Maki: Otanjobi omedeto Hayami no baka!!! *-----------*
bueno como hayami ya es parte de la familia dongbang se merece su espacio que en el blog para celebrar su cumpleaños, demosle desde aqui todo el amor que se merece este pan de dios xDDD
*se lo quiere robar pero la taclean antes de dar siquiere dos pasos X.x
FELI: Festejando por primera vez en el blog al baka más sexy y paciente del mundo *----*
¡Feliz Cumpleaños Hayami~!
Hoy -ayer allá en sus tierras xD- está de manteles largos uno de los hombres más importantes para este espacio. El amante que se quedó con el lugar oficial de novio para nuestro ChangMin *w* que le aguanta todo xD
Título:
ROYAL SERVICE
Idea
principal: Makino Mizuki
Desarrollado
por: Felina
Pareja:
HayaMin (YooSu & YunJae)
Género:
Romance, Humor
Clasificación:
NC-18
Advertencia:
Lemon
~~//~~ * ~~\\~~
ROYAL SERVICE
Parte 1
Esta historia comienza así. Tenemos a un
chico de hermosa apariencia física y un bondadoso corazón, un rompe-corazones
diría cualquiera, el apuesto muchacho de 29 años de edad es dueño de un popular
restaurante en la capital surcoreana, sus inicios en las artes culinarias se
remontan a sus años como hijo de familia rodeado de ocho mujeres, su bella
madre y ocho hermanas que –a la fecha– son todo un abanico de personalidades.
Pero no hemos de ahondar en aquellos aspectos, no vamos a necesitar detalles de
su infancia ni mucho menos de su adolescencia, hemos de conformarnos con saber
que será el culpable de la serie de
circunstancias que se sucederán en adelante.
--//--
Jaejoong se considera a sí mismo un Jefe
ejemplar con sus empleados. Buena paga, buen ambiente de trabajo, horarios
adecuados, y una gran accesibilidad a las mejoras. ¿Qué otra cosa podían
pedirle?
– ¡Yunho estoy a un día de salir! ¡Cómo
pueden hacerme esto!
Sí, justamente porque es un jefe ejemplar
es que ahora el apuesto joven está a punto del colapso nervioso, despotricando
todas sus frustraciones con su novio. Oh, habíamos omitido el detalle, ¿verdad?
Bueno ahí está, Jaejoong tiene novio. Jung Yunho, un atractivo hombre de 29
años, empresario talentoso que ha participado activamente en cada empresa
iniciada por el pelioscuro, su futuro prometido –pero eso es algo que el
muchacho de tez morena aún está planeando, así que dejemos esto como un secreto
entre nosotros– y el único hombre capaz de tolerar los repentinos cambios de
humor en el chef.
– No hagas tanto drama, JaeBoo… – El moreno
dijo y su novio elevó una ceja en señal de indignación. Cualquier otro en su
lugar habría comenzado a tartamudear e intentar disculparse, pero Yunho no era
un novio tan consentidor, no cuando sabe que su argumento es sólido y no
recibirá por castigo semanas sin sexo… – Se puede solucionar.
– ¿Cómo? ¡Me quedé sin equipo de trabajo
cuando mañana saldré a Japón! ¡Yunho, tienes idea de lo que esto significa!
– La tengo. Recuerda que estoy contigo en
todo. Ahora, tranquilízate. Pídeles ayuda a algunos de nuestros amigos.
– Todos tienen trabajo, no puedo pedirles
que se ausenten por una semana ni aunque les diga que les pagaré el doble.
– ¿Qué hay de Yoochun y Junsu? Sé que se
tomaron sus vacaciones.
– Porque planeaban salir de viaje, ya
sabes, andan estrenándose de pareja mimosa… – El pelioscuro sonrió divertido al
pensar en sus amigos, los que un par de años menores a ellos, se habían vuelto
pareja hace poco menos de tres meses y parecían una pareja de recién casados.
Miel por todas partes.
– Ahí lo tienes, les darás su luna de miel por adelantado invitándoles
a Tokio.
– Para trabajar… – El pelioscuro elevó
nuevamente la ceja enfatizando lo ridícula que sonaba la idea de su novio.
– Son tus amigos, no se la pensarán dos
veces si es para ayudarte… – El moreno resolvió con absoluta seguridad. Buscó
otra postura ahí de pie en las cocinas, sintiéndose ligeramente sofocado por
los aromas. No es que la cocina no le gustase, es que luego de un rato todo
concentrado en un mismo espacio le abrumaba.
– ¿Crees? Yo en su lugar si me negaría,
pasar unas vacaciones exóticas contigo se me pintaría mucho más interesante que
invertirlas en trabajar, aunque sea en otro país.
– No pierdes nada con preguntarles.
– Cierto… – Meditó el pelioscuro… – Pero
aún me estaría faltando alguien más, porque claro tú vendrás conmigo, ¿cierto?
– Pediré unos días en el trabajo, no creo
que haya problema ya que soy mi propio Jefe… – El moreno sonrió prepotente. Una
sonrisa que generalmente cautivaba a Jaejoong y le hacía suspirar como colegial
enamorado. Que lo segundo si lo está, pero lo primero no lo es.
– Bien, dejaré esto aquí y vamos a la
oficina para llamar a Yoochun y Junsu…
Jaejoong metió al horno una charola con
varios ingredientes ahí desprendiendo sus deliciosos aromas. Luego fue seguido
por Yunho a la oficina de Gerencia dispuesta a la izquierda siguiendo el
pasillo. Cinco minutos después casi todo su estrés se había liberado, sus dos
amigos habían aceptado de inmediato. Aunque tal vez era más bien el hecho de
que Junsu había chillado escandalosamente estar más que dispuesto a ayudarle, y
Yoochun no tuvo entonces más remedio que hacer lo que su novio ya decidiera.
Venga que, como dijo el pelioscuro, están en esa etapa de su relación en que
todo parece miel sobre hojuelas, y el novio
necesita quedar bien con su pareja.
Puro instinto de cortejo humano.
– Habla con ChangMin… – El moreno volvió a
proponer, visto que su novio seguía pensando a quién más buscar, aunque lo
hacía entre esas solicitudes de trabajo que tenía almacenadas para casos de emergencia, esta situación uno
de ellos… – ¿No acaba de terminar su maestría? Tiene tiempo libre de sobra,
seguro.
