a la guardia real. Los rasgos del hombre en cuestión le parecían de hecho…

- ¿Japonés?... – el morocho le dio vuelta para mirarlo mejor, encontrándose entonces con la herida más o menos profunda en el costado del chico que se había desmayado, seguramente, por la cantidad de sangre perdida…

Y sin pensarlo dos veces, ChangMin le llevó a la Villa, donde con ayuda de Jaejoong –sí, por alguna razón, el único que nunca congeniaba con el pelioscuro era el propio Yunho– curó su herida…

- Hola… - el chico saludó a media voz apenas recuperó el conocimiento… - ¿Dónde estoy?... – preguntó incorporándose inmediatamente, mirando alrededor como si examinara el peligro en el que estaba…

- Tranquilo, no debes moverte demasiado o la herida se abrirá de nuevo… - Jaejoong le dijo obligándole a recostarse de nuevo… - iré por agua, la necesitas… - anunció y sin más salió de la pequeña habitación del morocho…

- ¿Qué es lo que quieren de mí?... – el chico cuestionó al único presente. Y ChangMin por alguna razón se sonrojó al sentir la penetrante mirada parda…  

- Na…nada… - carraspeó al notar que la voz se le apagaba… - ¡Mierda, estoy nervioso ante un perfecto desconocido!... – te encontré en el camino hacia acá, cómo te llamas…

- Mokomichi Hayami…

Sí, definitivamente un japonés.

Continuará…… 

Nos vemos el próximo 29 cn la Mega-Actu ;D 

Ya Ne!!