– Está buscando empleo…
– Justamente lo que vas a ofrecerle.
– Llevarle de mesero no tiene nada que ver
con su perfil profesional.
– ¿Tengo que repetirte que no tienes nada
qué perder?… – El moreno enarcó una ceja con aire decidido, que no estaba para
dejar que su novio entre en crisis histérica por esto.
– ¿Estás buscándote que no te deje tocarme?
– Jaejoong elevó finamente su ceja, curvando sus labios rojos en esa sonrisa
altiva y amenazadora que mezclaba sensualidad y molestia en una armonía
envidiable que era capaz de marcar límites como encender a Yunho.
– Llámalo, Jaejoong ah… – Resolvió al
tiempo que se ponía de pie y caminaba a la puerta de salida… – Y luego me
cuentas cómo te va, ahora tengo que irme. Te veo en la noche, amor.
– Ni te me pongas meloso, cariño~ todavía
voy a meditar si te dejo colarte en mi cama esta noche.
– ¿Entonces te tomo en cualquier otra parte
de tu departamento? – Yunho sonrió pícaro, consiguiendo ese tenue sonrojo en
las mejillas pálidas del mayor de los dos, pero también esa mirada lasciva que
solo alguien como Jaejoong era capaz de mostrar haciendo que al instante miles
de fantasías se le formen en la cabeza al moreno… - Hasta más tarde, JaeBoo.
--//--
Convencer a ChangMin había sido toda una
odisea para Jaejoong. Se había visto en la necesidad de buscarle personalmente
visto que la llamada telefónica le fue cortada prácticamente en el mismo
instante en que dijo con su voz más casual “Necesito
un favor”. Sí, como por arte de magia el pitido al otro lado de la línea
había llegado torturándole el oído al pelioscuro.
Pero finalmente, luego de algunas cuantas
promesas, Jaejoong había obtenido el “de
acuerdo” malhumorado del muchacho de cabellos morochos. De modo que,
estaban aquí, en tierras niponas aguardando en el aeropuerto a que llegasen por
ellos para llevarles a su destino.
– La puntualidad no es propio de este
cliente tuyo, ¿verdad Jaejoong? – ChangMin fue quien cuestionó con tono ácido,
perdiendo la paciencia que, de por sí, no le es vasta en realidad.
– Es que nosotros llegamos una hora antes
de lo esperado, y no hemos tardado nada en los trámites allá dentro… – El
pelioscuro respondió, en tanto buscaba en su móvil el número telefónico de
contacto para avisar justamente su arribo adelantado.
ChangMin gruñó inconforme, tentado de
iniciar una discusión acerca de lo educado que sería de parte de los
anfitriones haber previsto cualquier situación de esta naturaleza; pero le
bastó con ver a Yoochun y Junsu regalándose besos y susurros empalagosos para
que desistiera de toda idea, contemplando un soliloquio que le haría sentir más
enfadado. Además, tiene hambre y está cansado, Jaejoong le sacó de su
departamento demasiado temprano para siquiera haber dormido más de cuatro
horas; entre que él se fue a la cama entrada la madrugada por andar
entreteniéndose por ahí en la web, y que el pelioscuro llegó a las seis de la
mañana, no había tenido opciones.
– Me han dicho que vienen para acá,
llegarán en diez minutos así que podemos sentarnos por aquí y esperar… –
Jaejoong informó, sonriendo tranquilamente arrastró su maleta y con caminar
elegante y sexy (eh aquí la percepción del moreno) se dirigió a una cafetería
ahí en los pasillos ordenando un café express.
– ¿Es cierto lo que Yunho dijo, Jaejoong?
– Qué fue lo que mi querido Yunho dijo, Yoochun… – La mirada amenazante del pelioscuro
tensó al moreno, quien quiso írsele a la yugular al de cabellos negros por
andar de lengua larga. ¡Le había dicho que era secreto! ¡Secreto!
– Que vas a prepararle un banquete de
cumpleaños a un sujeto muy, muy rico. Algo así como un Príncipe.
– ¡Eso sería encantador! Te imaginas
Chunnie, un Príncipe de verdad… – El de mechones castaños exclamó más
emocionado de lo que el peliazabache quisiera verle.
– Yo ya soy tu príncipe, baby. Para qué
quieres conocer a otro… – Aclaró con recelo, rodeándole la cintura con marcada
posesión.
– Pero no me estaba emocionando de un
Príncipe para mí~ sé que te tengo a ti… – El castaño sonrió tiernamente antes
de empinarse y capturar los carnosos labios de su novio en un beso lejos, muy
lejos de esa ternura que destilaba.
– Ahí van de nuevo… – Refunfuñó el morocho,
mirando la hora en su ipad y subiendo el volumen para ignorar los sonidos
(húmedos) desesperantes de los besos de sus amigos.
Cuando Junsu renunció a los labios de
Yoochun y éste le dio tregua porque a ambos les hacía falta tomarse un respiro
de verdad y no solo esas pequeñas bocanadas necesarias para revivir otro beso,
el castaño pucheó al percatarse de la falta de atención del menor de todos.
– Pero si justo pensaba decirle que es a él
a quien le hace falta su Príncipe. ¿Se imaginan? Que ChangMin terminara flechado
por tu cliente, Jaejoong… – Indicó con ensoñación.
Yoochun y Yunho apostaron por la incrédula
posibilidad, mientras que el pelioscuro solamente sonrió intentando no darle alas al castaño, que era
perfectamente capaz de construir historias en su cabecita y pasarla hablando de
ello todo el día y la noche a ser posible.
– ¿Sr. Kim Jaejoong-san…? – Un hombre de
unos cuarenta años, vestido en un pulcro traje gris y usando lentes oscuros, se
paró delante de ellos con ceremonial respeto.
– Sí, usted debe ser Hiroyuki-san.
– Llámeme Watanabe simplemente,
Jaejoong-san; Hayami-sama espera por su grupo en la residencia Mokomichi. Por
favor, síganme… – La extrema formalidad del hombre hizo pensar a todos que en
verdad se iban a encontrar con un Príncipe. Al menos con un tipo
multimillonario que contaba con absolutamente todos los privilegios económicos
que deseara.
– Tengo una duda, Jaejoong hyung…
– Si es acerca de Hayami-kun, no tengo idea
de si es un Príncipe de verdad Junsu.
– No es eso~ – El castaño rió
escandalosamente, arrastrando su maleta pero colgado prácticamente del brazo de
su novio… – ¿Cómo fue que conseguiste traer a ChangMin con nosotros? ¡Juraría
que no haría un favor a menos que le rogaras! Y no te imagino rogándole nada a
nadie… – El castaño parpadeó como si intentase formar alguna imagen en su mente
al respecto.
- Oh bueno…
…Flashback…
– ChangMin ah, es solo un pequeño favor.
– No tengo ni ganas ni intención de viajar.
Y menos tan precipitadamente, Jaejoong ah.
– ¡Yah! ¡Hyung para ti!
– Sabes que no me gusta usar el “hyung” cuando se trata de amigos tan
cercanos como tú, Jaejoong ah… – El joven morocho dijo con cierta malicia. Le
encanta molestar a sus mayores, y destituirles del merecido “hyung” era siempre
su principal arma.
– Oye, si vienes la pasarás de maravilla.
Si sabes que Tokio es una ciudad muy bonita, ¿no?
– Puedo viajar y averiguarlo en cualquier
otra ocasión.
– Voy a preparar platillos que ni siquiera
has probado en tu vida, y podrás comer todo lo que quieras de ellos. Serán unos
días fantásticos, ChangMin ah.
– ¿Me estás tomando el pelo? Seguramente
que tendrás medido y contado todo alimento para el banquete.
– Tengo vía libre para comprar todo cuanto
quiera; y adquiriré cada ingrediente al llegar, así que puedo pedir un poco más
de esto y aquello, así podrás comer día y noche si lo deseas.
– ¿Se trata de algún truco?
– ¡Me ofendes! ¿Me crees capaz de engañarte
con algo tan valioso como la comida? – El mayor le miró con ojos inocentes.
Esos grandes ojos negros podían ser encantadores cuando lo quisieran, incluso
para alguien como ChangMin, que nunca se dejaba arrastrar por nimiedades como
las expresiones faciales de otra persona.
– Si me engañas…
– ¡Te estoy diciendo que no hay truco en
nada! Solo tienes que venir y esperar al día del banquete, comportarte con algo
de humor positivo, sonreír a los invitados y pasearte por ahí con una charola
al hombro. Unas horas de trabajo por días enteros de la comida que quieras.
¡Además te quedarás con lo que quede después del banquete! Los ricos como estos
dejan muchísima comida sin tocar siquiera.
– De acuerdo. ¡Pero si me engañas…!
– ¡Te digo que no es un truco!
…Flashback…
– Tendríamos que haberlo sospechado.
Comida, día y noche, gratis; todo eso en la misma oración, obvio que tendría
que convencer a alguien como ChangMin, que parece barril sin fondo…
– ¡Te estoy escuchando, rata de
alcantarilla! – El morocho espetó con el ceño fruncido… – He venido porque soy
tan buen amigo como Junsu y tú.
– Sí claro… – El pelinegro sonrió con
sorna, restándole credibilidad a las palabras del menor. Junsu reía a su lado,
mientras que ChangMin le hacía señas agresivas
acerca de cómo se encargaría más tarde de él y su gran bocota.
– Chicos, qué pensará Hiroyuki-san de
nosotros…
– Watanabe, por favor Jaejoong-san.
– ¡Oh! Pero se escucha tan informal
hablarle por su apellido sin respeto alguno… – El pelioscuro se quejó mostrando
un gracioso puchero que hizo carraspear al hombre trajeado.
– Trabajo para la familia Mokomichi desde
hace muchos años, Jaejoong-san; estoy más que acostumbrado, y de hecho me haría
sentir más cómodo si me llamara Watanabe simplemente.
– Encuentro que tenemos una dificultad en
ello, ya que eso a mí me haría sentir muy incómodo. Y supongo que para usted la
comodidad de sus invitados es primordial, ¿no es así?
– Sí, pero…
– ¡No se hable más! – Jaejoong sonrió y
palmeó el hombro del mayor… – ¿A qué distancia está la residencia Mokomichi?
– A una hora aproximadamente, Jaejoong-san…
– El hombre suspiró resignado. Les guió a una limusina e indicó que su equipaje
sería transportado en otra camioneta que esperaba allí también.
Tanto lujo tenía entretenido a Junsu, y a
Yoochun cuidándole como niño pequeño. Yunho por su parte simplemente se
mantenía cerca de Jaejoong, escuchando y observando; el pelinegro le dijo por
lo bajo que parecía el guardaespaldas del mayor y no su novio. Yunho no le
prestó atención, aunque en el fondo se inquietó por el dato. ChangMin… bueno, él
iba relajado escuchando su música y restándole importancia al resto del mundo.
Lo primero que haría al llegar a la dichosa residencia Mokomichi sería pedir
comida, un baño de agua tibia, y luego se encerraría a leer algún libro en la
habitación que le asignen.
--//--
Mokomichi Hayami no era un Príncipe, pero
no distaba de uno más que por el título. El dinero, la educación, el porte, la
mirada, el atractivo –y la altivez según el morocho dirá apenas le vea– entre
otras virtudes lo caracterizaban. Era incluso noble de carácter, filántropo de
acciones y amable como anfitrión.
Cuando los chicos arribaron a la Residencia
Mokomichi, quedaron fascinados con la vista. Aquella no era ni siquiera una
Mansión como cualquier otra que pudieran haber imaginado. Esto era,
francamente, un Palacio.
Ubicado en el extremo occidental de la
capital, el distrito de Nishitama se convierte en la sede de la Residencia
Mokomichi, enclavado entre montañas y bosques, la estructura de esta mansión se
levantaba como un moderno y elegante Palacio oriental. A las faldas del Palacio
se encuentra la Villa Hinohara, cuya gente le da ese aire pueblerino que seduce
a los turistas con su bonachona hospitalidad.
– Me pregunto cómo es que una familia tan
adinerada decide vivir en una zona aparentemente humilde… – El morocho pensó en
voz alta al bajar de la limusina y observar toda esa magnificencia de
estructura, ganándose una mirada de advertencia de parte de Jaejoong y Yunho,
mientras que Junsu asentía conforme con su curiosidad y miraba con ojos
hambrientos de una respuesta al hombre que les había recogido en el aeropuerto;
Yoochun se mantuvo al margen, en realidad que a él no le interesaban esos
detalles, pensaba divertirse tanto como pudiera y nada más. Y por supuesto,
ayudar a su amigo Jaejoong. Eso sobre todo.
– Los Sres. Mokomichi adquirieron su
estatus socioeconómico por la serie de empresas que poseen a lo largo del país,
algunas de renombre internacional. Nishitama es sin embargo el lugar de origen
de la Sra. de la casa, por lo que construir su residencia de ensueño en su
pueblo natal fue meramente un deseo que le fue satisfecho por su esposo, el Sr.
Mokomichi Omote. En realidad esta es su casa de verano, si quieren ponerlo de
alguna manera. Los Sres. Mokomichi y su hijo viven principalmente en la
capital, aunque por separado.
Watanabe explicó sin atisbo de duda, lo
cual significaba que no había secreto alguno en los orígenes y gustos de la
familia. Los autos avanzaron por un amplio sendero bordeado típicamente por
cerezos, y cuando finalmente pararon ante la entrada, los detallados portones
de madera crujieron al ser abiertos por otros sirvientes.
– ¿Qué edad tiene Hayami-kun? – Junsu quiso
saber. Y Yoochun frunció el ceño en automático.
– Hayami-sama cumplirá los 29 en una
semana.
– ¿Por qué eligió a Jaejoong para que
organizara su banquete? ¿No sería más fácil si hubiesen contratado a alguien de
la región?
– Hayami-sama estuvo hace un par de semanas
en Seúl, dijo que llegó a un restaurante popular cuyas comidas eran simplemente
deliciosas. Así que investigó quién era el chef y de esa manera están ustedes
aquí.
– Tiene buen gusto el tipo… – Murmuró por
lo bajo el morocho.
Al pasar los portones les recibió otra
explanada rectangular encerrada por unos corredores familiarmente orientales;
la servidumbre caminaba por ellos con sus kimonos tradicionales, hablando entre
sí en voz baja pero tranquilos y hasta sonrientes.
– Esperen aquí por favor, Hayami-sama
vendrá en unos momentos… – Watanabe les invitó a pasar a uno de los salones del
primer corredor a la derecha.
La decoración era bastante sencilla, piso
de madera, una mesa baja al centro y cómodos cojines sobre los que los
muchachos se sentaron sin reparo. Un minuto después una señorita entró con una
bandeja llena de panecillos y una tetera. ChangMin atacó sutilmente, las tripas
tenían rato gruñéndole.
– Típico de ti… – Se burló Yoochun,
recibiendo una galletita de su novio para que guardara silencio. Jaejoong
seguramente no toleraría una más de sus discusiones.
De cualquier manera el morocho estaba
decidido a ignorarle, era mucho más importante ahora consumir algo de comida
para que sus tripas dejaran de molestarle. Cinco minutos después Mokomichi
Hayami finalmente se presentó ante ellos.
El joven era sin lugar a dudas apuesto, de
rasgos varoniles, penetrantes ojos cafés, tez tostada, cabellos oscuros en
aquel corte desaliñado que le hacía lucir arrebatadoramente sexy, una boca
simplemente ideal a la forma de su cara cuyos pliegues lucían carnosos y
suaves; las patillas tupidas corrían hasta la altura de la mandíbula pero lejos
de darle un aspecto grotesco pronunciaban su sex appeal, el cuello largo y la
nuez sobresaliente simplemente hacían juego con su porte elegante. Vestía
casual –aunque por alguna razón los chicos esperaban verle de traje–, calzado
de montaña, jeans negros, camiseta blanca sin estampado alguno que estaba floja
en el cuello, donde una corbata de lunares diminutos se anudaba sin
constricción.
Atractivamente sexy.
– Buenas tardes, bienvenidos a su casa, soy Mokomichi Hayami… – Saludó
con una venia y una sonrisa amable. Gesto que pareció encantador a ojos de
Jaejoong y Junsu, pero que disparó todas las alarmas de Yunho y Yoochun;
mientras que ChangMin se quedó pasmado un momento. ¡Es que tenía la voz
profunda y áspera! Eso es sexy, demasiado para ignorarlo.
– ¡Maldición!
¡No debo comenzar a pensar que es sexy el sujeto este! – Pensó malhumorado…
– Además parece que tiene los humos por
las nubes, se nota que se siente todo importante, es un arrogante.
Mientras el morocho pensaba y comía. Sí,
ambas cosas a la vez que una no interfiere para nada con la otra. El resto de
los mortales presentes conversaba.
– Gracias, Hayami-kun. Soy Kim Jaejoong, él
es Jung Yunho, Kim Junsu, Park Yoochun y… el chico que dejó sus modales en
Corea es Shim ChangMin.
– ¡No dejé mis modales en ninguna parte!
– Entonces suelta esas galletitas y saluda…
– El pelioscuro recriminó con los brazos cruzados.
– Te dije que tenía hambre, y fue tu culpa
ya que me sacaste de mi casa a las seis de la mañana y era hora que solo había
comido la miseria de alimento que dan en el avión.
– Las cocinas están a su entera
disposición, si desean algo solo tienen que pedirlo. Mientras tanto, si no les
molesta me gustaría hablar sobre los detalles del banquete con Jaejoong-kun… –
Mokomichi intervino, sonriendo con aire divertido por la actitud del chico de
cabellos morochos.
– Bueno, mientras usted no vaya a resultar
uno de esos hombres ricos que quieren hacer propuestas indecorosas con un precio
de un millón de dólares.
– No le haga caso a Yunho, quedó marcado
por una película que vio en su niñez. Lo acompaño Hayami-kun.
– Por aquí, por favor… – El japonés indicó
el camino al pelioscuro, en tanto el moreno imitaba infantilmente los gestos de
Mokomichi evidentemente celoso de dejarles a solas.
– ¿Por qué de pronto tan celoso, hyung?...
– Junsu cuestionó inocentemente.
– Tanta riqueza a tu alrededor Junsu ah,
¿no te parece lógico que Yunho se sienta preocupado porque su novio lo quiera cambiar por otro? – Yoochun dijo con
aire intelectual. Como si llegar a aquella conclusión le hubiese exigido pensar
seriamente al respecto. El moreno le pateó desconsideradamente y comenzaron una
cómica pelea.
– Luego dicen que yo soy el que parece
niño… – El castaño revoleó los ojos, sacando luego su móvil para grabarlos y
mostrarle el mal comportamiento de su novio y amigo a Jaejoong hyung… – Por
cierto, dónde se metió ChangMin… – Miró para todos lados en el salón pero ni
rastros del morocho.
No, porque el más joven ya había iniciado
su incursión en búsqueda de las cocinas, su estómago no tenía suficiente con
unas simples galletas y té para satisfacerse. Así fue como el día comenzó y la
noche llegó a la villa.
Después de la generosa cena les indicaron
sus habitaciones. Jaejoong había aprovechado la charla con Hayami para
explicarle acerca de las relaciones sentimentales, por lo que el japonés no
tuvo problema en permitirles ocupar habitaciones en pareja. Junsu estaba
encantado con la alcoba pues le parecía de ensueño, Yoochun por su parte solo
se preguntaba si conseguiría hacer el amor con su novio esas noches, con lo
pudoroso que el castaño se pone cuando otra gente puede escucharlos en plena
faena. Yunho estaba que no paraba de preguntarle a Jaejoong sobre lo que había
hablado con Hayami, pero el pelioscuro le daba evasivas y se limitaba a
asegurar que no tenía que preocuparse de nada. En todo esto ChangMin fue el
único que tuvo que ocupar una habitación él solo. Aunque para él, eso resultaba
mucho mejor.
– Excepto porque me han dejado en medio de
ellos… – Gruñó apenas escuchó las risas de Junsu de un lado, y las advertencias
de Jaejoong del otro… – Tendré que usar tapones si quiero sobrevivir a la
noche.
--//--
Después del desayuno, al que ni los padres
de Hayami ni el mismo anfitrión acudieron porque (según Watanabe les informó)
los primeros no llegarán sino hasta el día del banquete y el segundo porque
estaba realizando algunas actividades matutinas, Jaejoong ya le había indicado
a sus amigos que le acompañarían a la capital a comprar algunos de los
ingredientes que necesitaría para el banquete.
– Jaejoong-kun, ¿le importaría dejar que
ChangMin se quedara? – Escucharan la ronca voz del japonés (tal ronquez
advirtieron podría deberse al aparente ejercicio físico que el hombre había
estado realizando ya que iba con ropa sport y muy sudado) detenerles antes de
subir todos al transporte que les llevaría a la ciudad.
– ¿Eh? – El pelioscuro giró el rostro para
encontrarse con el anfitrión, en tanto Yoochun y Junsu ya estaban sentados bien
cerca uno del otro en la camioneta, y Yunho permanecía con un pie dentro pero
atento a las peticiones del japonés.
– ¿Yo por qué? ¿Para qué? – El morocho
preguntó mirando inquisitivamente a ambos hombres, tanto a su amigo como al
japonés. Este último seguía sin agradarle del todo, más bien le parecía todo un
patán egocéntrico que se creía que podía tener todo lo que quisiera. Y bueno,
tal vez podía. ¡Pero él no entra en ese todo!
– Bueno, está bien, puedo prescindir de su
humor tan alegre si usted encuentra interesante la compañía de nuestro querido
ChangMinnie… – El pelioscuro le palmeó la espalda mandándole al frente, la
sonrisa de Jaejoong no hizo más que activar las venitas en la sien del morocho.
– ¿Qué te crees que soy para decidir por
mí?
– Por estos días, mi empleado… – Jaejoong
sonrió lindamente y luego subió a la camioneta en que Watanabe les llevaría a la
ciudad.
La camioneta arrancó tan rápido que el
morocho solo escuchó el rechinar de los neumáticos. Más fuerte le palpitó la
venita en la sien.
– Tengo hambre, prepárame el desayuno… – El
japonés ordenó, con voz tranquila y
mirada serena.
– ¡Qué!... – El morocho inquirió frunciendo
el ceño.
– De prisa, y por favor recuerda llamarme
Hayami-sama… – Sonrió con galantería.
– ¡¡Qué!! – Exclamó con voz en cuello.
Pero Hayami simplemente entró a su casa.
ChangMin casi sintió que le saldría humo por las orejas de tan molesto que
estaba. ¿Ahora resultaba que sería sirviente de este niño rico?
– ¡Ahora mismo me va a escuchar! – Gruñó
entrando también, avanzando con pasos pesados por los pasillos hasta el
comedor, donde encontró al japonés leyendo cómodamente el periódico… – Si
tienes hambre entonces pídele a cualquiera de tus montones de sirvientes que te
prepare algo porque si vine hasta aquí con Jaejoong fue para ayudarle el día
del dichoso banquete, no para ser tu…
– ¿Te habían dicho que eres muy atractivo?
– El comentario tan repentino y fuera de lugar del japonés descolocó al morocho
y frenó al mismo tiempo su verborrea. Y por alguna razón sus morenas mejillas
se ruborizaron… – Aunque tienes un carácter del demonio… – Agregó, volviendo su
atención al periódico pues solo lo había bajado lo suficiente para mirar a este
chico que, francamente, le había fascinado desde que le vio y le había hecho
sentir esas cosquillas en el vientre que solo podía tratarse de atracción. No
es que él quiera algo serio con este
chico, quizá solo molestarle un poco.
– ¡Pues me tiene sin cuidado si mi carácter
te gusta o no!
– No es que me importe tu carácter
complicado, por el contrario, puede que eso me atraiga más de ti… – Una vez más
las palabras del japonés truncaron los pensamientos del morocho… – Mi desayuno…
– Sonrió prepotente, y bastó para que las conexiones neuronales del morocho
funcionaran de nuevo.
– ¡Te digo que no soy tu sirviente!...
– Por favor… – El japonés le lanzó un beso
volado, enrojeciendo un poco más las mejillas del morocho… – Después cocinaré
yo para ti, lo que quieras.
– ¿Qué me puede importar que tú cocines
para mí? – Cruzó los brazos y enarcó una ceja. Todo y que ya había desayunado,
no le vendría de todas maneras mal un segundo almuerzo.
– No lo sé, pero tengo hambre. Y si en dado
caso eso no te convence, entonces qué te parece esto… – El japonés inclinó el
cuerpo apoyándose sobre la mesa y sonriendo malicioso dijo… – Si tú no haces lo
que te pido, romperé el contrato con tu amigo Jaejoong y le harás perder una
jugosa ganancia.
– ¿Estás intentando chantajearme con algo
tan tonto como eso?
– Pues sí. Y si eso tampoco funciona,
entonces creo que terminaré comiéndote a ti sobre esta mesa, te pondré frutas
por todo el cuerpo, crema chantilly y…
– ¡Pervertido degenerado! – Y como si
aquello hubiera sido suficiente, el morocho se internó en las cocinas para
prepararle el dichoso desayuno al anfitrión y próximo cumpleañero… – ¿Qué
demonios le pasa a este sujeto? ¿Comerme? ¡Y con esa mirada lasciva tan
descarada!
ChangMin continuó con sus refunfuños en las
cocinas, donde –misteriosamente– nadie se encontraba. De hecho, cuanto más
prestaba atención a su alrededor, más se daba cuenta de que la mansión –para él
era más fácil pensarlo de aquella manera aunque ya hubiese quedado más que
claro que esta residencia pintaba más como un bendito palacio que cualquiera
con su estatus económico envidiaría– se encontraba muy silenciosa, y solitaria.
Ajeno a los gustos culinarios de su
anfitrión, del poco humor que se cargaba y los casi nulos conocimientos
gastronómicos (venga, que todos sus amigos saben que a él le encanta la comida
pero solo para ingerirla, prepararla siempre ha sido de sus actividades menos
interesantes) que posee, ChangMin simplemente se decidió en preparar un típico
desayuno occidental, panqueques y cereal. Si es que estas dos cosas no
requerían demasiado tiempo ni práctica. Unos minutos más tarde tenía dispuesto
aquello en una charola, además claro de jugo, leche y hasta agua caliente para
café o té, lo que al –idiota–
anfitrión le apeteciera; colocó incluso unas frutas, por si las dudas. Volvió
al comedor y dejó la charola sobre la mesa.
– Su desayuno, baka… – Gruñó con un ademán lejos, lejísimos de la amabilidad.
– Recuerda que te pedí que me llamaras
“Hayami-sama”… – El japonés sonrió, más bien satisfecho por la charola llena de
alimentos comestibles (que tienen buena pinta innegablemente, es decir, al
menos los panqueques, que el resto solo ha tenido que cogerlo de la alacena y
ponerlo allí), pero todavía enfatizando su deseo de fastidiarle la existencia
al morocho. ¿Qué iba a hacerle? Se le antojaba
y ya.
– No soy tu sirviente… – Increpó con el
humor alterado. Más alterado.
– Ven… – Indicó su regazo, a lo que el
morocho enarcó una ceja incrédulo… – Vas a alimentarme.
– ¡Disculpa! – Exclamó con más venitas
palpitándole en la sien.
– Solo ven y deja de quejarte, por dios… –
El japonés le jaló bruscamente haciendo que se sentara en su regazo, inmovilizándolo
con sus manos aunque claro que eso no era suficiente para contener al chico que
se notaba ejercitaba más de lo que aparentaba su cuerpo delgado y casi
enclenque. Casi, que está seguro la apariencia le viene más bien por la altura
nada más… – Si sigues con esa actitud me obligarás a besarte.
– B-be… ¡Besarme! ¿Quién demonios te estás
creyendo que eres? ¡Hayami no baka!
– ¿Baka? – Fue turno del japonés de elevar
una ceja con aire ofendido. Aunque en el fondo le seguía divirtiendo bastante
la personalidad del morocho.
– ¡Sí! ¡Y sé lo que significa, así que ten
por seguro que tenía toda la intención de ofenderte! ¡Suéltame! – ChangMin
pataleó, pero a los pocos intentos se quedó quieto como estatua.
Hayami había lamido su cuello.
Oh sí, tal cual.
La caliente y rugosa lengua del japonés se
había paseado descaradamente por su cuello.
– ¿Vas a alimentarme ya? – Mokomichi
preguntó con esa sonrisita. Ese gesto que el morocho había anotado ya en su
lista de “cosas detestables del Sr. Perfecto Hayami no baka” (la que por cierto
se acababa de inventar y sacar de ninguna parte en realidad).
– Voy a demandarte por acoso sexual… –
Gruñó, pateándose mentalmente porque la voz se le había salido estrangulada por
causa de ese sonrojo y una inexplicable (no iba a aceptarlo abiertamente)
calidez allá al sur que estaba poniéndole nerviosamente de pésimo humor.
– No tienes pruebas, además… – La sonrisa
en labios del japonés se curveó peligrosamente pervertida, quizá porque iba de
acuerdo a la mirada lasciva que le estaba lanzando al morocho… – Creo que te
gusta que te acose… – Le susurró al oído, notando cómo claramente le producía
escalofríos y se tensaba bajo su aliento tibio.
– ¡Definitivamente estás loco! – Estalló
totalmente fuera de sus cabales, tocado en su orgullo y sintiéndose sumamente
avergonzado.
ChangMin escapó del regazo de Hayami
corriendo por los corredores hasta el segundo patio y de allí al segundo piso,
encerrándose en su habitación. Concluyó sin embargo que no era nada normal en
él tener este tipo de reacciones.
– ¿Por qué mierda mi corazón late tan
aprisa? ¡Este sujeto casi me viola!
Continuará
Hhgafqhsuq mioooooo *-----*
ResponderEliminaromg casi me lo violan DD:!!!!
Eliminardebio poner mas empeño ewe XDDD
jlfsjlfjslfds HAYAMIN DAY!!!!!!!!!! FELICIDADES al baka mas lindo de todos que quiere a nuestro CM
ResponderEliminarOH MY hayami esta desatado y loquito como le hace esas cosas a CM.. pero se nota que se atraen..
quiero mas .. a la espera de la siguiente parte
jajaa disculpen no pude evitar reir, en serio MIn en que te metes por hacer favores jaja, pero que Hayami mas atrevido, no no la verdad hermosamente atractivo jaja
ResponderEliminarayy Min no te hagas, jaja que es lo que se mete cada vez en tu cabecita loca, no se por que pero desde el inicio sospeche que ese habia sido el trato comida jaja, no hay nada mas importante(de momento) que la comida para Min, seguramente jaja
debo decirlo me encanta ese MIn todo brabucon que solo le gusta comer juju, Hayami no baka debes consentirlo pero tambien molestarlo que asi es tan precioso juju
me encanta simplemente prefecto
gracias por una historia tan buena, que parejitas mas hermosas, solo Min anda solo pero no pues ya tiene a su Hayami, nada mas falta que coopere un poco y listo, lo ame, muchas gracias feli ;D
Los amo.
ResponderEliminarGracias.
Jojojojojojo te amoooooo *^* enserio este two shot esta GENIAL!!!!!! Ya quiero leer la segunda parte *A* como me rei con los celos de yunho, la pervertidera del raton queriendo delfin a la plancha en las noches xD y con changmin jajjajajajaj dios ese hayami es un mendigo pero creo q solo asi se puede conquistar a minnie claro agregandole una tonelada de paciencia jejjejej xD siguelo *o* claro cuando puedas y sin presion ^^ aparte es buena idea festejar a hayami que si creo ya es el novio oficial de minnie xD cuidate bexxs nos vemos en la conti :3 bye bye
ResponderEliminarHayami Day!!!!!!!!!!!!!! me encantaaaaaaaaaaaaaa hahaha pero si bien lanzado desde el inicio con el Changmin y los otros que lo dejan XDD, y aunque se resista Min caerá en las garras de Hayami no baka XDD
ResponderEliminarMe encantooo mcuahs gracias por compartirlo y estaré a la espera de la segunda parte *w*
OMG!! Hayamiiii~~~ xD es lo máximo está tratando de domar a la bella bestia de Chanming!! FIGHTING!! XD tú puedes! Está muy genial! *0*
ResponderEliminarsiiiiiiiii el hayami day! nuc xq me dieron ganas d ver el otro dia un poco de la vida d hayami y se nota q le encanta cocinas..q changmin es un suertudo xq ps a él le encanta comer xDDD y q una d su tipo ideal d cita serian solo los dos y hayami preparando algo pa su pareja y la idea del hayamin fue tan lindaaa!! *fangirl*
ResponderEliminarmori de risa con varias partes, pero sobretodo con el:
– Yo ya soy tu príncipe, baby. Para qué quieres conocer a otro… – Aclaró con recelo, rodeándole la cintura con marcada posesión.
cuando no chunnie siempre tan posesivo con su baby ^^ omo me fue tan dulce q sten todos mimosos -como siempre- hahaha cual pareja en luna de miel...
y la otra parte: ChangMin atacó sutilmente, las tripas tenían rato gruñéndole.
hahaha cuando no al hombre le da hambre... q en vrdd nuc a onde se le va la comida le tengo una envidia x eso xD
no ps y sobretodo el hecho dq se haya quedado pasmado con hayami!! ^^
>>mientras que ChangMin se quedó pasmado un momento. ¡Es que tenía la voz profunda y áspera! Eso es sexy, demasiado para ignorarlo.
pero la reaccion no la tiene ni con la voz de chunnie... me ha dado tanta risa q hayami se dejara d ser caballeroso y fuera directo al punto xDD
nuc xq y derre hasta joongie omma sabe de las intencions d hayami y x eso lo dejo no mas q se quedara xDD
saludos!!
omedetto hayami!!!!!!!!!
ResponderEliminarperdon la tardanza se cruzaron las actividades pero bueno..... Me encanta la primera parte y no me puedo imaginar lo que pasara hasta el dia del banquete, en el y lo que viene... sera muy divertido ver a Min en problemas.... matta ne
<3 yooso <3
jaja pobrecito de changminnie ahora hasta tiene que andar cocinando para hayami mientras sus amigos lo abandonan a su suerte
ResponderEliminarfeli continuare leendo se ve que se pondra muy interesante como siempre muchas gracias por el capi ah y me olvidaba feliz cumpleaños hayami ahora tienes a changmin a tu lado para que te llene de enormes besos repletos de amor y bueno aunque quiera negarlo un poquito de sarcasmo tambien pero que se le va hacer si te enamoraste de el jeje
Amo como escribes esta pareja, me encanta el caracter todo agridulce de changminnie y hayami que lo sabe controlar y sacar de sus casillas.Espero pronto la continuacion de esto ,muchas gracias Felina
ResponderEliminarGracias a ti, me encanta en HayaMin! Es que Tsukii tiene razon, Hayami es el unico que puede controlar el caracter tan especial de Min xD Ademas, se complementan bien, Hayami cocina y Changmin ama comer!
ResponderEliminarLas escenas YooSu y YunJae estan geniales. Yunho celoso es tan lindo!
Gracias Felina, y espero la continuacion :D
jejeje.....no pues hasta q llegó alguien q lo intimidó a nuestro Mincito῀῀... y q manera de hacerlo῀῀ XDDDDD
ResponderEliminarpero definitivamente esa es la única manera de llegar a Min xq si se quedan de pasivos esperando a q Min de el 1er paso o algo se harán viejos ademas Hayami es el hombre Perfecto para Minie῀ *w*....
y FELIZ CUMPLE HAYAMI῀῀!!!!.....
segurito q lo selebraràs de la mejor manera con tu Minie <3 <3
Gracias Feli x regalarnos a esta parejita q definitivamente se a ganado nuestro corazón!!!!! x poner a este hombre perfecto para nuestro complicadito Min XDDD....
Ahhhhhhh siii felicidades a Hayami ♥♥♥♥♥♥♥ el lindo, sexy y paciente novio de Changmin ♥_♥
ResponderEliminarJajajajajajajajajajajjaja ay no, fue muy gracioso, no paraba de reír, son un amor estos chicos ♥_♥, más cuando Jae dice "No le haga caso a Yunho, quedó marcado por una película que vio en su niñez" no podía aguantar la risa x_x, jajajajajajajajajaja más de imaginar a Junsu grabando la pelea de Yoochun y Yunho para después mostrársela a Jaejoong *o*
Ahhhhhhhhhhhhh Hayami, por Dios!!!!! tan directo O_O jajajajajaja casi viola a Changmin *o*, ahhhhhhhhh HayaMin!!!!!!!! los amo tanto ♥_♥
Quiero ver que más pasa *o*
Muchísimas gracias Feli!!!!!! y Maki!!!!!!!!!! *o*
Udkwdnqit Todo por culpa de Jaejoong... ¡Gracias Jae! -le tira corazones-
ResponderEliminarPor Diooos~ Hayami baka se viola a Changmin, y lo peor es que me encanta *Q* Changmin lleno de frutas y con crema no es mala idea... Me gustaria verlo asi *w* ayyyyy su corazon late fuerte, me encanta. En verdad estoy anticipando la proxima parte es que yo se que se lo van a montar de lo lindo y Changmin disfrutara mucho que su baka lo embista ruda y salvajemente mientras Changmin lo calienta con sucias frases en japones *A*
Me encanta que el bello japones sea incluido completamente en el blpg :)
Feliz cumpleaños Hayami -le tira muchos corazones gheis-
JSGFJHSDGFJHSGDJHJFSHDJKSHDF ME MUEROOOOOOOO♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥
ResponderEliminarOH POR DIOS♥♥♥ Te has ganado la lotería sin saberlo Shim Changmin xDDD jdsgfhjsdgjhsgfjsdf my god♥ Hayami es PERFECTO! P E R F E C T O ♥♥♥ *se muere* aunque ese gusto suyo por fastidiar al peque xDD Omg los amo♥ Y el YunJae y el YooSu son un amooor *u* xDD Cuando no Chun pensando en llevarse a su baby a la cama y Yunho celoso hasta los huesos~ Aigooo, estos 6 me hacen la vida feliz♥
Omooo~ No puedo esperar a la contiii >w< Miles de gracias Feli!!!♥♥♥
Tu sabes que soy una fiel seguidora del HayaMin y los amo mucho mucho gracias a ti y a Maki que me lo presentaron como novio de MinMinnie ;w; ♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥
Jajaja ja pinche Hayami, te estas ganando a pulso el que ChangMinnie quiera golpearte xD después no te quejes del maltrato ya que a pulso te lo esas ganando xD
ResponderEliminaraaaaaa pobre baby todo acosado!!!
ResponderEliminarhahahahaha la verdad he muerto de risa
Hayami es el perfecto complemento para nuestro berrinchudo ♥
Gracias ^^
me ha encantado,realmente hayami se ha ganado un lugar en mi corazon(bueno en el corazon de tod@s)
ResponderEliminargracias felina por el fic
DIOS espero el contiiii ...... ESTA BELLOOOOOO!!!!!! XD Y ESTA DEMASIADO GRACIOSO XD XD XD ... SOLO QUIERO LA PARTE Q SIGUEEEEE XD XP .... gracias por este shot..... Aunque solo sea la primera larte XD
ResponderEliminarHahahahahhaha che Hayami pervertido! !!! Me encanta como es con Changmin. Y por alguna extraña y masoquista razón me encanta el carácter agrio de Changmin. Esperare actu.. gracias Feli hasta la próxima
ResponderEliminarasdfgasdfg
ResponderEliminarHasta ahorita puedo leerlo!! y en verdad que buen aniversario xDD
Hayami me cae bien xDD siempre pone nervioso a Changmin espero el otro cap
uff hasta q por fin lo pude leer...
ResponderEliminarY un feliz cumpleaños al baka mas lindo, atento, atractivo, sexy y sobre todo muy pero muy paciente... y q se ha ganado un lugar en mi kokoro, junto al titulo de novio oficial de nuestro Minnie =D
wiiiii estuvo bello bello, JJ siempre es el autor intelectual de las aventurillas de su hijo Minnie hehe xD!!! y como siempre Yunho y Yoochun haciendo gala de sus celos hehe y cuando no Chunnie pensando siempre en correrle mano al delfin donde sea hahaha
owwww Hayami me salio todo pervert, haciendo sonsancarle de sus casilla a Changmin y acosandolo, eso no tiene precio *mori* xD y con todo ese humor q siempre se carga Minnie, pero ya cayo, lo super desde q lo vio y penso q era sexy... como amo el HayaMin <3
Gracias Feli pexioxa... espero la continuacion =]
*Mil años después aparece y ChangMin la patea por no estar en el cumpleaños de su baka xDDD*
ResponderEliminarBueno ya solo sjhdasjhsajkdshagdhsagdhgsahdgsahdghsagdhasgdhsagdhsahdgsahgdshadgsadh♥
Mi YooSu y Mi YunJae tan monos así todos sdhashsjahdjsahdjsahjdhsj♥ Amándose forevaaa xDDD y sus celishossss jksdasjdhsagdhsagdhsagdh♥
Y Hayami tan guapo y perfecto y pervertido que es~~~ Mi pobre bebe *apachurra a ChangMin y este la aleja enojado* Todo enojadoteee aunque se que le gusta xDDD shgdasgdhasgdhsagdhsagdhgsahd♥
Gracias Feli *le lanza YS beshooo*
♥♥♥~~~
XDDDDDDDDDDD esta tan divertido XDD gracias espero el prox capi. gracias FELI!!
ResponderEliminarOMG!!! casi muero xD
ResponderEliminares tan genial esta pareja :D
dios que divertido es que me los imagine y mori de la risa,....
ResponderEliminarAhhhhhhhh no puedo creer que me tomo tanto tiempo el comentar este fic ;o; y es que recien lo leo, en definitiva debo dejar de accidentarme(?) mas seguido u.u , bueno lo importante es que aca estoy comentando por fin , como siempre me encnato *W* , enserio me he matado de la risa XDDDD pobre changminnie casi me lo violan(?) bueno ni tanto , que bien que a él le gusto XDDD aunque con esto creo que ya no le va a hacer ningun favor a jae :3
ResponderEliminarHayami enserio si que es un desvergonzado me gusta *O* , todo directo,acosador y con paciencia infiita XDDD genialllllllllllllllllllllllll
me encanto feli ♥♥♥ leere el sgte ;D
*0* ese Hayami si que se las trae!!que habría pasado si Changmin se dejaba violar x este??? *~*
ResponderEliminarhuhu hasta que vemos a un Hayami un poco mas arriesgado y atrevido yo se que algo se trae entre manos ¬.¬
ResponderEliminarDespúes de leer Istar, esta pareja me empezo a gustar mucho más!!
ResponderEliminarEste Hayami acosador.. de minissss jajajaj
Me encantó el capitulo muy bueno
No recuerdo haber leído este pero como siemore está genial!!!! Amo las peripecias de ChangMin te juro que las amo!!!
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